En medio de una crisis nacional por la pandemia del coronavirus las patronales aprovechan para ajustar números, suspender, despedir y atacar a los trabajadores.
Viernes 20 de marzo de 2020 00:00
En Avellaneda la metalúrgica SIAT de Valentín Alsina, parte de la multinacional TENARIS, que opera en todo el mundo en la industria del acero; en las últimas horas tomó la decisión de rebajar el salario a sus trabajadores, quitando una conquista el "premio a la producción". El premio representa el 45% del salario de los trabajadores.
La situación se agrava en el marco de un régimen de suspensiones de actividades laborales que se viene padeciendo desde agosto del 2019, sin mencionar el difícil momento a nivel mundial por la pandemia del Coronavirus que no da tregua, en un acto de desconsideración con sus trabajadores evidencian sus intereses, no teniendo en cuenta que todos los insumos aumentan exponencialmente por la especulación y futuro desabastecimiento.
Mención aparte merece la actitud de nuestro gremio, la UOM seccional Avellaneda, quienes dictaron "su" cuarentena, dejando a los trabajadores sin representación, demostrando su irresponsabilidad y falta de compromiso hacia los afiliados, no solo SIAT, sino de todas la demás fábricas que dependen de esta seccional. Sin pronunciar medida alguna sobre la pandemia y cómo podría repercutir en los trabajadores. No dan una solución ni proponen nada para los cientos de talleres y pymes que componen la seccional que se verán afectados por la cuarentena. Tampoco elaboran un plan para poner un freno a las patronales que en medio de está crisis actúan como quieren sin importarles nuestras vidas. En Siam, por ejemplo, ni una sola asamblea tuvimos a pesar de que reina la incertidumbre entre los trabajadores.
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Desde el MAC como parte del PTS y el Frente de Izquierda estamos exigiendo al gobierno nacional que deje de gobernar por decreto junto con el macrismo y se realice una sesión extraordinaria del congreso para resolver medidas en favor de las mayorías. Que se prohíban los despidos, que se nacionalicen las industrias para poner la producción en función de las necesidades para solucionar esta crisis que desborda el sistema de salud actual, que se unifique la salud privada y pública. Ni un solo peso al FMI, que sean destinado todos los recursos a la salud. Que sean contemplados todas las familias que hoy no cuentan con trabajo fijo, que están en negro, precarizados o recibiendo una asignación.
Nuestro sindicato, la UOM debería de poner la fuerza de los metalúrgicos para exigir que las industrias se reconviertan en función de las necesidades actuales.
En Tenaris que se sueldan caños, tranquilamente se podrían fabricar tubos de oxígeno, camas o infraestructura para hospitales, en Siam tenemos máquinas que funcionan con moldes, que se pueden fabricar desde asientos para centros de salud, hasta baños químicos para todos los barrios donde viven hacinados no tienen acceso a sanitarios higiénicos. Además de un laboratorio donde fabricar alcohol en gel, etc.
El poder de la industria metalúrgica puede ponerse al servicio de la inmensa mayoría pero sin embargo nuestros dirigentes, esos hombres privilegiados que hace años llegan a fin de mes sin problema, tienen autos de lujos y mandan a sus hijos a escuelas privadas, elijen "su cuarentena y el sálvese quien pueda". En países como Italia y España donde la pandemia alcanzó niveles gravísimos los metalúrgicos salen a la huelga al no encontrar solución. Ni en los peores momentos los sindicatos dan una solución, dejan que el gobierno junto con las fuerzas armadas "se encarguen", hoy ya vimos como detuvieron a 14 manifestantes junto a un diputado. Se vuelve de primera necesidad la organización independiente en la perspectiva de recuperar las comisiones internas y los sindicatos. Necesitamos Comisiones de Seguridad e Higiene independientes y poner bajo control obrero las industrias y servicios para garantizar un plan en función de las mayorías.
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No dejes que en tu empresa, en tu barrio no se garanticen las medidas mínimas, escribínos, denunciá, organízate. ¡Los trabajadores desorganizados no somos nada, organizados lo somos todo!