La censura y el estigma impuestos por la doble moral conservadora vuelven a la carga contra el arte y sus trabajadores. Esta vez fue contra la obra "Delirio Tropical", show de burlesque cuyas funciones fueron canceladas por presión del gobierno de Durango, encabezado por el panista José Rosas Aispuro.
Nancy Cázares @nancynan.cazares
Domingo 23 de mayo de 2021
Fotos interior: Redes/ Gerardo Sierra @Gestosierra
Este fin de semana, integrantes de la producción que da vida a la obra "Delirio Tropical" difundieron a través de redes sociales un comunicado en donde denunciaban cómo se les impuso la cancelación de dos de sus funciones, mismas que se llevarían a cabo el viernes 21 de mayo en el teatro Ricardo Castro, en aquella entidad.
Artistas e integrantes de este proyecto señalaron que esta cancelación responde a un acto de censura, en donde la misoginia y el odio contra las personas trans y población LGBTI+ son un factor determinante. Así lo demostró el contenido del aviso de cancelación difundido por la empresa Alejandro R. Producciones, que expresaba que era "debido a comentarios recibidos por parte de la sociedad duranguense y buscando respetar la moral, así como las buenas costumbres".
Escribe Emilio Bastré, integrante del elenco de "Delirio Tropical": Como dijo mi compañera, Lucy Von Mambo, "cuando la carne es para la explotación es apreciada, nos la comemos, la compramos en las calles, hasta abusamos de ella y la violamos; pero si la carne decide ponerse pezoneras, bailar y disfrutar la vida es castigada". No podemos ser dueñas de nuestros propios cuerpos porque les agrede. [...] Semanas de ensayos con el ensamble musical, nuevas bailarinas, vestuario, nuevos números e intervenciones preparadas... todo a la basura por un gobierno censurador que cancela la libertad de expresión.
Según refiere Bastré, además de haber sido objeto de un trato desconsiderado —toda vez que no se les notificó de la cancelación sino hasta horas antes de la primera función—, hubo distintas irregularidades como el uso de la imagen de algunas actrices para el comunicado de cancelación. "Simplemente nos dijeron que se cancelaba por órdenes de la esposa del gobernador", cuenta el actor, quien fue señalado junto con sus compañeras por "fomentar la prostitución y la homosexualidad", así como por "corromper a las infancias".
Delirio Tropical es una puesta en escena que rinde homenaje a la vida nocturna de la Ciudad de México en la década de los 70s. En él se conjugan el teatro, la danza, el drag y el burlesque. Su prohibición, así como la de cualquier otra manifestación artística que sugiera puntos de ruptura o transgresión del control, vigilancia y estigmatización de los cuerpos impuesto por el Estado patriarcal, nos afecta a todxs. En particular cuando es perpetrada en los márgenes de un Estado que, en firme alianza con la Iglesia y su discurso abiertamente misógino y homolesbitransodiante, impone sobre toda la población el carácter reaccionario y conservador de su moral.