El legislador por la Ciudad de Buenos Aires, del PTS/FIT, en C5N, planteó que estos casos de corrupción de los funcionarios del gobierno de Cambiemos, ya son moneda corriente y denunció la ligazón de estos con los negociados de la obra pública.
Mirta Pacheco @mirtapacheco1
Sábado 17 de febrero de 2018
Patricio del Corro en C5N sobre el nuevo escandalo de Díaz Gilligan - YouTube
Por la tarde, Del Corro, en el programa de Fernández Llorente, habló acerca del nuevo caso de corrupción, esta vez del Subsecretario General de la Presidencia Valentín Díaz Gilligan, que a raíz de una denuncia hecha por el diario del Estado Español “El País”, se supo de su vinculación con una empresa off shore. El mismo Gilligan, como disculpándose dijo que solo se trató de un favor a un amigo.
Ni más ni menos que un testaferro. Por eso el legislador del FIT planteó que esto ya es algo a lo que el gobierno de Mauricio Macri nos tiene acostumbrados. Tal es el caso de la hermana de Triaca, imputada por contratar para el organismo que dirigía, una empresa de la cual es socia.
Pero Del Corro también habló de lo que muchos callan. Denunció el entramado entre los empresarios y la obra pública: “los grandes empresarios en Argentina, todos los que han hecho el gran dinero, empezando por la empresa Macri, siempre estuvieron ligados a la obra pública. Los funcionarios del gobierno anterior, también”.
Ya son varios los funcionarios salpicados en delitos de corrupción, sin mencionar el nepotismo de este gobierno, porque los ministros del gabinete que dirige Marcos Peña, encontraron una buena oportunidad, al tomar posesión de la dirección del Estado, para hacer de este casi una agencia de empleo. Por supuesto que esta “agencia” no ofrece trabajo precario como millones de jóvenes, por ejemplo, encuentran en las agencias de trabajo. No, Cambiemos coloca familiares y amigos en puestos donde el cobro es más que abultado.
Luego de sacar el decreto prohibiendo a familiares directos de funcionarios ocupar cargos en el Estado, obligado por el nuevo frente de crisis que le abrió este tema, se comprobó que muchos se quedaron ocupando esos puestos. Maniobra distractiva, se le dice.
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Una última pregunta: ¿Y Laura Alonso, la titular de la Oficina Anticorrupción, dónde está?
