A pocas días de comenzada la cuarentena, las frutas y verduras registraron aumentos que van del 30 al 40% en la Ciudad de Buenos Aires. También han aumentado los precios de la carne y los huevos.
Miércoles 25 de marzo de 2020 12:20
La mayoría del pueblo trabajador, un sector importante de ellos están precarizados o desocupados, padecen más que nadie la cuarentena. A la baja de sus ingresos, o los que solo por única vez percibirán 10.000 pesos que da el gobierno, tienen que soportar el aumento indiscriminado de productos básicos de la canasta familiar.
Consumidores Libres que realiza informes quincenales, informó que en el relevamiento al 15 de marzo sobre productos como cebolla, papa, tomate, zanahoria, donde se registraron subas del 15 % hasta el 40 %. Los formadores de precio, las grandes cadenas de supermercados y en los distintos eslabones de la producción, ya sean los productores o los comerciantes, es donde se registran el mayor aumento.
Algunos justifican el aumento en el alza en los costos de logística. Que el flete aumentó a partir de las complicaciones que acarrea la cuarentena. En realidad, “logística” es un eufemismo con el que se define la especulación.
Como denuncian los comerciantes, ellos están recibiendo los productos con incrementos de hasta el 50 %. El bolsón de papa que compraban en el conurbano a 300 pesos la semana pasada, ahora deben pagar 450 pesos.
Carne vacuna y huevos en ascenso
A partir de la cuarentena obligatoria, se dispararon los precios de los principales cortes de carne en los comercios minorista.
A las carnicerías recibieron la media res con hasta un 20 % de aumento de la semana anterior a la cuarentena.
En tanto el maple de huevos, en tiempos de cuarentena, también recibió un fuerte aumento. A principios de mes el maple se conseguía en 170 pesos en los comercios, 20 días después difícilmente se consigue a 220 pesos en promocionados “ofertas”, sino el valor se encuentra por encima de los 250 pesos.
Son millones quienes están siendo gravemente golpeados por las consecuencias del freno a la actividad económica debido a la pandemia del coronavirus y la política de aislamiento social, y están buscando desesperadamente cómo salir de la situación.
El aumento indiscriminado de los precios de la canasta básica familiar, no hace más que aumentar las penurias de los sectores vulnerables que más sufren esta pandemia.
Nuestras vidas valen más que sus ganancias.
