El 12 de marzo se realizará este Encuentro, para dar pasos hacia un gran movimiento de mujeres contra la violencia y la precarización laboral.
Domingo 6 de marzo de 2016
A más de cien años de la conmemoración del 8 de marzo Día Internacional de la Mujer, las condiciones de miseria, opresión y explotación para las mujeres se mantienen, razones por las cuales cobra vigencia la lucha por nuestros derechos.
En México, enfrentamos la precarización laboral y la violencia muy cruentamente, ocupamos 70% de los trabajos precarios, en los cuales vivimos hostigamiento laboral y sexual, además de cargar con dobles o triples jornadas de trabajo sin pago y percibir menores salarios que nuestros compañeros por el mismo trabajo.
Además, la situación de violencia se expresa en fenómenos como el feminicidio y la desaparición de mujeres, los cuales se han extendido como cáncer a todo el territorio nacional al amparo de la militarización, arrebatando la vida a 7 mujeres cada día.
Esto mientras a nivel nacional la Iglesia y el Estado siguen pactando criminalizar nuestro derecho a decidir, al mismo tiempo que lanzan campañas de odio contra los derechos de la diversidad sexo genérica, encubren pederastas.
En la Ciudad de México este 8 de marzo llega en el marco de la Nueva Constituyente, convocatoria que tiene un carácter profundamente antidemocrático puesto que sólo estará integrada por 100 constituyentes y sólo 60 serán elegidos por el voto universal.
Frente a ésta, el debate por los derechos de las mujeres se ha hecho presente, encabezado por funcionarias del gobierno de la CDMX como Patricia Mercado, Secretaria de Gobierno, y Teresa Inchaustegui, titular de Inmujeres DF, además de estar acompañadas por decenas de ONG´s.
El espíritu del 8 de marzo se hace presente en la lucha de las trabajadoras despedidas de intendencia del Instituto de Educación Media y Superior y del Inmujeres DF, que luchan por trabajo digno, basificación y contra el outsorcing. Mujeres que enfrentan despidos, hostigamiento y represión por parte del Gobierno de la CDMX por organizarse para exigir sus derechos.
Mientras la ciudad se pinta de rosa y el Gobierno perredista de la CDMX construye un discurso a favor de las mujeres y los derechos humanos, las cifras de violencia hablan de una situación distinta, porque en esta Ciudad desaparecen más de 3 mujeres por día, de la mano del aumento del feminicidio, redes de trata y crímenes de odio. Todos los días viven en terribles condiciones viven miles de mujeres, esto evidencia la legalidad de la “semi esclavitud femenina”, siendo este gobierno perredista el primero en utilizar mecanismos como el outsorcing para contratar sin ninguna garantía de estabilidad laboral, como lo denuncian las trabajadoras de limpieza. Este gobierno antidemocrático despide y amedrenta a las trabajadoras que deciden alzar la voz.
Por todas estas razones convocamos a un Encuentro Metropolitano de Mujeres de Pan y Rosas este 12 de marzo. Un espacio que nos permita reflexionar sobre esta situación. Además, las invitamos a movilizarnos junto a nosotras el 8 de marzo para hacer más fuerte la voz de las trabajadoras que luchan contra los despidos, madres que buscan justicia para sus hijas asesinadas.
También convocamos a este Encuentro porque consideramos que frente a la Constituyente, las mujeres no tenemos quién represente nuestros intereses, entonces ¿Qué perspectiva para las mujeres frente a la Constituyente en nuestra ciudad? ¿Qué camino para luchar por nuestros derechos?
Consideramos que debemos luchar para que la voz de las mujeres, trabajadoras y estudiantes, mujeres diversidad sexual se escuche. Para que las demandas de las mujeres de más abajo estén presentes. Por eso es que las estudiantes, jóvenes y trabajadoras que impulsamos el Encuentro somos parte del impulso de una aspirantía a candidatura independiente, que retoma nuestras demandas y reivindicaciones.
Este espacio debe fortalecer nuestra organización, es un lugar para compartir nuestras experiencias. Porque lo que sufrimos diariamente no es meramente "algo personal"; en realidad, somos miles de mujeres las enfrentamos estas mismas experiencias, no estamos solas y podemos organizarnos contra todas las situaciones de violencia machista que vivimos producto de nuestra opresión milenaria.
Hay que conquistar la voluntad de cientos de nosotras para organizarnos en centros de trabajo, escuelas y colonias y luchar por construir una gran movimiento de mujeres, que pelee en las calles con independencia del gobierno, para poner fin al feminicidio y la violencia, contra la precarización laboral y por el triunfo de las luchas de las trabajadoras.
Vayamos todas al Encuentro Metropolitano de Mujeres “Pan y Rosas”. ¡Abran paso a las mujeres jóvenes y trabajadoras! ¡Alto al feminicidio, la violencia hacia las mujeres y la precarización laboral! ¡Por una Constituyente libre y soberana!
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