Nos llegó la denuncia de la docente Silvina Rocío Clauser de la ciudad de Zapala, que publicamos a continuación.
Jueves 11 de agosto de 2016
Desde el principio de los tiempos aquellas personas con altos cargos jerárquicos requieren de ciertas comodidades para cumplir con sus labores, importándoles muy poco la necesidad de su prójimo, sea cual fuera su condición.
Trabajo en la Escuela N°99 San Juan Bosco en la ciudad de Zapala, a la que asisto todas las mañanas. El pasado lunes 8 de agosto, estuve de turno y al llegar temprano me dirigí al sum de la escuela para recibir a los niños. Mientras cuidaba de ellos observé unos caloventores ya instalados, lo cual me pareció novedoso y provocó en mí una sensación de alegría ya que esto iba a beneficiar a toda la comunidad educativa debido al frío que se vive en ese sector de la institución. Me dirigí a mi directora para conversar sobre el beneficio de éstos instrumentos de calefacción para la escuela y para infortunio de la misma me comunican que esos caloventores fueron instalados para una reunión de supervisores, pura y exclusivamente para ellos, a los cuales no les basta la calefacción del mismo sum por lo que requieren de mayor comodidad y satisfacción. Lo peor de esto es que luego de terminada la reunión los caloventores serán retirados de la institución.
Ahora reflexionando sobre lo sucedido, ellos, los supervisores, necesitan calefaccionarse para sentirse cómodos y a gusto en su lugar de trabajo ¿Acaso los niños y los docentes de la escuela no necesitamos de ese tipo de necesidad básica para estudiar y trabajar, para sentirnos a gusto en un espacio en el que convivimos más de cuatro horas? Esto me da a pensar que sólo los supervisores son personas que necesitan estar a gusto ¿No somos personas la comunidad educativa de la escuela?
Esos instrumentos de calefacción deben quedarse en la escuela, sin necesidad de pedir por favor, pero por lo que se ve y experimenta es mejor “no hacer nada” o poco por las instituciones. Cuántas cosas hay que rever en el sistema educativo. Creo que ya es tiempo de ponerse a trabajar seriamente y no hacerse ver en las escuelas solo cuando hay alguna conveniencia de por medio.
