Un día después del pacto entre el Ministerio de Educación y las direcciones del Colegio de Profesores, miles de docentes se movilizaron en distintas regiones del país, rechazando una vez más los ejes propuestos por ambas instituciones, sin consultar a las bases.
Martes 25 de noviembre de 2014
El jueves 20 de noviembre se desarrolló una reunión, encabezada por Nicolás Eyzaguirre, Ministro de Educación y Jaime Gajardo, Presidente del Colegio de Profesores y militante del Partido Comunista, quien declaró a la prensa que se “llegó a acuerdo con los 5 puntos de la Agenda Corta”, y agregando que “esto ha sido fruto de la construcción que hemos elaborado entre todos, con la voluntad del Ministerio de Educación. Esto está firmado por el Ministro, por la subsecretaria y por los cinco integrantes del ejecutivo del Colegio de Profesores”. Por su parte, Eyzaguirre fue claro en valorar la instancia y recalcar que “se abordaron los problemas más apremiantes, pero no todos”. Se realizarán mesas técnicas para abordar, entre otros temas, las pensiones para los profesores y la carrera docente. Estas mesas serán lideradas por la subsecretaria de Educación Valentina Quiroga.
Según la página oficial del Colegio de Profesores, los puntos acordados son los siguientes: titularidad para los profesores contratados; bono de retiro por 21 millones 500 mil pesos (cerca de 35 mil dólares) a las 37 horas y proporcionales; descongelamiento del Ingreso Mínimo Docente y reajustado con IPC acumulado; y dos mesas técnicas: una para tratar el agobio laboral, y otra que buscará una reparación para los profesores afectados por la Deuda Histórica que mantiene el Estado chileno con los profesores desde la municipalización de la educación en 1981, cuando no se les reconoció un reajuste que se les había otorgado pocos meses antes junto a otros trabajadores estatales.
Nueve horas y media duró la reunión, un largo tiempo para que simplemente se haya llegado al acuerdo de generar nuevas mesas técnicas para “conversar las demandas”, como por ejemplo, la exigencia de que el Estado pague la deuda histórica que se le debe a miles de profesores, quienes frente a esto sólo tienen la seguridad de que será algo “conversado”. En esto, Eyzaguirre fue muy claro en reiterar que sólo se concretarán lo que para las autoridades es “apremiante”, dejando fuera las reales exigencias de los profesores, demandas históricas que son la punta de lanza de las masivas movilizaciones que no han cesado.
La movilización de base
45 mil docentes en 150 comunas del país, son los que llevan dos semanas de paralización en prácticamente toda la educación municipal, un fiel reflejo de la rebelión que se está viviendo dentro de las bases del profesorado, quienes han protagonizado un notable levantamiento; con masivas movilizaciones, marchas, cortes de tránsito, enfrentamientos con la policía producto de su represión, videos, “cacerolazos”, entre otras acciones para defender la movilización. Esta rabia, producto de años de agobio laboral, precarización, malos tratos, indiferencia, aumentó tras conocerse el último acuerdo, el cual deberá ser ratificado por las bases, y el que ya levantó desconfianza y rechazo.
Este descontento hacia las direcciones del Colegio de Profesores se vio reflejado en la masiva movilización nacional que partió en Plaza Italia y recorrió la Alameda, hasta llegar a Plaza Los Héroes. La multitudinaria marcha se desarrolló tan sólo un día después de la polémica reunión, y congregó a miles de profesores en distintas regiones del país como fue en Valparaíso, Antofagasta, Arica, Tarapacá, Biobío, Santiago y La Araucanía; demostrando que ningún acuerdo pactado entre autoridades, sin consulta a las bases, va a acallar la voz de los miles de docentes que igual marcharon contra el acuerdo y exigiendo la renuncia de Jaime Gajardo.
Ante esta situación, hay distintas posiciones respecto a lo que deben hacer los profesores ante la burocracia de Gajardo y las migajas que está pactando con el Mineduc. Mario Aguilar, secretario del Colegio asegura que “seguirán ejerciendo presión para alcanzar mejoras reales en las demandas docentes”, y también plantea la necesidad de realizar una nueva consulta nacional de los profesores ante esta la nueva propuesta. En relación a la consulta, desde el Colegio de Profesores se ha planteado la posibilidad de realizarla, pero sólo con derecho a ejercer el voto los profesores colegiados (que están inscritos en el Colegio de Profesores), dejando de lado a todos los demás docentes que no están inscritos.
Por otra parte, en la página oficial de la agrupación Nuestra Clase, y en sus materiales, se plantea un total rechazo hacia la propuesta emanada desde el Mineduc, y también una desconfianza hacia una nueva consulta nacional, pues está el antecedente de lo que sucedió en agosto cuando los profesores rechazaron la propuesta, y Gajardo igual llevó adelante sus planes y maniobras. Según esta agrupación, los profesores deben confiar en sus propias fuerzas y en los métodos de democracia directa, donde las resoluciones se deciden en asambleas de base (como es el caso de la comuna de Maipú y la región de Antofagasta); y además levantar una Asamblea Nacional de Delegados de Base que decida no sólo el rechazo o no hacia la propuesta, sino que también decida los pasos a seguir de la movilización nacional, apostando a paralizar completamente la región Metropolitana.
El Paro Docente continuará esta semana, en distintos puntos del país, mientras las autoridades siguen insistiendo en un acuerdo que nada tiene que ver con el sentir de las bases; las cuales, pese al llamado del gobierno de deponer la movilización, seguirán impulsando la rebelión de los profesores.