×
×
Red Internacional
lid bot

Opinion. Editorial de editoriales: lo que el 2020 se llevó (y también trae)

La pandemia no cede y hay nuevos rebrotes, cepas y confinamientos en el mundo. La espera de la vacuna y la apuesta por la recuperación económica. El sello de unidad y ajuste del Frente de Todos. Lo que empieza a nacer desde abajo.

Jesica Calcagno

Jesica Calcagno @Jesi_mc

Domingo 20 de diciembre de 2020

En Loop

El mundo entero maldice este 2020 y apuesta a su fin para dejarlo atrás. Pero la pandemia no da respiro y las noticias internacionales hablan de rebrotes. Alemania registró esta semana las peores cifras desde el inicio de la crisis sanitaria: 22771 contagios y 409 fallecidos. Italia tuvo este sábado la cifra más alta de fallecidos en la Unión Europea este fin de semana: 553 muertos y anunció nuevas restricciones y “zonas rojas”. En el Reino Unido, se conoció una nueva cepa del virus de propagación más rápida que preocupó en todo el mundo, y el primer ministro también anunció más restricciones en Londres y el sureste de Inglaterra. Se suman a la lista varias comunidades de España, y esta semana el presidente francés Emmanuel Macron dio positivo por covid-19.

Aunque varios países iniciaron el plan de vacunación, con show de famosos y políticos fotografiados mientras ponían el brazo, las expectativas económicas de recuperación siguen siendo anémicas. Oxford Economics que anunció una contracción del PIB mundial en 2020 del 4,2% bajó sus pronósticos de crecimientos para 2021 del 5,2% al 4,9% por el impacto se la segunda ola de coronavirus.

Argentina no es la excepción: la curva de contagios está en ascenso (21% de más casos que la semana anterior). Con el cortocircuito y la torpeza que sigue caracterizando al gobierno de Alberto Fernández, trastabilló el acuerdo con la vacuna yanqui. A pesar de darle la ley a los laboratorios para elegir tribunales extranjeros si hay demandas por problemas con las vacunas, como reconoció el propio Ministro de Salud Ginés, piden más condiciones de inmunidad. Por descarte, quedó Sputnik V: con apenas 300 mil vacunas de la primera dosis y el escandelete de que no está aún probada -nada más ni nada menos- para la población de riesgo de mayores de 60 años. Dicen que, cuando llegue al país, ya estaría aprobada esa etapa. El arribo de las primeras dosis se esperan para las últimas horas de este miércoles 23, e iniciaría la vacunación el lunes 28 de diciembre. Los esfuerzos del gobierno están en poder anunciar que comienza la vacunación antes que cierre el 2020.

Parece que Argentina también entró en la grieta de las vacunas, y Joaquín Morales Solá lo sabe. En La Nación afirma que “el problema con la vacuna rusa no es ideológico”, para acto seguido destacar que “el gobierno del autoritario Putin” tiene como primeros clientes de su vacuna a “Venezuela, Irán, Irak, Paquistán y algunas antiguas repúblicas soviéticas”. Pero según él no es ideológico, para nada.

La guerra por las vacunas es un nuevo capítulo de voracidad capitalista de negocios por encima de la salud. Como analizó Claudia Cinatti en La Izquierda Diario, “el ´nacionalismo de las vacunas` reproduce las rivalidades y tensiones geopolíticas que se vienen acumulando desde la crisis capitalista de 2008”. De un lado, se calcula que 70 países pobres y de ingresos medios bajos sólo podrán vacunar en el 2021 a 1 de cada 10 personas; mientras las potencias occidentales (EEUU, Canadá y varios países de la Unión Europea) acaparan dosis para vacunar al menos 3 veces a toda su población.

La unidad en la tormenta del ajuste

Luego de la última carta de la vicepresidenta Cristina Fernández que apuntó a la Corte Suprema y mostró su preocupación por las causas judiciales que la aquejan, esta semana terminó con un acto de unidad del Frente de Todos. Fue en el Estadio Único de La Plata protagonizado por la dupla presidencial Fernández -Fernández, la provincial Axel Kicillof - Verónica Magario, y la de la cámara de Diputados Sergio Massa – Máximo Kirchner.

Las principales definiciones las dejó la vicepresidenta, y Horacio Verbitsky hace un repaso en el Cohete a la Luna. Se podría decir que hubo dos que resonaron más. “Si hubiéramos estado todos juntos y la gente hubiera vivido mal los doce años y medio que estuvimos, tampoco nos hubieran votado”, dijo Cristina Fernández. En La Nación resumieron este mensaje titulando hoy “el gobierno abandona la idea del ajuste, con la mirada puesta en las elecciones”. Si quieren ganar las elecciones legislativas del 2021, la unidad no alcanza si avanza el ajuste. “Hay que alinear los salarios y jubilaciones con los precios de los alimentos y las tarifas” agregó. Curiosa afirmación cuando es la propia vicepresidenta quien viene de darle media sanción en el Senado al proyecto de nueva movilidad para jubilados, pensionados y beneficiarios de prestaciones sociales que propone desindexarlos de la inflación. Pero incluso esta dudosa fantasía a futuro, pretende borrar de un plumazo lo que ya dejó el 2020.

Las y los jubilados ya venían de perder 20% con Macri, pero en apenas 1 año de gobierno de Fernández, con la suspensión de la movilidad anterior y aumentos por decretos, perdieron entre un 7 y 18%. Es decir que recibieron casi 100 mil millones menos, como denunció Nicolás del Caño del Frente de Izquierda. Quienes rechazaron el robo de Macri hace 3 años frente a un Congreso militarizado, hoy se dividen en dos. El Frente de Todos que propuso y apoya este nuevo robo a los jubilados, y del otro lado el Frente de Izquierda que además de rechazarla en el recinto convoca a movilizarse este 22 de diciembre a todos aquellos que se mantienen del mismo lado. Con los viejos no decían las pintadas aquel 18 de diciembre del 2017.

Pero los asalariados también vienen de perder con respecto a la inflación que acumula casi 31% en 2020, mientras el poder adquisitivo de la clase trabajadora sigue atrás. Máximo Kirchner dijo en el acto “tenemos que ayudar a controlar los precios, los empresarios deben entender que los argentinos no pueden más”. Vale recordar que las cámaras empresarias entienden perfectamente, pero sus negocios están primero y no se andan con buenos modales. Sin contar que la nafta tuvo 5 aumentos en lo que va del año, encabezados por “la estatal YPF”.

Volviendo a las definiciones de Cristina en el acto, la segunda apuntó a la justicia y el staff gubernamental. “El lawfare no es sólo para estimagtizar dirigentes populares, sino para disciplinar políticos, para que nadie se anime a hacer lo que tiene que hacer y tengan miedo (…) Todos aquellos que tengan miedo, o que no se animen, hay otras ocupaciones aparte de ser ministro o ministra, legislador o legisladora. Vayan a busca otro laburo”, fueron sus palabras. En algunos sectores oficialistas se interpretó como una “arenga contra los tibios” de la propia coalición. Pero no es la única interpretación.

En Clarín Van Der Kooy se centra en la “batalla judicial” de Cristina, y habla de un pacto de La Campora con Jaime Stiuso. Según el editorialista, por la vuelta de un juez cercano al ex espía, en la Cámara Federal. Otros, como Román Lejtman en Infobae hilan esa frase con la posibilidad de cambios de gabinete. Según sus fuentes, Alberto Fernández comentó en la quinta presidencial que está conforme con el gabinete y los ministros, pero “ahora empieza el segundo tiempo y hay que reacomodar el equipo”. Habría nueve “inamovibles” para el presidente (Cafiero, Losardo, Guzmán, De Pedro, Katopodis, Ibarra, Vitobello, Beliz, Biondi), y sí suenan para conseguir otro laburo el canciller Felipe Solá, Matías Kulfas (Producción) y Juan Cabandié (Ambiente). Otros agregan a esa lista a Ginés González García (Salud), y que desde el kichnerismo apuntan a correr a Marcela Losardo (Justicia) y Sabina Frederic (Seguridad). Algunos también suman a Moroni (Trabajo). Como sea, la tormenta del ajuste no va a resolverse con cambios de gabinete aunque se quiera presentar como “oxigenación”. Dentro de la coalición hay unidad en un punto clave que hace al ajuste: pagarle al FMI a costa del pueblo trabajador.

Mientras el 2020 deja un nuevo ajuste en "unidad" de la coalición gobernante, el debate de la interrupción voluntaria del embarazo tendrá un nuevo capítulo en el senado el 29 de diciembre y se esperan nuevas movilizaciones. El oficialismo sigue limando cada vez más el proyecto de la Campaña Nacional por el Derecho del Aborto, para lograr los votos necesarios. Pero como reconoce hasta el propio Horacio Verbitsky, no hay nada asegurado, y los 9 días que faltan son una eternidad. En un informe de OjoPúblico publicado en Tiempo Argentino cuentan ese tras-bambalinas: son "más de 200 funcionarios –en diferentes niveles de gobierno e instituciones estatales– que promueven una agenda común a la de grupos antiderechos o negacionistas de la ciencia". Y especifican que están identificados en su mayoría con "Propuesta Republicana (PRO), el Frente de Todos y la Unión Cívica Radical (UCR)".

Lo que recién empieza

Mientras se espera que la inflación cierre el 2020 en 37%, los asalariados siguen siendo golpeados. Los salarios registrados reales del sector privado están un 15,8% por debajo de 2015 según datos del Ministerio de Trabajo, y 18,4% abajo según el Indec. En junio de este año se estima que en sectores como minas y canteras y hoteles y restaurantes las pérdidas fueron mayores al 20 %. La contracara es que rubros como la carne los precios acumulan aumentos del 54% en los últimos 12 meses.

Esto explica que entre noviembre y diciembre se vengan multiplicando los conflictos y reclamos de las y los trabajadores. Por despidos, por salarios, amenazas de cierre.

La huelga aceitera muestra el poder de la clase trabajadora, paralizando hace 11 días un sector estratégico del capitalismo argentino. Como cuenta Lucho Aguilar, la medida de fuerza alcanza a 28 terminales portuarias, decenas de plantas aceiteras y afecta el flujo de camiones, que pasó de 3.300 a 1.280 por día. Además hay más de 120 buques de ultramar esperando cargar más de 4.5 millones de toneladas de granos y subproductos. Reclaman una mejora salarial, mientras desde la cámara empresarial aceitera reconocen que “se pierden por día alrededor 100 millones de dólares”. Prefieren perder más de lo que implicaría la mejora salarial. Como explicó Zamboni, abogado de la Federación Aceitera de los trabajadores, “es una generación de obreros que vio a sus padres rebajar sus salarios, perder sus trabajos, que sufrió en carne propia la flexibilización laboral de los 90 en los cordones industriales y que no está dispuesta a sufrirlo nuevamente”. Eso es lo que está de fondo.

No son los únicos. Trabajadoras y trabajadores de salud se organizan como autoconvocados, pasando por arriba de la inacción de las direcciones sindicales y burocráticas, como en la Ciudad de Buenos Aires, en la provincia que vienen de cortar el Puente Pueyrredón esta semana. Los periodistas de Pagina 12 también anunciaron un paro hasta navidad, y denuncian que sus salarios se derrumbaron desde la llegada del Grupo Octubre, del oficialista Víctor Santa María. El sueldo de un redactor/a quedó el mes pasado “más de 19 puntos por debajo de esa línea de pobreza” dicen en su comunicado.

Metalúrgicos de Galvez Santa Fe también están autoconvocados por reclamos salariales. En su comunicado apuntan a la dirección del sindicato que no los defiende, explican que buscan "visibilizar el descontento que tiene la mayoría de los trabajadores metalúrgicos, que sienten que no se los escucha, que los canales naturales de comunicación que tiene el gremio y dicha seccional aparentemente no estarían funcionando como corresponde (…) en la seccional Gálvez, funciona verticalmente, desde arriba hacia abajo, pero nunca son escuchados los reclamos desde abajo hacia arriba".

El cuadro en diciembre se completa con el aumento de la pobreza que escaló casi 4 puntos en este primer año del gobierno de Fernández, y alcanza 64% en niños, niñas y adolescentes.

Diego Genoud en El DiarioAr tira algunos datos al hilo que dan sustento al creciente malestar. A los 2 millones de desempleados se agregan 2 millones y medio de subocupados (Indec). Las consultaras privadas confirmaron los pronósticos de Claudio Lozano: la desocupación real es del 20,6%. Todavía hay 1,9 millones de asalariados menos que en 2019 (CETyD-UNSAM). Para la OIT Argentina tiene la tasa más baja de ocupación de América Latina (47,7%), y el sueldo mínimo más bajo de América Latina.

Genoud cuenta que un ministro de Fernández que recorre el conurbano se tranquiliza con una supuesta “resignación creciente en sectores que no olvidan la experiencia traumática de Macri presidente y cada vez se conforman con menos”. El deseo de esa idea del “mal menor” para bajar aspiraciones y hacer “digerible” el ajuste que ya comenzó. Pero visto desde otro ángulo, muchos de esos sectores votaron a este gobierno con la aspiración de mejorar su situación, y su experiencia recién está empezando. La lucha por tierra y vivienda de Guernica mostró esas mujeres y familias decididas a la acción directa y su desilusión con el gobierno. Los autoconvocados que emergen en distintas provincias y gremios son un nuevo síntoma, con el agregado de la decisión de crear sus propios organismos para exigir a las burocracias oficialistas de los sindicatos. Enfrentar el ajuste para que la crisis no la pague el pueblo trabajador, será obra de las y los trabajadores mismos.

PostData

Hoy Martín Rodríguez en El DiarioAr nos define como “el lugar más manta corta de todos: sin el gasto social la Argentina se derrumba; con el gasto social la Argentina no se transforma”. Un drama montado sobre esos dos polos, dice. Pero no son los únicos polos, la manta es corta para el pueblo trabajador, porque hay alguien que nos afana la manta larga. En un repaso por los ganadores, Paolo Rocca de Techint aumentó su riqueza en el 2020 en U$S 218 millones, y Marcos Galperín de Mercado libre en U$S 3.500 millones. Los bancos privados ganaron entre enero y septiembre de este año $ 450 millones por día. La industria farmaceútica, donde se destaca el “magnate nacional” Hugo Sigman, sólo en los primeros 6 meses del año facturaron $147.606 millones. En el sector agroexportador se calcula que entre octubre 2020 y marzo 2021 van a facturar U$S 11.275 millones por exportación de trigo, maíz, harina y aceite de soja.
Eso es el aumento de la desigualdad: los pobres más pobres, y los ricos más ricos. El drama viene de no cuestionar a esos ricos más ricos, no se los puede omitir o naturalizar. Y es un drama mundial, como describen algunos datos publicados en la Revista Nuso. “Entre 1978-2012, e porcentaje de riqueza global en manos del 0,1% más rico aumentó del 7% a 22%. Si nada cambia, en 2030 se estima que el 1% más rico poseerá dos tercios de la riqueza global”. Agrega datos para las generaciones más jóvenes, que si todo sigue igual, por ejemplo los millennials en EEUU poseerán en 2030 sólo el 16% de la riqueza del país a pesar de que serán en ese momento la generación adulta más grande. Es que, incluso viendo sólo una parte de este año, esa desigualdad mostró su obscenidad: en EEUU un grupo económico dirigido por Warren Buffet ganó 56.000 millones de dólares los primeros seis meses de la pandemia, mientras una de sus compañías despedía a 13.000 trabajadores.
El neoliberalismo que supo ser exitoso por varias décadas en el mundo, y que en Argentina todos los gobiernos constitucionales que le siguieron a la dictadura mantuvieron en sus elementos estructurales, es lo que empieza a entrar en crisis porque sus consecuencias catastróficas en las masas se sienten en la piel. Nadie puede creer a esta altura que este porvenir se vaya aceptar sin grandes convulsiones. Ahí radica el corazón de una nueva etapa, donde además de hablar de revolución, se empiece a hacer.


Jesica Calcagno

Nació en Buenos Aires en 1984. Licenciada y profesora en Sociología (UBA). Acreditada en el Congreso.

X