Para este martes estaba pedida una sesión especial en diputados para discutir proyectos que ponen en cuestión el acuerdo con el FMI. La misma fracasó porque el peronismo federal y el massismo no dieron quórum, lo cual fue callado por el kirchnerismo. Es una muestra más de a dónde lleva la estrategia de unidad del peronismo.
Fernando Scolnik @FernandoScolnik
Martes 19 de junio de 2018 17:38
Este martes volvió a quedar claro, una vez más, que el macrismo no gobierna solo. Como sucede desde que Cambiemos llegó al poder, el peronismo demostró otra vez que juega un rol fundamental a la hora de sostener las políticas de ajuste y entrega del Gobierno de los ricos.
Vale recordar, una vez más, que el macrismo, que es minoría en ambas cámaras del Congreso Nacional, no podría prescindir de esta ayuda indispensable para gobernar.
En esta ocasión, el peronismo federal y el massismo impidieron, al no dar quórum, que se pusiera en discusión en el Congreso el acuerdo con el FMI, a pesar de que el mismo es rechazado por la gran mayoría de la población, como demuestran todas las encuestas, e involucra un plan económico que afectará las condiciones de vida de millones de personas.
De esta forma, estos sectores del peronismo le dan vía libre al macrismo para que continúe con la aplicación de lo acordado en Washington, que implica un fuerte ajuste fiscal que hará que se sientan aún más profundamente en los próximos meses la recesión económica y la inflación, mientras lo único que se garantiza es que se siga pagando la ilegítima deuda pública a los especuladores.
La historia no es nueva, ni siquiera en lo referido a la deuda externa y la relación con el capital financiero internacional. En el comienzo del Gobierno de Cambiemos esos mismos sectores habían votado la aprobación de la entrega a los fondos buitre, con lo cual se inició un camino de endeudamiento vertiginoso, que junto con políticas de ajuste y transferencias de ingresos hacia el gran capital, culminó en la crisis actual.
En el medio, también le facilitaron al macrismo presupuestos de ajuste y otras leyes.
El doble juego del kirchnerismo
Los diputados del kirchnerismo, que sí estuvieron presentes en la sesión, usaron la ocasión como tribuna para denunciar el acuerdo con el FMI, sabiendo que sus palabras no tendrían consecuencia alguna.
Su jefe de bloque, Agustín Rossi, señaló que “el Gobierno sabe que esto no es beneficioso, menos para los sectores populares”, y que a esta situación se llegó producto del endeudamiento y del acuerdo con los fondos buitre, el cual fue “mal hecho, a las apuradas, oneroso para los argentinos”.
Sin embargo, el mismo Rossi hizo un estruendoso silencio sobre el rol de otros sectores del peronismo. Evitó decir, por ejemplo, que ese acuerdo con los fondos buitre fue aprobado gracias a los votos de la mayor parte del peronismo tanto en el Senado como en la Cámara de Diputados.
En el mismo sentido, Rossi y el resto de las espadas parlamentarias del kirchnerismo omitieron decir en sus discursos que la sesión se este martes fracasó debido a la falta de quórum de la cual fueron responsables el peronismo federal y el massismo.
Este silencio, por supuesto, no es casual. El mismo Rossi, hace poco tiempo, había blanqueado que su estrategia es “construir la unión con todos aquellos que quieran ser opositores. Desde el FIT hasta el Frente Renovador, son todos posibles compañeros”.
La política electoral de “unirse todos contra Macri” para ganarle las elecciones en 2019, no es entonces más que una trampa contra el pueblo trabajador. La unidad con los que votan las leyes de ajuste, de entrega, la sumisión al capital financiero internacional, con los gobernadores e intendentes “opositores” que aplican el ajuste y con los burócratas sindicales cómplices que dejan pasar los ataques, no solo lleva a no enfrentar los ataques actuales, sino a preparar nuevos embates contra el pueblo trabajador.
Acuerdo con el FMI sí o no: que el pueblo decida
En su discurso durante la fracasada sesión, Nicolás del Caño explicó que “queríamos discutir un proyecto que plantea la necesidad de una consulta popular vinculante. Para que sea el pueblo el que decida si quiere o no este pacto con el Fondo Monetario”.
La política que levanta el Frente de Izquierda es clara. Denuncia que el acuerdo con el FMI es “un pacto firmado a espaldas del pueblo trabajador, inconsulto y que además incluye cláusulas o memorándums secretos; pacto cuyas principales víctimas serán nuevamente los trabajadores y el pueblo pobre, que verán incrementadas sus penurias producto de la profundización del ajuste que esta nueva entrega al capital financiero internacional implica”.
"Nuestro proyecto plantea la necesidad de una consulta popular vinculante para que sea el pueblo el que decida si quiere o no este pacto con el FMI. Claramente no lo quiere", dice @Nicolasdelcano. #NoAlFMI pic.twitter.com/7ZdMw1RJgV
— Frente de Izquierda (@Fte_Izquierda) 19 de junio de 2018
Por esos motivos, el objetivo del proyecto de ley presentado por el Frente de Izquierda es “que los principales afectados e involucrados en esta monumental toma de deuda sean quienes se pronuncien sobre una nueva escalada en el endeudamiento que recaerá en las próximas generaciones de argentinos y argentinas, con el saldo de miseria y penurias que está tan cercano en nuestra memoria”.
"Argentina Federal y el massismo [AUSENTES] votaron leyes de ajuste y fueron cómplices del Gobierno. Y ahora nos dicen que necesitan que vengan los ministros a explicar de qué se trata el acuerdo. ¡Está clarísimo de qué se trata!", sigue @NicolasdelCano. #NoAlFMI pic.twitter.com/0PEELS70tG
— Frente de Izquierda (@Fte_Izquierda) 19 de junio de 2018
Frente al debate, desde el PTS-Frente de Izquierda se plantea como una medida elemental el desconocimiento del acuerdo con el FMI y el no pago de la deuda pública, que es ilegal, ilegítima y fraudulenta, como algunas de las medidas fundamentales para que la crisis la paguen los capitalistas y no que se consume un nuevo saqueo contra el pueblo trabajador.
Con estas banderas, y los reclamos inmediatos del pueblo trabajador como el rechazo a los despidos, la reapertura de las paritarias y el apoyo a todas las luchas, el PTS-Frente de Izquierda impulsará una participación activa en el paro nacional del 25 de junio, exigiendo a su vez que la medida no sea aislada sino el comienzo de un plan de lucha con continuidad hasta culminar en una huelga general activa que derrote el plan de ajuste.
Fernando Scolnik
Nacido en Buenos Aires allá por agosto de 1981. Sociólogo - UBA. Militante del Partido de los Trabajadores Socialistas desde 2001.
