Siguen las suspensiones de clases en la E.E.S Nº 2 “Bernardino Rivadavia” por falta de luz y agua. Siendo una de las escuelas más importantes del distrito, los estudiantes del instituto se resisten a seguir estudiando en pésimas condiciones.
Martes 21 de junio de 2016
28 y 29 de abril, 02, 17 y 18 de mayo, fueron las fechas en las que el colegio no abrió sus puertas porque “no había agua”. Esa fue la única explicación que dieron los directivos del Instinto. “Mañana no hay clases” era el mensaje que corría por todas las redes, cuando los estudiantes preguntaban a los preceptores por qué, la respuesta era “no hay agua por corte programado de Aysa” o “porque todavía no arreglaron el problema”.
El 23 de mayo a la mañana se cortó la luz en la mitad de la escuela después de un acto y hubo que apagar las bombas de agua. Como nadie lo soluciono por la tarde, al otro día tampoco hubo clases. La historia se volvió a repetir; 20 minutos antes del horario de salida hubo un cortocircuito que dejó sin luz al instituto. El corto fue en el mismo arreglo que había hecho Edenor la semana anterior.
Al respecto, Bianca nos cuenta: “Nos fuimos por otras salidas como una medida de precaución (día lluvioso y 500 chicos saliendo por la puerta principal, donde ocurrió el cortocircuito), por lo que tuvieron que suspender las clases del turno tarde. La escena ridícula de los directivos haciendo una especie de barrera para que no salgamos por la puerta grande y a la vez iluminando con sus smartphones tratando de normalizar la situación despidiéndose con un “hasta el lunes chicos”, no hizo más que seguir evitando el problema real que es la falta de presupuesto del municipio hacia la escuela, al igual que en la mayoría de escuelas públicas del país”.
En un aula de planta baja ubicada entre dos baños hay una mancha de humedad enorme que genera un olor asfixiante al menos desde el comienzo del año, causada por un caño de agua que terminó de romperse el viernes pasado, por lo que esta aula fue clausurada.
Las autoridades se comprometieron a que el problema de infraestructura se va a solucionar durante las vacaciones de invierno ya que requiere de un corte total de agua, por lo que en el tiempo de frío que aún queda deberán estudiar en esas condiciones precarias.
Queda plasmada en las paredes del colegio la falta de inversión en educación pública durante doce años de gobierno Kirchnerista, y el desinterés del nuevo gobierno que sacó a un barón del conurbano del municipio pero continúa con las políticas de vaciamiento de la escuela pública; política que se reproduce en centros de estudiantes como el del Rivadavia, que en lugar de hacer denuncias claras, se pierde en cartas ’a quien corresponda’ y se organiza según la comodidad de los directivos, casi olvidando lo que pueden conseguir los estudiantes organizados.
* Alan, Bianca y Lautaro (Secundarios a la Izquierda Instituto Rivadavia)