La semana previa a la feria judicial se volvió a discutir el proyecto. El PRO continúa poniendo obstáculos para que la licencia se apruebe.
Martes 26 de julio de 2016 11:14
Hace ya meses que se viene discutiendo en la Legislatura Porteña la licencia por violencia de género para las docentes de la Ciudad.
El Frente de Izquierda presentó el propio, mientras que también lo hicieron otros bloques como el FPV, y el PRO. Sin embargo, en la última sesión del 14 de julio, el PRO una vez más, puso trabas para la aprobación de la licencia.
Claramente los derechos de las mujeres no son prioridad para el Gobierno.
El PRO quiere judicializar a las mujeres en situación de violencia
La diferencia fundamental del proyecto presentado por el PRO con el del resto de los bloques, es que pretende que las docentes para tramitar la licencia deban presentar la correspondiente denuncia judicial en un plazo de 72hs. Mientras tanto el FIT, como el FPV, el bloque de Gustavo Vera, el del Partido Socialista, acuerdan en que esto sería una enorme dificultad para las mujeres que son víctimas de violencia, y que sólo con presentar un certificado emitido por cualquier organismo de protección de derechos de las mujeres, como un Centro de la Mujer, la Oficina de Violencia Doméstica, etc., es suficiente.
Lo grave de esto es que no sólo las denuncias judiciales llevan mucho tiempo y esto hace mucho más difícil la grave situación por la que de por sí está pasando una mujer, sino que pretenden que las mujeres estén a merced de una justicia machista y patriarcal, que encarcela mujeres cuando llegan a hospitales con abortos espontáneos, como sucedió con el caso de Belén en Tucumán; la misma justicia que es cómplice y responsable por el negocio de la trata y la prostitución.
En una de las últimas sesiones, se encontraba presente Analía Monferrer, Directora de la Oficina de Violencia Doméstica (OVD), dependiente de la Corte Suprema de Justicia, donde pueden presentarse mujeres en situación de violencia, ser atendidas y asesoradas. Ella expresó que en esta dependencia no es obligatorio que las mujeres realicen la denuncia judicial. ¿Por qué sí entonces lo sería para una docente que necesita tramitar una licencia por violencia de género?
Monferrer mencionó datos alarmantes, a partir de las estadísticas de la dependencia. Uno de ellos, es que las mujeres demoran entre 5 y 8 años en presentar una denuncia ante un organismo de protección de derechos, como la OFV. Ya sea porque no se animan a hacerlo antes, o porque la dependencia económica, la falta de trabajo, le impide poder hacerlo antes: no pueden llevar a cabo una denuncia (de cualquier tipo, no sólo judicial) contra su agresor, cuando no están en condiciones de automantenerse y mantener a sus hijos.
¿Cómo es posible imaginarse que una mujer, que soporta durante años el maltrato machista antes de presentarse ante cualquier organismo, sea obligada, después de haber sido golpeada y maltratada, a presentar una denuncia judicial? La misma justicia además, que interviene en casos como el de Belén, o que deja impunes a los pocos imputados en el caso de Marita Verón.
Esto es una forma más de maltrato de la que cotidianamente son víctimas las mujeres, a la que el PRO quiere someter.
Por eso desde la banca de Patricio Del Corro, del PTS en el Frente de Izquierda, se presentó también un Plan Integral de Emergencia contra la violencia hacia las mujeres, que “además de licencia laboral, exige refugios, subsidios, planes de créditos para viviendas, equipos especialistas interdisciplinarios para el acompañamiento de las mujeres y sus hijos, entre otras cosas. Medidas mínimas que cualquier gobierno debería tomar si realmente considera un problema social la cuestión del machismo y la violencia hacia las mujeres”.
Con la fuerza de las mujeres
Las docentes de Pan y Rosas, como parte de la comisión de mujeres de Ademys y como congresales por la oposición en UTE, estamos llevando a cabo una campaña en las escuelas, con juntadas de firmas y convocando a movilizarnos, para que el proyecto de licencia por violencia de género, sin la oligatoriedad de la denuncia judicial, se apruebe.
Como demostró la marcha por Ni una Menos, el año pasado y este año, donde fuimos miles, el único modo que se podrá conquistar estos derechos postergado es con la fuerza de las mujeres en la calle, como ha sido históricamente.
El Encuentro Nacional de Mujeres de octubre, que se realizará en Rosario este año, es otra instancia en la que las mujeres nos organizamos y peleamos por estos derechos, como el derecho al aborto legal, seguro y gratuito, que en 12 años los gobiernos K fue negado, así como el PRO se niega a reconocer ahora.
El PRO no conoce lo que les sucede a las trabajadoras de la educación y a todas las mujeres. Por eso pospone el debate y su proyecto es contrario a nuestros intereses. Desde la Izquierda Diario queremos ser la voz de las compañeras en cada una de las escuelas y hacia el Encuentro Nacional de Mujeres. Así nos queremos preparar con todas nuestras fuerzas.
Te invitamos a ser parte de esta pelea, firmando y difundiendo el petitorio:
FIRMA por el Proyecto de Ley de Licencia y opción a traslado por Violencia de Género para docentes
Julieta Azcárate
Nació en Buenos Aires en 1982. Militante del PTS, licenciada en Sociología y docente.