El ministro de Interior, Jorge Fernández Díaz, sentenció este miércoles que en Catalunya "se ha frivolizado" con aspectos vinculados a la integración de la inmigración musulmana y los peligros potenciales de la radicalización de esta comunidad y señaló que el proceso soberanista ´no ha ayudado a la lucha antiyihadista´.
Ivan Vela @Ivan_Borvba
Jueves 9 de abril de 2015
Desde los días de Semana Santa, en las calles de las grandes ciudades del Estado español y muy especialmente en Catalunya, es común estos días ver un aumento significativo de la presencia policial y aumento de retenciones y registros a individuos de origen marroquí, árabes o pakistaní. Barcelona se ha convertido en una ciudad completamente militarizada después de que el Gobierno declaró máxima alerta ante inminentes atentados.
Durante el día miércoles, a primera hora de la mañana el cuerpo policial de los Mossos d’Esquadra ha llevado a cabo detenciones de presuntos individuos vinculados al Estado Islámico (EI). Se han llevado a cabo estas detenciones por orden del juzgado número uno de la Audiencia Nacional. La lista de detenidos está conformada por un total de 11 personas, 10 hombres y una mujer.
Esta acción acontecida en territorio catalán ha sido aprovechada por el Ministro del Interior del Gobierno Español, Fernández Díaz, para establecer una conexión entre el movimiento soberanista catalán y el “yihadismo radical”.
En estas declaraciones, que muestran la cara más islamófoba del ejecutivo, Fernández Díaz ha acusado a instituciones y asociaciones soberanistas catalanas de que "a raíz del proceso independentista" hacer “proselitismo independentista” entre la comunidad musulmana y de frivolizar con la amenaza que éstos suponen.
El Ministro apuntaba su dardo xenófobo a la fundación catalana Nous Catalans (Nuevos Catalanes), recordando que en Mayo del 2013 el Cuerpo Nacional de Policía tuvo que expulsar de territorio español a Noureddine Ziani , miembro de esta asociación.
Dicha fundación, en palabras de su director Àngel Colom, ha catalogado de “irresponsables” las palabras de Fernández Díaz, alegando que su fundación busca “los métodos de integración más efectivos de la comunidad musulmana en Cataluña por procedimientos pacíficos y democráticos”.
Ciertamente estas declaraciones se podrían tildar, además de irresponsables, de premeditadas y racistas. Se producen en un momento en el cuál los medios de comunicación, fuerzas políticas racistas y de derecha y cuerpos policiales, buscan implementar de forma consciente y determinada un miedo irracional hacía la comunidad musulmana, cada día más señalada y estigmatizada.
A su vez el Ministro del Interior aprovechaba para seguir haciendo gala de ese centralismo reaccionario español que ataca y desacredita al resto de nacionalidades, un continuo en el ejecutivo de Mariano Rajoy. Desde el Gobierno de la Generalitat no han perdido tiempo en salir al paso y rechazar las palabras de Fernández Díaz.
El Estado Español vive en una creciente psicosis auspiciada por los medios de comunicación y partidos políticos. Las consecuencias pueden ser desastrosas y el Gobierno Español, con el aumento represivo, físico y verbal, es motor de esta islamofobia.
