El Círculo Rojo. El Gobierno de Lacalle Pou y un ajuste a la uruguaya

Sobre eso habló Diego Sacchi en su columna sobre noticias internacionales del programa de radio El Círculo Rojo, que se emite todos los domingos de 21 a 23 hs por Radio Con Vos.

Se cumplieron 5 meses desde que asumió el nuevo gobierno de la Coalición Multicolor, que reunió desde los derechistas partido Colorado y Nacional, hasta sectores ligados a los militares.

Si repasamos las noticias que nos llegan, solo se habla de la gestión de la pandemia por parte del Gobierno uruguayo. Sobre esto hay varios análisis de expertos explicando la diferencias poblacionales, urbanas, etc.

Pero de lo que se habla menos es que Uruguay está en su momento “macrista” podríamos decir, aunque Alberto Fernandez nos presenta al presidente Lacalle Pou como su “gran amigo”.

A la inversa de lo que sucedió en Argentina, la derecha llegó al gobierno luego de 15 años de que el Frente Amplio mantuviera la presidencia.

Ese momento “macrista” incluye situaciones como el escándalo por las escuchas ilegales del Ejecutivo hacia miembros de la propia coalición gobernante, algo que destapó el "Todo queda grabado" que dijo la vicepresidenta Beatriz Argimón sobre el Gobierno que integra.

En medio de la pandemia el Gobierno uruguayo presentó la Ley de Urgente Consideración (LUC), con 502 artículos. Un dato: si sumamos todas las anteriores leyes similares desde la vuelta de la democracia, no llegan a los 400 artículos.

Una particularidad es que si esa propuesta que envía el Ejecutivo no se trata dentro de los 90 días, automáticamente se convierte en Ley y aunque la ley lleva el título de “Urgente” no trata temas relacionados con el Coronavirus.

De conjunto la ley es un intento de reforma del Estado, ajuste y recorte en varios derechos.

El achicamiento del estado, básicamente es, reducir la cantidad de empleados, cambiar el control estatal de sectores claves como la Electricidad, el agua, combustible. Además regulan el sistema de educación pública, abre un debate sobre las jubilaciones, se cambia la ley de inclusión financiera e incluye modificaciones de la política de áreas protegidas por razones medioambientales.

Junto con eso incluye puntos que le da mayor libertad de acción a las fuerzas de seguridad y recorta derechos a la protesta social, al limitar el derecho de huelga prohibiendo las ocupaciones y transforma en ley el decreto frenteamplista que prohibía los piquetes como forma de lucha histórica de los trabajadores.

Lacalle Pou parece que entendió bien eso que le recomendaban a Macri de “hacer todo el daño al principio” y aprovecha la “primavera” que vivo por la gestión de la pandemia para pasar una gran reforma.

Hay algo que me resulta interesante viendo el panorama. Nos repiten tanto eso del ejemplo del “respeto a las instituciones” y “los consensos” uruguayos, pero ahora vemos como la derecha los revolea por los aires para aplicar el ajuste.
La respuesta a estas reformas comenzaron a expresarse en las calles. El último viernes unas 10.000 personas se movilizaron en Montevideo convocados por la Coordinación No a la LUC.

Más información: Miles marcharon en Montevideo contra el ajuste que prepara Lacalle Pou

Muy por detrás están las direcciones sindicales referenciadas con el Frente Amplio que apuestan más a las medidas “institucionales” para frenar a la derecha que a la calle.

Digamos que ahí se juega lo que pueda suceder. Si la pandemia por coronavirus no pegó de lleno en Uruguay, la que sí va a golpear es la derecha con la pandemia del ajuste y a esta solo se la para en las calles.