En una votación secreta del senado provincial, el ministro de Cornejo fue aprobado para ocupar un cargo en el máximo tribunal. Desde el FIT denunciaron que "han puesto todos los organismos de control de la provincia bajo supervisión directa del poder ejecutivo"
Martes 19 de junio de 2018 13:48
Este martes, el senado provincial realizó la votación secreta para aprobar la postulación del Ministro de Gobierno, Dalmiro Garay, como miembro de la Suprema Corte mendocina. El acceso de Garay a la corte, se produce tras la jubilación de Alejandro Pérez Hualde.
La postulación de Garay había recibido numerosas críticas, ya que el ahora Juez de la Corte se desempeña como Ministro de Gobierno y fue uno de los redactores del "Ítem aula", sobre el cual la corte tuvo que fallar recientemente. "Elegir a su propio ministro de gobierno, al igual que lo había hecho Jaque, demuestra que la única intención es tener una justicia adicta que le de legalidad a las medidas cuestionadas que toma el gobierno", había denunciado el senador del FIT Lautaro Jimenez previo a la sesión.
En la votación secreta, Garay obtuvo 28 votos a favor y 9 en contra, pese a que el oficialismo cuenta sólo con la mitad de las bancas en la cámara alta. Es decir que, nuevamente, el peronismo garantizó que el gobierno provincial avance con sus planes. "Esta suma del poder público que está teniendo el Poder Ejecutivo es un aval político que le ha prestado este senado con el aval del peronismo, que ha facilitado estas votaciones" denunció Jimenez en la sesión.
Foto: Diario Los Andes
Los senadores y senadoras votan de manera secreta, por lo cual no se sabe quienes avalaron la candidatura y quienes lo rechazaron. Un método arcaico y oscurantista
Te puede interesar: El FIT rechaza la postulación de Garay para la Suprema Corte
Desde el FIT también denunciaron el rol del senado en avalar el avance de Cornejo sobre la justicia y los organismos de control del Estado: "Es desde aquí que se está avalando una serie de nombramientos que han puesto a todos los organismos de control de la provincia bajo supervisión directa del poder ejecutivo. Es desde aquí, con este mecanismo de votación secreta, que se ha puesto al frente de los organismos de control, de la Procuración General de Justicia, y ahora al frente de la Suprema Corte al segundo juez que designa Alfredo cornejo, además de decenas de jueces y fiscales que se han designado acá".
Jimenez también cuestionó el mecanismo de votación secreta, por el cuál no se sabe qué senador votó a favor y quien en contra de la postulación: "no se trata en este caso de impugnaciones de tipo personal, aunque cabria motivos: hemos sido perseguidos por el como ministro de gobierno. Si el gobernador llevaba una cruzada para poner en discusión la calidad de la corte, ¿por qué apela a estos mecanismos? Evidentemente no tenia ningún interés cierto en una reforma constitucional, en una discusión profunda sobre la justicia, quería el control y la mayoría numérica. Logrando que se jubile un Juez que consideraban díscolo, este problema evidentemente se resuelve para él".
"38 senadores, de forma secreta, entre cuatro paredes, eligen a quienes imparten justicia para miles de personas. Los jueces tienen ser electos por el voto popular", denunciaron desde el FIT
Te puede interesar: Mendoza: avanza en el senado la propuesta de Barbeito para la elección de los jueces
Además, el senador del FIT recordó que el propio gobernador había cuestionado este mecanismo durante la última campaña electoral, al denunciar que: "acá se rompen incluso compromisos de campaña. En el debate en la UNCuyo de los distintos candidatos a gobernador, Cornejo se había comprometido a terminar con estas votaciones secretas. Había señalado que este era un mecanismo oscuro y arcaico, como hemos señalado desde hace cuatro años con Noelia Barbeito".
"Cornejo se había comprometido a impulsar una transformación y no ha habido ni una iniciativa para avanzar en ese sentido", concluyó Jimenez, quien solicitó el tratamiento del proyecto de elección directa de los jueces de Mendoza, presentado por Noelia Barbeito. El proyecto presentado, establece la elección popular de jueces y que estos cobren como una maestra, para terminar con los privilegios que gozan. Al respecto, Barbeito fue contundente al afirmar que "nos parece que nuevamente hay que poner sobre el tapete esta discusión: 38 senadores, de forma secreta, entre cuatro paredes, eligen a quienes imparten justicia para miles de personas. Los jueces tienen ser electos por el voto popular".