Los trabajadores de la Lista Naranja rechazamos el apriete de los directivos del sindicato, cómplices de la empresa en implementar ajustes y empeorar las condiciones de trabajo y del transporte público.
Víctor Silva Referente de La Naranja Ferroviaria
Sábado 17 de septiembre de 2016 16:34
El año pasado, cuando la Lista Verde a la cabeza de la Unión Ferroviaria (UF) aprobó nuestro nuevo Convenio de Trabajo, denunciamos su carácter noventista. En ese momento alertábamos que los sindicalistas-patrones de la UF preparaban el terreno para que el presidente que fuera elegido tuviera el camino allanado para aplicar el ajuste en el ferrocarril.
El nuevo convenio tiene un contenido que endurece el régimen disciplinario, avala la tercerización y despidos en caso de modernizaciones. Es decir, todo un conjunto de bases para que el gobierno de turno implemente ataques a los ferroviarios y usuarios. Las medidas de la empresa vienen escalando desde entonces. Al control más estricto y al apriete en las áreas se sumó el amedrentamiento por parte de los gremios, diciendo que la gente se cuidara porque vendrían despidos y el sindicato no podría hacer nada. Entonces vinieron los ataques a los compañeros de CI5, las sanciones en el Sarmiento, el aumento en los ritmos de producción, las sanciones injustas y persecutorias y los despidos encubiertos como "jubilación anticipada".
Ahora se ve un nuevo intento de apriete en la Línea Roca, con la inminencia de la puesta en operación de los molinetes. Sin dar opciones la empresa intentó mover a diversos trabajadores de sus puestos, horarios y franco semanal. Pero muchos se plantaron y no aceptaron esos desmanes. Algunos con más de 20 años en sus puestos correctamente veían como un abuso que en muchos casos de la noche a la mañana los removieran más lejos de sus casas, con horarios que impiden buscar los hijos a la escuela o mismo llegar a sus puestos al horario, ya que en muchos lugares no hay transporte antes de las 4 de la madrugada.
Los trabajadores de La Naranja Ferroviaria hicimos un acto en Plaza Constitución contra esta situación de ajuste, que alentó la determinación de muchos laburantes a enfrentar los desmanes de la empresa, haciendo saltar chispas en las internas de la Verde.
Inicialmente la directiva de la UF llamaba a que todos cedieran a la presión de Trenes Argentinos y se presentasen donde la empresa los hubiera mandado. Pero esto hizo con que se chocasen con sus bases y tuvieran que retroceder, diciendo a los laburantes que vuelvan a sus puestos y horarios anteriores. En un audio de whatsapp que recorrió la línea, Karina Benemerito -secretaria general de la UF en el Roca y parte del cuerpo directivo de Trenes Argentinos- argumenta que “si no mueven a los zurdos no mueven a nadie”.
Otro directivo de la UF dijo: “Ya nos venían boludeando con el asunto de los zurdos, que no querían, que se acomoden ellos”, en una clara referencia a los compañeros que se plantaron ante el abuso de la empresa y el inmovilismo de la UF. Esto muestra una clara relación donde la empresa busca implementar ataques con la complicidad del sindicato, que solo se mueve cuando los trabajadores se ponen firmes contra los desmanes de la empresa.
Pero también expresa un lenguaje de los herederos de los asesinos de Mariano Ferreyra contra los “zurdos” en los sindicatos. El método del patoteo no es nuevo y es usado por las distintas alas de la burocracia contra los trabajadores y la izquierda. Los trabajadores de la Lista Naranja declaramos que no aceptaremos esos métodos que usan del apriete para implementar ajustes y empeorar las condiciones de laburo y del transporte público, mientras hacen negocios con la tercerización y el desguace de los ferrocarriles. Exigimos la convocatoria de asambleas para decidir sobre nuestras condiciones de trabajo y categorías, para luchar por las 6 horas de trabajo para todos.