En la mañana del jueves, las cuidadoras hospitalarias nucleadas en la Secretaria de la Niñez, Adolescencia y Familia de Córdoba realizaron una acción frente a la casa de gobierno denunciando explotación laboral y negligencia.
Viernes 3 de julio de 2015
Bajo la figura de “Cuidadoras Hospitalarias”, estas trabajadoras llevan más de 5 años desempeñando esa función durante 120 hs. mensuales por un subsidio de $1500. Denuncian, además, que no cuentan con ART ni obra social.
Las cuidadoras hospitalarias son un grupo de mujeres trabajadoras de SeNAF, 50 aproximadamente, que tienen a su cargo el cuidado de los niños, niñas y adolescentes internados en distintos Hospitales de Córdoba. Estos niños sufren diversas patologías, en su mayoría de gravedad, constituyendo por ello el eslabón más débil de SeNAF. Están internados bajo la responsabilidad y cuidado del Estado Provincial por problemáticas tales como abuso, abandono, maltrato psicofísico; o simplemente por no tener familiares que puedan cuidarlos.
En este sector, como sucede en la mayoría del sector salud, todas las cuidadoras son mujeres. Por ello, las trabajadoras, también hacen hincapié en la violencia hacia la mujer desde el Estado. No cuentan con licencia por maternidad, ni vacaciones. Y se les exige que realicen tareas para las cuales el Estado jamás les proveyó de capacitación, y menos aún de herramientas para realizarlas.
La denuncia es clara a la hora de señalar responsables, a dos días de las elecciones en Córdoba, De la Sota, Passerini y el secretario del SeNAF, Gabriel Martín, continúan haciendo oídos sordos a esta situación de extrema precarización laboral mientras gastan millones de pesos en campañas electorales. Así, a través del ministerio de Desarrollo Social y de la SeNAF se vulneran derechos los elementales de las trabajadoras y de los pacientes.
La acción realizada este jueves, es parte de una serie de reclamos administrativos y otras acciones que las trabajadoras planean llevar adelante para desenmascarar que se trata de disfrazar de “voluntariado” una brutal precarización laboral. Por ello continuarán reclamando por el pase a planta permanente y mejores condiciones de trabajo.
