Hace unos días se rebeló un millonario entramado de corrupción dentro de varias connotadas universidades de los Estados Unidos. La corrupción beneficiaba a famosos y millonarios quienes pagaban altas sumas de dinero para que sus hijos entraran a la educación superior.
Miércoles 20 de marzo de 2019
Hace unos días el FBI publicó una enorme investigación que involucra a varias de las más prestigiosas universidades de los Estados Unidos.
La investigación muestra cómo, millonarios y famosos desembolsaban enormes sumas de dinero para que sus hijos pudieran saltar los exámenes de admisión y así asegurar un cupo que es extremadamente dificil de conseguir.
Dentro de las más de 30 celebridades norteamericanas que estarían involucradas varios actores y actrices de Hollywood como Felicity Huffman y Lori Loughlin.
Pero de entre todos los investigados también figuran personajes nacionales. En este caso el empresario Agustín Huneeus habría pagado más de 50 mil dólares (más de 30 millones de pesos) para asegurar que su hija entrara a una prestigiosa universidad norteamericana. En el fondo este caso rebeló cómo funciona la denominada "meritocracia" entre los ricos.
(Foto trucada para justificar que hija de Huneeus jugaría waterpolo
Un trato diferente para los pobres.
La derecha constantemente busca instalar en el sentido común de la sociedad que es a través del mérito como se accede al siempre deseado "ascenso social". Así lo ha buscado instalar el gobierno con el proyecto de admisión justa.
Tampoco es extraño escuchar entre empresarios y políticos de derecha que los pobres son pobres porque son flojos o no se esfuerzan lo suficiente.
Pero cuando este tipo de casos salen a la luz, queda de manifiesto que existe un trato diferente para ricos y pobres.
Mientras los pobres deben estudiar en condiciones socioculturales complejas, muchas veces sin apoyo familiar o teniendo que dividir sus tiempos con jornadas laborales para poder aportar económicamente a sus familias, los ricos pueden pagar altas sumas de dinero para acceder a los colegios top de la capital para luego salir del país y pagar para entrar a Yale, Standford u otras.
De esta forma queda clara cómo actúan las familias ricas cuando sus hijos o hijas no tienen las habilidades suficientes para mantenerse por si solos en los círculos donde los padres esperan que estén, para ellos no existe la meritocracia porque sus recursos y apellidos blindan cualquier insuficiencia que puedan tener.
Por último hay que tener claro que este mecanismo de "comprar" la entrada a estas universidades no es la única forma que tienen. Además pueden acceder por vínculos familiares (ex-estudiantes), por padres financistas de las universidades, o por aptitudes deportivas que muchas veces son falseadas ya que los entrenadores de los equipos universitarios son comprados para apadrinar jóvenes.
Una vez más lo que sale a la luz es cómo mientras el capitalismo exige a los pobres esforzarse para salir de ella mientras los ricos no necesitan esfuerzo ya que pueden pagar por mantenerse ahí..
