Distintas opiniones dan cuenta de los casos de corrupción del "Pacogate", el montaje de la "Operación Huracán", el asesinato de Camilo Catrillanca, y las violaciones a los derechos humanos en el marco de la rebelión del 2019 como los principales motivos.
Lunes 21 de junio de 2021
Tal parece que el desplome de Carabineros no tiene remedio. Con una deslegitimación que tiene a las “fuerzas del orden” por el suelo, de acuerdo a información entregada por La Tercera, las inscripciones en la Escuela de Formación de Carabineros (Esfocar), han caído en un 86%, respecto al promedio de los últimos 10 años, cuando el promedio se encontraba en los 15.341 inscritos.
De acuerdo a lo signado por el medio Cooperativa, el peak de inscripciones se dio durante el año 2015 con 18.871 inscritos, un año antes que se diera a conocer el denominado “Pacogate”, el mayor desfalco realizado por institución, y que al día de hoy asciende a los $28 mil millones de pesos.
El año 2018 también se suma la investigación de la denominada “Operación Huracán”, un montaje articulado, en contra de la Coordinadora Arauco-Malleco, y en el que se vieron implicados el en ese entonces General Director de Carabineros Gonzalo Blu, y el ingeniero Alex Smith, entre los autores. Y el brutal asesinato del comunero mapuche, en La Araucanía, en noviembre del mismo año.
Aunque claramente las violaciones a los derechos humanos cometidas durante la rebelión de octubre del 2019, con 34 personas muertas en el marco del “estallido social”, junto con cientos de personas afectadas por trauma ocular, y con más de 2.998 querellas presentadas por el Instituto nacional de Derechos Humanos (INDH), también ha significado un claro golpe a la institución represiva.
Desde el propio gobierno, por medio del subsecretario del interior, Ignacio Galli, se tuvo que dar una respuesta sobre la decadente figura que hoy significa una institución como Carabineros, manifestando “estamos trabajando en el proyecto de ley que reforma la carrera policial para poder mejorar este proceso y darle un horizonte concreto”, y agregando “pero, además, esto tiene que ir de la mano con la legitimidad social de la ciudadanía hacia la labor de Carabineros, donde se valore su trabajo en la prevención de los peligros a los que está expuesto el ciudadano. Se tiene que avanzar en ambos sentidos”.
Además de acuerdo a lo referido por La Tercera, desde el Ejecutivo habrían manifestado que el desinterés se debería a que los jóvenes prefieren buscan otras posibilidades que no se relacionen a poner en peligro su integridad física. Sin embargo, situación similar de declive se vive en la Escuela de Carabineros (Escar), encargada de la formación de coroneles y generales, que pasó de contar con 2.481 inscritos el año 2014, a tan sólo 380 el 2021. Es decir, una crisis integral que incluso afecta a rangos más altos de la esfera policial.
Tal parece que una institución podrida como Carabineros, cubierta de privilegios y gozando de impunidad frente a las múltiples y sistemáticas violaciones a los derechos humanos, sólo le queda seguir desplomándose. Y mientras el gobierno, la ex Concertación, e incluso algunos sectores de izquierda apuestan a una reforma de la institución, sólo terminan cubriendo el rol histórico que ha tenido esta institución, reprimiendo y persiguiendo al pueblo trabajador, a merced de resguardar los intereses del Estado capitalista.
No se puede seguir financiando una institución así de criminal, cuando al día de hoy hay miles de presas y presos políticos en la cárcel, y los muertos y heridos a manos de la policía, siguen en la más absoluta impunidad.
