La agencia federal asegura que la filtración no fue producto de un ataque extranjero. El director de la agencia dice que en EE.UU. no existe "la privacidad absoluta"
Jueves 9 de marzo de 2017 11:15
El Buró Federal de Investigaciones (FBI) estadounidense está buscando a la persona que filtró numerosos documentos, publicados por el portal WikiLeaks, de la Agencia Central de Inteligencia. Según informa el New York Times la búsqueda se realiza luego de que las autoridades llegaron a la conclusión de que no se trató de un ataque de un país hostil.
Según la información que recoge la agencia Reuters, entre funcionarios estadounidenses, contratistas de la CIA serían probablemente, los responsables de violar las normas de seguridad y entregaron documentos sobre las herramientas utilizadas por la agencia de espionaje, para realizar ciber ataques e infiltraciones a dispositivos móviles, al grupo activista WikiLeaks.
Dos funcionarios que emitieron declaraciones a Reuters bajo condición de anonimato sostuvieron que las agencias de inteligencia estaban al tanto desde fines del año pasado sobre la filtración, que llevó el martes al WikiLeaks a publicar miles de documentos.
Según los documentos publicados por WikiLeaks, hackers de la Agencia Central de Inteligencia (CIA) podían acceder a dispositivos de Apple o teléfonos móviles que operan con el sistema Android de Google u otras plataformas a fin de capturar mensajes, incluso si estaban encriptados con un software sofisticado.
La Casa Blanca afirmó el miércoles que el presidente Donald Trump está "extremadamente preocupado" por la violación de seguridad de la CIA que llevó a las filtraciones de WikiLeaks.
"Cualquiera que haya filtrado información confidencial será considerado responsable legal en el mayor grado. Iremos tras las personas que filtraron la información confidencial. Los perseguiremos todo lo que permita la ley", dijo a periodistas el portavoz Sean Spicer.
Reuters afirmá que sus fuentes aseguraron que los documentos publicados sobre las técnicas de intervención electrónica de la CIA usadas entre el 2013 y el 2016 eran auténticos.
El director del FBI James Comey aseguró, durante una conferencia sobre ciberseguridad en la Universidad de Boston, que en EE.UU. no existe "la privacidad absoluta". "No hay tal cosa como la privacidad absoluta en EE.UU., no hay nada que esté fuera del alcance judicial", dijo Comey justificando la invasión a la privacidad y el espionaje que incluye a los propios ciudadanos estadounidenses.
El martes, WikiLeaks dijo en un comunicado que la CIA "perdió control" de un archivo sobre métodos de hackeo que parece haber circulado "entre ex hackers y contratistas del Gobierno estadounidense sin autorización, uno de los cuales entregó partes del archivo" al grupo activista.
Las filtraciones destaparon la impunidad con la que se manejan las agencias de seguridad estadounidenses. Las escuchas y ciber ataques sobre funcionarios extranjeros y contra los propios ciudadanos violando los derechos elementales se han vuelto un práctica recurrente.
La filtración de documentos es la mayor en la historia de la CIA, aunque la mayor sufrida por Estados Unidos fue la de los documentos diplomáticos y militares del 2010 que supuso una condena de 35 años para la ex analista militar Chelsea Manning.
