En menos de dos semanas han fallecido Frank Luna, director ejecutivo de la Federación Única de Trabajadores Petroleros de Venezuela (FUTPV) del estado Zulia, así como los dirigentes sindicales Fredy Alvarado del estado Carabobo y Jaime López del estado Anzoátegui. Mueren por la falta de atención médica y los cuidados necesarios en medio de la pandemia que azota al país. Conversamos nuevamente con Horacio Silva, dirigente de los trabajadores petroleros de la Refinería El Palito, y del Movimiento 1° de Octubre, sobre esta situación que se está viviendo.
La Izquierda Diario Venezuela @LaIzqDiario_VE
Jueves 8 de abril de 2021
Fotografía: El Pitazo
La situación agobia a los trabajadores petroleros. “Estamos de luto los trabajadores del país, especialmente los trabajadores petroleros, en menos de dos semanas hemos tenido tres bajas importantes en el sector petrolero” comienza afirmando Horacio Silva durante la conversación con La Izquierda Diario.
Hablar de Frank Luna, Fredy Alvarado y Jaime López, es hablar de dirigentes sindicales entre 20 y 35 años de servicio. La eliminación de conquistas fundamentales obtenidas a lo largo de décadas de luchas petroleras como un seguro de salud, el HCM, así como salarios destruidos, ha llevado a los trabajadores a una total desprotección y desamparo. Porque, como remarca Horacio durante la entrevista, “Frank Luna pagó 30 años de HCM, Fredy Alvarado 35 años de HCM al igual que Jaime López 20 años de HCM. Pero se trata de una situación del conjunto de la clase trabajadora petrolera, así como la de los otros sectores del país en medio de esta tragedia, que mueren ante la desidia tanto del Gobierno nacional como de la burocracia sindical de la FUTPV que encabeza Will Rangel”
El Gobierno dice que tiene los medicamentos que están en los centros de salud. Pero una cosa es lo que dice el Gobierno por los medios de comunicación y otra cosa es con lo que se encuentra la gente en los centros asistenciales. Una crisis terrible, muy dolorosa para los trabajadores petroleros que es la misma situación de los trabajadores de las industrias básicas y de todos los trabajadores del país.
“El primer caído por Covid fue el compañero petrolero Jaime López, del oriente del país, del estado Anzoátegui, un dirigente combativo de la federación petrolera, después cae el compañero Fredy Alvarado igualmente, y este miércoles cae nuestro compañero dirigente sindical querido, secretario ejecutivo de la Futpv, Frank Luna, del estado Zulia. Han caído los dirigentes petroleros más importantes de esas regiones del país”, recalca el dirigente petrolero de Carabobo.
El andar de hospital en hospital, el llamado ruleteo para ser atendido, es una constante que sufren los trabajadores. “Es triste ver cómo los compañeros han sido ruleteados, en el caso de Frank Luna ruleteado entre el hospital Coromoto y el hospital universitario del Zulia, por no tener las medicinas. Él mismo lo dice en sus audios, ‘no nos están dando medicina aquí, las compartimos entre todos… no sabemos lo que realmente está pasando’. Pero esa negligencia real que se vive en los centros asistenciales, lo que vivieron nuestros hermanos, bueno, están los audios de las llamadas que hacía a los trabajadores en el Zulia, de las llamadas de los petroleros del Zulia que le hicieron al presidente de la Federación, las llamadas que le hicieron al presidente Nicolás Maduro, para que dieran la orden para que pudieran atender al compañero, bueno, se quedaron en el aire pues, como un sonido en el desierto que nadie escuchaba el llamado para que este compañero fuese atendido con toda la atención necesaria y no lo dejaran morir porque le faltaba antibióticos. A eso nos ha llevado la dirigencia sindical como Will Rangel de la FUTPV, dirigentes que están cerca del poder, en la federación más importante de este país.”
Es lamentable esto para los trabajadores, para el pueblo venezolano, para los dirigentes sindicales que luchan, que está en contra de las acciones gobierneras, las acciones entreguistas de esta federación. Estuvieron sordos pues ante el llamado de los dirigentes del Zulia para que atendieran a Frank Luna con todas las condiciones necesarios y la medicina necesaria. “Y bueno la respuesta de la vida, del organismo, de la humanidad del ser humano, que si no le das las medicinas que son, lamentablemente fallece el ser humano. Y bueno, ha caído Frank Luna, allí están sus audios que enviaba a sus compañeros petroleros del Zulia. Algo muy terrible, muy terrible”, dice Horacio.
Relata que esto inicia cuando Maduro destruye todas las convenciones colectivas. “Lamentablemente se discutió una convención colectiva que habla de un HCM de 100 mil dólares, y no está activada, pero es una mentira más escrita en el papel. Como se hacía en la IV República donde se discutían convenciones colectivas que eran impagables por el Estado, y se iban acumulando las deudas de los trabajadores, y nunca se pagaban esas deudas. Así mismo se está haciendo ahorita, se firmó una convención colectiva, una parafernalia, una convención colectiva sacada de una manga o de un sombrero de un mago, y bueno, no tiene fondos, pues si hubiese estado activada la convención colectiva, si hubiese estado activada la cláusula 43, la del HCM, bueno, el compañero Frank estuviera hoy vivo, al igual que Fredy Alvarado, al igual que Jaime López.”
Es que así también han muerto muchos trabajadores y dirigentes sindicales que piden a gritos desde su casa, desde las puertas de los hospitales, que se les active el HCM para poder ser atendidos con dignidad luego de tantos años de servicio, y donde todas sus prestaciones sociales, cajas de ahorra, desaparecieron de un plumazo.
Denuncia que muchísimos trabajadores y dirigentes sindicales son marginados, “porque somos críticos al Gobierno, somos críticos a las políticas hambreadoras, porque somos críticas a las políticas de entrega de las convenciones colectivas, contra ese sector de la Fuerza Bolivariana, que han entregado las conquistas de los trabajadores a partir de la huelga de 1936, y que entonces, esa piedra en el zapato que han sido los trabajadores y dirigentes sindicales contra el gobierno que hoy marginan, bueno vienen las retaliaciones.”
Pone de ejemplo lo que pasa también en otras industrias del Estado: “así como jubilaron a unos trabajadores prematuramente de la siderúrgica Sidor en Guayana, así se han hecho con los trabajadores petroleros, igualito. Es la misma metodología, el mismo lineamiento de esos sectores contra los intereses de los trabajadores de este país.”
La solidaridad con los familiares es remarcada en esta trágica situación por los trabajadores petroleros fallecidos. “Por eso nosotros, desde aquí, del Movimiento Petrolero 1° de Octubre, en solidaridad con las familias de los caídos, con los familiares de Fredy Alvarado, con su hijo, con su hija, con su esposa, en solidaridad con Jaime López que tenía hijos pequeños, con su esposa, con su madre, con sus familiares, y en solidaridad con Frank Luna, con su hijastro, con su esposa. Estamos en solidaridad con todos los trabajadores que han perdido seres queridos, con los trabajadores que han perdido familiares por no tener un HCM justo, digno, que nos lo ganamos por haber producido tantas riquezas en este país”.
Efectivamente, han sido los propios trabajadores petroleros los que han construido la industria petrolera que llegó a producir tres millones de barriles diarios, manteniendo a PDVSA como la industria más importante de ese país. “Y estos dirigentes la destruyeron, la entregaron a las transnacionales, flexibilizando su convención colectiva, acabando con las conquistas que emprendió en 1925 el trabajador fogonero Malavé y que se consolidaron en la huelga de 1936”.
Finalmente, Horacio Silva hace un enfático llamado a la unidad de los trabajadores del país, en particular del sector petrolero. “Estaremos convocando a diferentes sectores del país a la gran unidad nacional de acción para organizar, desde allí, desde esa plataforma superior, que nosotros la hemos denominado como la nueva fuerza política sindical de este país, como la nueva alternativa sindical de este país. Hay que construirla definitivamente porque las pocas instituciones, los pocos gremios, las pocas centrales, los pocos sindicatos nacionales, las pocas federaciones regionales y los pocos sindicatos que quedan, hay que refundarlos. Necesitamos buscar la unidad de acción definitivamente para generar desde allí una política unitaria que pueda dar al traste a todo lo que hemos perdido, unificar a los trabajadores, e ir consolidados contra estos sectores gobierneros y contra un gobierno que ha convertido a los trabajadores en los esclavos del siglo XXI.”
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