Publicamos a continuación la nueva declaración del grupo March to Socialism de Corea del Sur, con el que la Fracción Trotskista - Cuarta Internacional viene manteniendo intercambios políticos y debates fraternales. Esta declaración del 5 de diciembre propone una salida desde los trabajadores y los sectores populares para que la crisis política no quede en manos del Congreso o el Tribunal Constitucional.
Jueves 5 de diciembre de 2024 10:10
El régimen político de Corea del Sur está buscando las formas de cerrar por arriba la crisis abierta con la imposición de la ley marcial y el intento de autogolpe del presidente Yoon Suk-yeol. Mientras en que el Congreso quiere votar un impeachment para dejar en su lugar al primer ministro Han Deok-soo, otros esperan que se abra una investigación desde el Tribunal Consitucional. Desde March to Socialism plantean que hay que tirar al presidente con la huelga general y la movilización popular.
¿Dejaremos nuestro destino en manos de la Asamblea Nacional (Congreso) y entregaremos el poder al primer ministro Han Deok-soo?
Esperar a que la Asamblea Nacional destituya a Yoon Suk-yeol es peligroso. El gobernante Partido del Poder Popular (PPP) ha decidido oponerse al impeachment en un intento de distender la situación política mediante la renuncia de algunos ministros. El partido está dispuesto a compartir el destino del gobierno de Yoon Suk-yeol. Incluso si algunos diputados del partido gobernante votan a favor del impeachment y la Asamblea Nacional aprueba la acusación de impeachment, habrá muchos problemas.
Si se aprueba la acusación de impeachment, la autoridad del presidente se transferirá al primer ministro, que estaba al tanto y discutió sobre la implementación de la ley marcial de emergencia con Yoon Suk-yeol en una reunión del gabinete, pero no lo reveló al público. Han Deok-soo además es un enemigo declarado de los trabajadores y el pueblo: nunca se opuso, ni una sola vez, a toda las arbitrariedades y ataques a los trabajadores que Yoon Suk-yeol cometió. ¿Debemos darle el poder a la persona que dirigió todas las atrocidades de la administración de Yoon Suk-yeol, incluidos los ataques al sindicato de logística y transporte utilizando la orden de reanudar el trabajo, la prohibición de la huelga de los trabajadores subcontratados en Daewoo Shipbuilding, el mismo que impulsó la semana laboral de 69 horas, la reducción de los salarios reales, la escalada de la crisis de la guerra y el ataque a las mujeres y las minorías? No! Todos aquellos que han servido a la administración de Yoon Suk-yeol deben ser castigados.
¿Esperaremos la decisión unánime del Tribunal Constitucional?
Por otra parte están los tiempos y mecanismo del Tribunal Constitucional para dictar el impeachment. El Tribunal Constitucional actual es un sistema de seis miembros de un total de nueve miembros. Según la Ley del Tribunal Constitucional, al menos siete jueces deben participar en la audiencia de un caso. Incluso si el caso puede ser escuchado y decidido dependiendo de la interpretación, la decisión de impeachment requiere la aprobación de los seis miembros. Si uno solo de los miembros vota en contra, Yoon Suk-yeol, quien planeó una rebelión contra el pueblo, regresará a su puesto ese mismo día.
También está la cuestión del tiempo. Incluso durante la lucha para destituir a la expresidenta Park Geun-hye de su cargo, pasaron más de tres meses desde la acusación de impeachment el 9 de diciembre de 2016 hasta la decisión del Tribunal Constitucional de impeachment el 10 de marzo de 2017. El período máximo para decidir sobre el impeachment del presidente es de 180 días. ¿Nos quedaremos de brazos cruzados mientras la administración de Yoon Suk-yeol esté en el poder durante este tiempo? No! tenemos que tirar ya al gobierno de Yoon Suk-yeol, un enemigo jurado de los trabajadores y al pueblo que no puede ser tolerado ni un solo día más, con la lucha obrera y popular.
¡Nuestra lucha no es un medio para lograr el impeachment! ¡Profundicemos la huelga general de los trabajadores y la movilización popular sin vacilar!
Los trabajadores y el pueblo ya están extendiendo la resistencia. Ahora que el grito por el derrocamiento de Yoon Suk-yeol se está extendiendo por todo el país, lo que es importante es la expansión a gran escala de la huelga general por parte de la Confederación de Sindicatos de Corea (KCTU). La clave de la lucha para tirar abajo al gobierno reside en la realización de una huelga general indefinida.
En el marco de la KCTU, el Sindicato de Trabajadores Metalúrgicos de Corea (KMWU) ha decidido realizar una huelga general de más de dos horas cada día, en turnos de día y de noche respectivamente, los días 5 y 6 de diciembre, y una huelga general indefinida a partir del día 11 si Yoon Suk-yeol no dimite. El Sindicato de Trabajadores del Transporte y Servicios Públicos de Corea (KPTU) decidió lanzar una campaña para destituir a Yoon Suk-yeol, comenzando con la huelga del Sindicato de Trabajadores Ferroviarios de Corea el 5 de diciembre y centrándose en las huelgas del Sindicato de Trabajadores de la Corporación de Tránsito de Seúl y del Sindicato Nacional de Trabajadores Auxiliares de Educación el 6 de diciembre.
La huelga general de la KCTU no puede ser un medio para presionar por el impeachment. Debe posicionarse como el medio más eficaz para que los trabajadores y el pueblo tiren abajo al régimen. Debemos combinar las huelgas parciales y las manifestaciones locales en el camino de una huelga general política y la resistencia de todo el pueblo en nuestra propia región y lugar para tirar abajo a Yoon Suk-yeol.
¡Impulsemos una huelga general de trabajadores sin vacilaciones!
Ahora bien, una huelga general de trabajadores no es algo que se pueda hacer o no hacer.
Yoon Suk-yeol no dimitirá por su cuenta. Además, como demuestra la declaración de Han Dong-hoon de que "hará todo lo posible para evitar que se apruebe el impeachment del presidente Yoon", también hay pocas posibilidades de que el partido gobernante pierda votos. Pensar en una huelga general solo con la condición de que "la acusación de la Asamblea Nacional fracase" o "si Yoon Suk-yeol no dimite" sólo conducirá a la derrota de la lucha para tirar abajo a Yoon Suk-yeol.
La situación actual está llena de incertidumbres, la única arma para salir de la situación es la ampliación de la huelga general de la KCTU. ¡Los trabajadores no son una variable más dentro de la ecuación. Qué estén en la calle es clave! La huelga general de la KCTU no es algo que se pueda hacer o no, sino una tarea que debe realizarse. En particular, la huelga general indefinida del KMWU programada a partir del 11 no es una"lucha que debe librarse si Yoon Suk-yeol no dimite", sino una lucha que debe realizarse para derrocar a Yoon Suk-yeol.
Los trabajadores combativos deben unirse para tirar abajo a Yoon Suk-yeol
Los trabajadores combativos deben presentarse como los sectores más decididos para realizar una huelga general política para derrotar al régimen. En primer lugar, emitamos una posición que llame a una huelga general para derrocar a Yoon Suk-yeol, independientemente de si se trata de un sindicato, una organización de base o un pequeño grupo.
En segundo lugar, no sigamos simplemente las directrices de los sindicatos industriales, sino que convirtámonos en el cuerpo principal de la lucha desde abajo para derrocar a Yoon Suk-yeol. Ampliemos nuestra presencia a través de la propaganda en el lugar de trabajo. Convenzamos a los compañeros de trabajo de por qué necesitamos una huelga general y discutamos cómo implementarla en el lugar de trabajo.
En tercer lugar, vayamos más allá de los muros de la fábrica. Combinemos las luchas en el lugar de trabajo y las regiones aledañas. A través de este proceso, ampliemos la solidaridad de todos los trabajadores de la región y fusionemos la huelga general y el levantamiento popular en uno solo.
Tirar abajo a Yoon Suk-yeol y pelear por nuestros derechos son una misma cosa: ¡que la clase obrera se ponga a la cabeza de esta lucha histórica!
Hay muchas razones más que la locura de la ley marcial para tirar abajo a Yoon Suk-yeol. Ha habido innumerables represiones, incluida la reducción de los salarios reales, un déficit de 60 billones de wones en los ingresos fiscales en 2023 debido a un recorte masivo de impuestos para los ricos que asciende a 30 billones de wones en 2024, la expansión de los trabajadores tercerizados y precarizados, la promoción de una semana laboral de 69 horas, los ataques a los sindicatos de la construcción y logística mediante órdenes de reanudar el trabajo y la supresión de la huelga de los trabajadores subcontratados en Daewoo Shipbuilding.
No estamos luchando para el poder lo termine teniendo una administración de Lee Jae-myung [el líder del principal partido de la oposición]. Tiremos abajo a Yoon Suk-yeol con el poder de los propios trabajadores, sin depender del impeachment de la oposición. La única forma de lograr un cambio real es a través de una huelga general de la clase trabajadora y la resistencia de todo el pueblo.
