El martes pasado se hicieron cortes en distintos puntos del ingreso a la Ciudad de Buenos Aires, impulsados por el Polo Obrero, a los que se acercaron solidariamente los y las vecinas de la Asamblea Permanente de Guernica y distintas organizaciones como el MTR, Barrios de Pie, el Movimiento de Agrupaciones Clasistas, La Red y el PTS, en reclamo del desprocesamiento y la libertad a Rafael Crispin, un vecino que pelea por la vivienda en Rafael Castillo e integrante del Polo Obrero.
Miércoles 10 de febrero de 2021 11:48
Foto: Sebastián Linero - Enfoque Rojo
Es escandalosa la causa que le hicieron a Rafael, que incluye “tentativa de homicidio agravado” que podría significar años de prisión, todo por estar filmando el violento operativo policial con el que las fuerzas de seguridad intentaban cortar el suministro eléctrico de los vecinos que se encuentran peleando por la tierra.
Este brutal ataque judicial se da en el marco del operativo de la bonaerense para cortar la luz en el barrio La Unión. El gobierno de Axel kicillof, el municipio de Fernando Espinoza y la bonaerense de Berni tienen claras sus prioridades, reprimir y judicializar a quienes no tienen siquiera un techo para vivir, y beneficiar a los grandes especuladores inmobiliarios, como pide el propio macrismo y los empresarios.
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Este nuevo ataque no puede pasar. A las decenas de represiones de tomas en el conurbano comandadas por Berni, entre ellas el desalojo en Guernica, se suma ahora este nuevo precedente. Buscan limitar e impedir que se desarrolle el proceso de lucha por la tierra y la vivienda. Pretenden que las familias trabajadoras y pobres que ya no pueden pagar un alquiler se resignen y acepten vivir en la calle.
La presencia solidaria y espontánea en el corte de hoy convocado por el Polo Obrero, de las y los vecinos de la Asamblea Permanente de Guernica y también de la toma de Los Ceibos, es auspiciosa. La política para enfrentar estos ataques de los gobiernos y la justicia contra la pelea por la tierra y la vivienda tiene que ser en unidad, no puede ser autoproclamatoria ni limitada.
Está planteado avanzar en la coordinación de todas las tomas y en la más amplia unidad también con todas las organizaciones y sectores en lucha para pelear por la libertad de Rafael Crispin, su desprocesamiento y el de todos los luchadores por la tierra y la vivienda que tienen causas como los de Guernica, así como por el cumplimiento de los acuerdos que estableció el gobierno con las distintas organizaciones de la recuperación de tierras de Guernica, la defensa de todas las tomas y por trabajo genuino y vivienda.
Junto a quienes pelean por tierra para vivir, los distintos sectores en lucha como docentes, salud, y trabajadores de la industria y servicios, el sindicalismo combativo como el PSC y la juventud precarizada, hay que impulsar en común un plan de lucha en defensa de la pelea por el derecho a la tierra y el trabajo genuino.
