POLÍTICA ESTADO ESPAÑOL. El Gobierno “progresista” va a enviar más armas a Ucrania esta misma semana

La ministra de Defensa Margarita Robles ha participado este martes en Praga en una reunión informal de los ministros de Defensa de la Unión Europea, en la que ha anunciado que el Estado español va a enviar a Ucrania esta misma semana munición de largo alcance y material de invierno. Armamento que se hará llegar a través de un país tercero “aliado”, sin especificar cuál, que suministrará los medios aéreos necesarios para trasladar el stock al territorio ucraniano.

El Gobierno ya anunció hace unos días, coincidiendo con el sexto mes de guerra en el país y con motivo del “día de la Independencia”, que se dispone a redoblar el envío de armas a Ucrania. Así, además de este envío de municiones y equipo de invierno, se prepara un cargamento de material militar que incluiría una batería antimisiles, vehículos acorazados, más munición de armamento pesado y adiestradores militares.

Continúa así la política militarista e imperialista del Gobierno “progresista”, que presidió la última Cumbre de la OTAN en Madrid. El PSOE cierra filas en este sentido, con Sánchez y Robles a la cabeza, dejando claro el compromiso político del ejecutivo con el envío de armas y con el aumento del presupuesto militar al 2% del PIB —lo que supone duplicarlo en los próximos años—.

Por su parte, desde Unidas Podemos siguen defendiendo “la vía diplomática”, como sostenía hace unos días Irene Montero. Es decir, confiar en que la diplomacia imperialista de la OTAN y la UE, mientras asumen y guardan silencio ante el envío de armas. En cuanto al aumento de los presupuestos militares, tanto Yolanda Díaz como los socios de coalición del PSOE —ERC, Bildu o Más País— se han pronunciado en contra, pero mantienen las negociaciones. Desde el PSOE remarcan que “el gasto militar va a subir sí o sí” y puede ser otro “sapo a tragar”.

Tras la guerra en Ucrania y la intervención imperialista de la OTAN y la UE no sólo se encuentra el envío de armas, sino también un plan de rearme militar a gran escala de todos los países socios. Esta hoja de ruta imperialista es asumida en el Estado español por el Gobierno liderado por el PSOE. Y más allá de gestos y discursos “críticos”, cuenta con la complicidad en primer lugar de Unidas Podemos, Podemos y el PCE, pero también de los socios de coalición.

Nada tiene la clase trabajadora que ganar tras los gobiernos capitalistas europeos, al contrario, padecer sus guerras y sus crisis, que además golpean con consecuencias catastróficas en territorios de África o Asia. El movimiento obrero europeo debe enfrentar a sus propios gobiernos, en solidaridad internacionalista con el resto de la clase obrera mundial, también con los trabajadores que en Rusia enfrentan a Putin.

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