Se trata de una voluntaria sanitaria del NHS (Sistema Nacional de Salud) de regreso de Sierra Leona donde había estado trabajando con pacientes afectados en un centro especial para el tratamiento de infectados del virus del ébola.
Martes 30 de diciembre de 2014
La cooperante, cuyo nombre aún no ha sido desvelado, fue diagnostica positivo con el virus de ébola en el hospital Gartnavel de la ciudad de Glasgow luego de haber sido admitida a primeras horas de la mañana del lunes con síntomas de fiebre y otros malestares. La sanitaria, actualmente en aislamiento, había regresado a la capital escocesa el domingo a la medianoche vía Casablanca y Londres.
En la tarde del lunes, la primer ministro de Escocia, Nicola Sturgeon, confirmó el caso en una conferencia de prensa y anunció que trasladarán a la cooperante infectada al hospital Royal Free en el barrio de Hampstead en el norte de Londres. A su vez Sturgeon indicó que la paciente se encuentra en condición estable y que las autoridades están contactando a los pasajeros que compartieron los vuelos de Sierra Leona a Heathrow (Londres) y de Londres a Glasgow.
Aseguró además, que el riesgo de contagio para el público es muy bajo y que la paciente no presenta síntomas que indicarían que podría transmitir el virus. En un comunicado hecho público a última hora de la tarde, la administración escocesa garantiza que “todos los posibles contactos del paciente (con otras personas) están siendo investigados”.
Por su parte, el ministro de salud del presidió una reunión de emergencia del COBRA (por su sigla en inglés de la Reunión de Gabinete), lo que indicaría que no quiere correr la misma suerte que su par del Estado Español que fue blanco de las críticas por su ineficiencia frente al caso de la auxiliar de enfermería Teresa Romero
Según el protocolo británico y de Escocia, todo paciente diagnosticado con el virus del ébola debe ser transferido a la unidad de alto nivel de aislamiento en el hospital Royal Free de Londres, tan pronto como sea posible. Esta unidad está equipada con las facilidades y las instalaciones apropiadas y cuenta con el personal sanitario adecuado para este tipo de casos. En esta misma unidad fue tratado el enfermero británico William Pooley quien había contraído la enfermedad en Sierra Leona cuando se encontraba trabajando como voluntario. Pooley se recuperó y en octubre del 2014 regresó a Sierra Leona para continuar su trabajo como voluntario. En unas declaraciones hechas a principios de diciembre Pooley denunció las pésimas condiciones de trabajo de los trabajadores sanitarios locales, muchos de ellos -señaló- no reciben su salario desde hace meses.
Una vez más, el caso de cooperantes y trabajadores europeos contagiados con el virus pone en el centro de la escena la terrible disparidad de la atención sanitaria y acceso al tratamiento entre Europa y África.