A tono con las nuevas resoluciones anunciadas por el Ministerio de Trabajo de la Nación, José Thomas salió a defender el calendario escolar 2022. Ya lo había hecho su par de CABA, donde también se pretenden comenzar las clases el 21 de febrero, sin protocolos sanitarios y en el medio del pico de contagios.
Virginia Pescarmona @virpes
Miércoles 19 de enero de 2022 21:51
Este miércoles 19, a través del Boletín Oficial, el Ministerio de Trabajo difundió las recomendaciones elaboradas para el regreso al trabajo de quienes tengan diagnóstico confirmado de covid-19 o sean contacto estrecho. Allí dice que “los trabajadores y trabajadoras que tengan diagnóstico de Covid-19 que no hayan requerido internación, podrán reincorporarse a sus actividades sin necesidad de presentar resultado de test negativo ni certificado de alta”. En Mendoza también se publicaron las nuevas recomendaciones para los hisopados. Todas medidas a pedido de las empresas y la prepotencia patronal que pretende que todo siga funcionando a su favor, sin importar la salud de la población.
En ese marco la DGE salió anunciar que las clases empiezan el 21 de febrero presenciales y en todos los niveles. José Thomas, en Radio Nihuil agregó: "no se toca el calendario, después tomamos decisiones semana a semana”.
Y, como si fuera poca improvisación, el gobierno decide dejar de testear, pero pretende poner en tela de juicio a un o una trabajadora de la educación que deba aislarse por presentar síntomas. José Thomas se lamenta en una nota de El Sol sobre las dificultades que puede presentar controlar la veracidad de los casos, ligando el problema a posibles descuentos del nefasto Ítem Aula. La solución es sencilla: testear. Además ser serios con las burbujas, garantizar las condiciones sanitarias, garantizar la cobertura de licencias en los casos de aislamientos. Para esto, además, debería funcionar la obra social OSEP con recursos y personal, cuestión que hoy día es una crisis de envergadura.
Vamos y vemos
En el mundo se debate la pertinencia de la presencialidad ante la pandemia que no cesa con su actual pico de contagios de la variante Omicrón, y la falta aún de vacunación universal.
Tendremos que debatir en cada escuela y junto a las familias las medidas de cuidado. No queremos, otra vez, quedar en el medio de su hipócrita “cruzada por la educación”, cuando sabemos que es parte de su disputa política con el oficialismo nacional. Ni unos ni otros están dispuestos a garantizar el derecho a la educación y a la vista está que son millones, en todo el país, los y las estudiantes con este derecho vulnerado en la pandemia. Ante esto, la par de José Thomas en CABA, Soledad Acuña profirió la brutal definición de que los chicos que dejaron la escuela durante la pandemia ya “están perdidos en los pasillos de una villa”.
De parte del Ministro de Educación de la Nación, Jaime Perczyk, tampoco ha habido mucha definición sobre los protocolos.
La realidad es que no hay plan y pretenden que volvamos a las escuelas en 3 semanas sin nada serio, otra vez.
Irresponsablemente plantean ir a una presencialidad sin protocolos claros. Su responsabilidad es garantizar la educación, sea de forma virtual con conectividad y computadoras o presencial con cuidados adecuados y acordes.
Virginia Pescarmona
Docente, Corriente 9 de abril/Lista Bordó, Mendoza