Elecciones 2021. El Frente de Todos le pide a Mariano Arcioni que baje su lista en Chubut

La derrota electoral que sufrió el Frente de Todos a nivel nacional y su aliado, el ChuSoTo a nivel provincial abrió una crisis que está en desarrollo más allá de la formación del nuevo gabinete nacional, que muestra que la respuesta del gobierno es un giro a la derecha, solo con mencionar al nuevo jefe de gabinete, Juan Manzur, sobran las palabras.

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En todo el país y en la provincia el ausentismo fue el gran actor de las últimas elecciones y el responsable de la derrota del peronismo y sus aliados. Lo nuevo fue que el “me quedo en casa” irrumpió en Comodoro Rivadavia, Trelew y Puerto Madryn, en el propio bastión del peronismo, como expresión del descontento social que provocó el ajuste del gobierno nacional y provincial, pero que a la vez no estaba dispuesto a votar a la oposición de derecha de Juntos, que ya les había saqueado sus vidas durante el gobierno de Macri.

Así, el 12 de septiembre pasado, la oposición dio la sorpresa y ganó las PASO. Juntos por el Cambio sumó como fuerza el 37% de los votos, mientras que el Frente de Todos quedó en segundo lugar, con alrededor del 27%. Como tercera fuerza y alcanzando el 13% de los sufragios se ubicó “Chubut Primero”, la lista del gobernador Arcioni y encabezada por el ministro de Seguridad de Chubut, Federico Massoni.

Este resultado, si se mantiene, haría que el Frente de Todos perdiera en el Senado dos de las tres bancas en juego. Y esto, junto al resto de los resultados negativos para el gobierno nacional se expresaría en que el oficialismo perdería el quorum propio en el Senado de la Nación. En estos datos radica la preocupación del kirchnerismo.

Por ahora, las respuestas desde Fontana 50, a pesar de las gestiones del Gobierno nacional, el gobernador Arcioni se comprometió a mantener en pie la lista propia, con Massoni a la cabeza. Prometió recién para después de las elecciones de noviembre cambios en el gabinete.

Por su parte, el gran derrotado de las elecciones provinciales, el ministro de seguridad, Federico Massoni en su tuiter manifestó que no declina su candidatura: “A mí los únicos que me suben o me bajan son los ciudadanos de Chubut”.

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La crisis en el oficialismo nacional y provincial siguen abiertas de cara al 14 de noviembre

Martín Saez, docente y candidato a senador nacional por el Frente de Izquierda Unidad declaró “Luego de una semana de mucha crisis para el gobierno nacional y provincial tras la derrota electoral del pasado 12 de septiembre, Alberto Fernández con en el cambio de gabinete dio un mensaje claramente orientado a la derecha”.
En este sentido Saez señaló que “Alberto Fernández y el Frente de Todos se refugia en el peronismo más rancio, con dirigentes ligados a distintos factores de poder, como Juan Manzur, o Aníbal Fernández o Julián Domínguez con la intención de evitar perder poder de cara a la elección de noviembre y tratar que el descontento en las urnas no llegue a las calles”.

Así manifestó que “El nuevo jefe de Gabinete, el misógino Juan Manzur, fue una pieza clave para que Mauricio Macri lograra avanzar con el pacto fiscal en 2017: constituyó uno de los famosos “dadores voluntarios de gobernabilidad”. El gobernador Mariano Arcioni, estaba en el mismo grupo de “dadores voluntarios de gobernabilidad” y hoy es una pieza clave de la política extractivista que impulsa el gobierno nacional”.

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Agregó que “El resultado electoral podría advertirse de antemano en la catástrofe social. Las elecciones del último domingo se desarrollaron en el peor escenario social de todas las votaciones desde el período 2001-2003 hasta la actualidad. Ese escenario no es un producto natural de la herencia macrista y del impacto del Covid. Las decisiones de Alberto Fernández contribuyeron a alcanzar el 42 % de la pobreza en el segundo semestre de 2020. Lo mismo sucede en la provincia, donde las decisiones de Arcioni son las que contribuyeron a llevar la pobreza e indigencia a niveles récord en Chubut.”

Finalizó diciendo “Desde el PTS y el Frente de Izquierda Unidad siempre sostuvimos que es incompatible pagar una deuda externa ilegal, ilegítima y fraudulenta y “llenar la heladera de las y los argentinos”, que fue la promesa de campaña en 2019 del Frente de Todos y sus aliados, como Arcioni. A esta situación nos han llevado los gobiernos por ser totalmente serviles a las políticas del FMI, de los acreedores internacionales, del imperialismo y de los intereses patronales. Por eso el PTS en el Frente de Izquierda Unidad, que en las últimas elecciones se ha colocado como tercera fuerza política nacional de las y los trabajadores, en lo inmediato y ante la nueva pelea planteada en el terreno electoral hacia las elecciones de noviembre con el objetivo de obtener una bancada de la izquierda anticapitalista y socialista en el Congreso Nacional (lo cual será una dura pelea ya que ninguna banca está garantizada), el desafío de nuestro partido, el PTS, es utilizar el entusiasmo generado por este resultado para avanzar en la estructuración de una fuerza militante en el seno de la clase trabajadora y los distintos movimientos de lucha, porque como se demostró en la lucha del derecho al aborto, se votó en el congreso pero se conquistó en las calles”

Convertir la bronca en organización y construcción

De cara a las elecciones de noviembre hay que profundizar ese camino para transformar el ausentismo y el voto en blanco o nulo en nuevos votos para el FIT-U; como sostuvimos en la campaña previa a las PASO: “hay que convertir la bronca en organización”.

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Más allá de los cambios de figuritas, el Frente de Todos y el ChuSoTo traen más de lo mismo: más derechistas y más FMI y pago de la deuda. La derecha se apura para avanzar en la flexibilización y en mayores ataques, y hay que aprovechar las elecciones de noviembre para consolidarnos como una tercera fuerza, organizando y construyendo una mayor fuerza de independencia de clase, anticapitalista y socialista para lo que vendrá después de las elecciones generales, que es donde verdaderamente está el centro de las preocupaciones del gobierno nacional y provincial y la oposición de derecha.