El Círculo Rojo. Deporte 2018: el año de las mujeres en el fútbol

Podríamos empezar un resumen de lo que fue este 2018 en lo deportivo tomando nota del retiro de Manu Ginóbili, por ejemplo (uno de los mejores deportistas argentinos de la historia), o recordando que hubo otro Mundial –el de Rusia- en el que Messi y su generación se volvieron con las manos vacías mientras la Francia de los hijos de la inmigración encabezados por Mbappé alzaron la Copa del Mundo. También tuvimos el final inesperado de la Copa Libertadores y el deporte olímpico en Buenos Aires con los Juegos de la Juventud. Pero esta sección Deportes de La Izquierda Diario intenta de abordar la realidad desde otro enfoque y, como lo hicimos durante el año, le damos más peso a otros acontecimientos que tal vez pasaron un poco más desapercibidos.

El 2018 fue un año de gran impacto del movimiento de mujeres y en el deporte esto tuvo sus expresiones: empezando por el plantel femenino de la Selección Argentina de Fútbol. Venían desde el año pasado alzando la voz para hacerse escuchar pero con el Sudamericano de Chile (y la famosa foto de las chicas haciendo el “Topo Gigio”) y con el repechaje para clasificar al Mundial de Francia 2019, cobraron una visibilidad inédita. Varias futbolistas además mostraron estar muy involucradas en causas como a favor del aborto legal, seguro y gratuito, con sus pañuelos verdes, contra la violencia de género y la discriminación, etc. Es decir, ellas son parte del movimiento de mujeres y su crecimiento deportivo acompañó o fue parte del crecimiento de ese movimiento. En La Izquierda Diario entrevistamos a jugadoras muy interesantes y que tienen mucho para decir como Macarena Sánchez (que juega en el equipo más fuerte y que fue campeón local, UAI Urquiza) o Mariana Larroquette que es una de las figuras de la Selección. También la colega Leila Grayani entrevistó para esta sección a varias periodistas deportivas como Antonella Valderrey (la que ubicó con muy buenos argumentos al comentarista y ex jugador Hussain después de que se mandó una “machiruleada” al aire), las periodistas también mostraron gran crecimiento en el ámbito deportivo.

Escuchá la columna de balance del 2018 en el deporte de El Círculo Rojo (domingos de 22 a 24 hs por Radio Con Vos FM 89.9)

El hito fue la Selección femenina jugando el repechaje a cancha llena –por primera vez en su historia- ante Panamá, en Arsenal. El fútbol de mujeres es cosa seria y para el 2019 tiene el desafío de consolidarse un poco más. Las chicas para el Mundial de Francia la tienen muy difícil, en un grupo en el que van a enfrentar a potencias como Japón, Inglaterra y Escocia. La ventaja es que van con el envión producto del entusiasmo de este 2018 en el que llegaron al menos un poquito a las “primeras planas”.

También fue un año clave para el fútbol negocio. Las finales entre River y Boca por la Copa Libertadores hicieron historia por varios motivos, más allá de lo estrictamente deportivo. El desenlace que tuvo la final, importada a Europa, inaugura posiblemente la era del fútbol “off shore”: espectáculos deportivos locales de mucha trascendencia que son mudados de escenario para lograr mayor rentabilidad (empezando por la televisación). Lamentablemente el River-Boca en Madrid promete ser algo cada vez más habitual en el fútbol del más alto nivel. Salvo que los protagonistas, jugadores, DTs e hinchas, opongan alguna resistencia, esto se puede institucionalizar más y los perjudicados seremos justamente quienes disfrutamos del fútbol pero que se nos hace cada vez más costoso.

Otra arista que deja esta final de Libertadores: hace unos días el macrismo intentó meter una ley “anti barras” a tono con el endurecimiento de penas y la lógica punitivista para abordar problemas sociales. La sesión en diputados fracasó por desacuerdos en el propio oficialismo pero lo interesante es lo que señaló por ejemplo el diputado del Frente de Izquierda-PTS Nicolás del Caño, que denunció que el objetivo de esa ley es ampliar atribuciones de organismos del Estado que más que “controlar” y “evitar” el “accionar barrabrava”, más bien son parte del entramado, como mostró el incidente con el micro de Boca con zona liberada por la Policía y la Prefectura. Decía Del Caño: “Mauricio Macri, presidente de la Nación, que durante dos décadas fue amo y señor junto con sus amigos del club Boca Juniors. ¿No sabían todo lo que había alrededor de los barras de Boca, durante todos esos años?”, para señalar la hipocresía de un proyecto que apunta además al último eslabón como los “trapitos”, quienes hacen reventa de entradas en los alrededores de una cancha, pero nunca se pone el foco en la dirigencia y en quienes le dan plata, poder y trabajo a los barras: gobernaciones e intendencias, la burocracia de los gremios (como en el caso de la patota armada por Pedraza y la Unión Ferroviaria con barras fútbol que culminó en el asesinato de Mariano Ferreyra), etc. Una ley para endurecer penas lo único que hace es fortalecer la principal causa de muertes en el marco de espectáculos deportivos: la represión policial.

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Contra las barras bravas, este año vimos surgir iniciativas muy interesantes como las hinchadas antifascistas, que tratan de generar otro tipo de cultura en el fútbol. Pero tampoco alcanzaría con eso sólo: hay que apuntar a las fuentes del poder de las barras que son las mafias de los gremios, los partidos tradicionales, las dirigencias de los clubes que muchas veces son funcionarios de gobierno; pero nunca aumentar el poder de fuego de las fuerzas de seguridad, más bien alentar la lucha antirrepresiva.

#nosoyunnúmero #sialaescuelapública #NoAlCierreDeLasEscuelasNocturnas pic.twitter.com/HDP1cncvv2

— Juan Pablo Sorin (@jpsorin6) 23 de diciembre de 2018

En síntesis: 2018 año clave para el fútbol negocio pero también –cuando vemos a un Juampi Sorín expresarse contra el cierre de las escuelas nocturnas- para el deporte que emerge comprometido con causas sociales.