En una cuarentena desesperante para las familias del conurbano, las docentes dan una muestra de solidaridad entre trabajadores. Un debate sobre el rol de SUTEBA y la necesidad de una política independiente para organizarnos ante esta crisis.
Miércoles 1ro de abril de 2020
Al igual que millones de personas en el conurbano bonaerense, los trabajadores en La Matanza, la “capital del empleo precario”, estamos atravesando una difícil cuarentena. Sobre todo quienes trabajan el día a día, son despedidos o dependen de la escasa asistencia del estado. Desde el primer día las trabajadoras de la educación, maestras y auxiliares, participamos de la entrega de bolsones de comida para las familias que cuentan para su subsistencia con los comedores de las escuelas, hoy sin clases. A su vez, profesores de los talleres de algunas escuelas técnicas del distrito pusieron en marcha las impresoras 3D para hacer máscaras protectoras para donarlas a los hospitales del distrito. Grandes ejemplos de solidaridad.
Desde Suteba La Matanza acompañamos la primer tanda de entrega de bolsones. Pero denunciamos lo miserable de esos bolsones que a las mismas familias les alcanzan para tres días en lugar de diez, tal como pretendía el gobierno. Reclamamos a las autoridades educativas del distrito más y mejor servicio alimentario, entre otras exigencias. Así como nos dirigimos al Concejo Deliberante planteando, entre otros puntos, un aumento del 100% en su presupuesto de salud y medidas para la prevención urgente ante otras enfermedades infecciosas como el dengue, el sarampión y la tuberculosis. No tenemos ninguna expectativa en el gobierno de Fernando Espinoza, intendente de La Matanza, ya que hace casi cuatro décadas que el peronismo gobierna el distrito y nunca dejamos de tener condiciones de precariedad, gobierno tras gobierno.
Desde el sindicato levantamos un programa del pueblo trabajador ante la pandemia con la exigencia de un plan sanitario de emergencia bajo el lema “plata para salud, educación y trabajo, no para la deuda” que comience con test masivos para focalizar y planificar el aislamiento, y que continúa atendiendo las demandas de los trabajadores de la salud que exigen mayor inversión para respiradores y camas.Tomando las demandas de los docentes, en especial los suplentes y precarizados que se quedan sin salario y exigimos se les pague y para las familias de las escuelas, exigiendo licencias laborales pagas al 100% y prohibición de despidos así como un salario de emergencia en la cuarentena, que no puede ser de $10000 cómo implementó el gobierno .
Por supuesto, ninguna de estas medidas están dentro de las prioridades del gobierno. Por el contrario, ayer pagó U$S 250 millones de deuda a los buitres y especuladores mientras que sólo destinó $ 1700 millones como fondo especial para la crisis sanitaria. Mientras tanto, millones de personas ven crecer el hambre y pobreza, y por eso desde el lunes desembarcó el Ejército en nuestro distrito. Con la excusa de “ayuda humanitaria” pretende militarizar nuestros barrios.
Baradel y la conducción de Suteba Provincia dirigen una organización con mucha fuerza de casi 100 mil afiliados. Pero una vez más, muestra una política de subordinación al gobierno. Aparte de aceptar una paritaria que deja a miles de docentes con sueldos debajo de la canasta básica, ante la pandemia hoy son muchísimos los precarios que se quedan sin sustento. Al mismo tiempo, desde la agrupación Celeste que responde a Baradel, convocan a los “docentes voluntarios” para coordinar la entrega de alimentos desde las escuelas con las históricamente repudiadas fuerzas armadas. Varias escuelas del distrito serán sedes donde el ejército se instalará. Las mismas fuerzas que reprimen, persiguen y hostigan a nuestros alumnos en sus barrios. Por eso rechazamos que nuestro sindicato legitime la política del gobierno de querer lavarle la cara a las fuerzas represivas.
Desde La Marrón organizamos la solidaridad rechazando esta política de subordinación al gobierno y planteamos que, por el contrario, sindicatos como Suteba y CTERA deben intervenir en ésta crisis con la fuerza del millón de docentes del país para impulsar, a nivel nacional, la solidaridad entre trabajadores, docentes y familias juntos para imponer una salida para que ésta crisis la paguen los empresarios y especuladores, no el pueblo pobre.
Desde los sindicatos recuperados tenemos que dar el ejemplo en ese sentido. Siguiendo el camino de muchos trabajadores, como la cooperativa Madygraf que están produciendo alcohol en gel, que junto a estudiantes de la Universidad de San Martín y a docentes de química mostraron que la alianza de trabajadores y estudiantes es una alternativa independiente en esta crisis. En nuestra seccional La Matanza, desde la Marrón planteamos que con nuestro programa de independencia política de la Multicolor tenemos que ponernos a la cabeza de organizar la solidaridad de la docencia ante la difícil situación de la comunidad educativa. Sabemos que si nos unimos a las familias de nuestros estudiantes tenemos la fuerza para pelear por un plan de salud integral, por alimentos dignos para la cuarentena, impedir los despidos, las suspensiones y rechazar la militarización de los barrios. Al día de hoy, Suteba La Matanza no sacó un pronunciamiento de rechazo al desembarco del Ejército en nuestro distrito, ¡cuando incluso van a ocupar algunas escuelas! Estamos a tiempo de revertirlo.
Esta semana nuevamente se repartirán bolsones de comida en escuelas primarias y secundarias, serán muchos docentes los que estarán colaborando. Continúa el trabajo de los profesores de taller de las técnicas que con las impresoras 3D están haciendo máscaras, un insumo tan necesario para los trabajadores de la salud, que son la primera línea en esta lucha contra el Coronavirus, y que es una iniciativa que hay que extender. El Consejo Escolar debería facilitar ya los insumos y permisos de circulación necesarios para que quienes voluntariamente quieran colaborar puedan circular sin inconvenientes. Las y los docentes de la agrupación Marrón nos ponemos a disposición para ampliar la solidaridad entre trabajadores y proponemos realizar videoconferencias de SUTEBA La Matanza para debatir junto a la docencia y la comunidad educativa sobre la situación que estamos viviendo y cómo organizarnos ante esta crisis.