“La vida es de unos pocos” hace su estreno en Rosario. El primer disco de la banda se presenta este viernes a las 22 en el Sindicato de Canillitas, Buenos aires 1346, en una fecha junto a Torito.
Úrsula Vivas @ursulavivas
Miércoles 12 de octubre de 2016 00:00
El disco - escondido detrás de una original revista- se titula “La vida es de unos pocos”. Se trata del primer disco de la banda saltorosarina Cuadrumano. En diálogo con La Izquierda Diario, dos de sus integrantes hicieron un recorrido desde el inicio de la banda, y marcan la salida del disco como la debida culminación de un ciclo. El guitarrista y vocalista Juan Casanovas, acompañado por el baterista Rodrigo Herrera, coinciden en señalarlo como un “proyecto significativo que viene desde los 13 y 14 años”.
Este viernes presentan el disco en Rosario, luego de haberlo estrenado en Salto en julio, ciudad natal de ambos. Además de los entrevistados, Cuadrumano está conformada por el otro vocalista de la banda, Chuco; Peru en guitarra y Juani en bajo.
En cuanto a los comienzos de la banda Juan Casanovas dijo: “Cuando conocí a Rodri teníamos 9 o 8 años, él era vecino de mi abuela nos empezamos a juntar. Nos encerrábamos tardes y tardes escuchando casettes y CD´s. Toda la rutina y nuestro vínculo era atravesado por la música, lúdicamente. A fines de 2007 nos juntamos a tocar, nos animamos a agarrar instrumentos, con batería de baldes y guitarra criolla. Luego se fueron sumando miembros; que caían por intereses musicales; yo tenía un amigo que sabía que tocar la guitarra y así entró, Rodri tenía un amigo, Juani, que luego se convertiría en el bajista”. “Muy de pueblo” reconocen entre risas. En la adolescencia empezarían a tocar en cumpleaños, eventos familiares, en la escuela.
Ambos coinciden en que cuando se mudaron a Rosario, finalizada la vida secundaria, la banda cambió. A propósito Rodrigo Herrera señaló que “la misma búsqueda de gente que te trate de alimentar y te muestre más música, fue el proceso que hicimos con Chuco y Peru, que conocimos acá en Rosario, y que le aportaron toda otra perspectiva a la banda. Y fue el impulso que necesitábamos para volver a empezar a grabar ese disco, con canciones que ya existían casi en su totalidad y que se reformularon. El disco no deja de ser un cierre de toda esta historia desde los 14 años. Hay canciones que tienen 7 años”.
Al respecto de los contenidos también advierten hubo un repensamiento y una resignificación. Juan apuntó que “tanto musicalmente como en cuanto a letra había que repensarnos hoy. Nosotros empezamos escuchando mucho rap entonces la poesía era muy explícita, estaba bien al frente y con los nuevos estilos que estamos experimentando ahora la estamos desarticulando un poco”.
Con títulos como “Que explote desde adentro”, “Nos dieron el tiempo para acostumbrarnos” – posiblemente EL tema del disco- , y el tema que le da el nombre “La vida es de unos pocos”, el disco y el arte que lo acompaña no disimulan su contenido político, y es presentado como “una revista de principios de siglo XX, con tipografías y colores amarillentos por el paso del tiempo. La tapa, realizada por un dibujante de Salto, tiene como línea transversal a Latinoamérica” asegura Juan Casanovas.
En tanto, los Cuadrumano destacaron la autogestión independiente del disco, de principio a fin, y profundizaron: “El diseño interno también está hecho por nosotros, y la gente que participó materialmente en el disco es cercana a nosotros. En los agradecimientos hay una mención especial a todos ellos, A por las experiencias compartidas”.