En Cañuelas, hace ya un año, nos estamos organizando desde El Semillero (independientes+PTS) para debatir sobre la situación en la que vivimos la juventud, las mujeres, las disidencias y lxs trabajadorxs en este contexto de crisis que se profundizó con la pandemia del Covid-19, y para organizarnos porque entendemos que es en las calles, luchando, donde conquistamos derechos y defendemos lo nuestro. Y este 24 de marzo, no será distinto, estaremos en Plaza de Mayo acompañando al Encuentro Memoria Verdad y Justicia y junto a lxs que luchan contra la impunidad, la represión y por lxs desaparecidxs de ayer y de hoy.
Sábado 20 de marzo de 2021 21:08
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Desde el Semillero en Cañuelas salimos a las calles con el caso de Facundo Castro porque nos erizó la piel enterarnos de que había desaparecido, que su madre lo estaba buscando desesperadamente y que la última foto que se vio de él fue junto a un patrullero de la policía. Nos llenó de bronca y odio saber que la bonaerense de Berni y Kicillof lo desapareció y mató. Acompañamos la lucha de su familia, amigxs y conocidxs y nos sumamos a movilizar para denunciar la responsabilidad del estado, exigiendo respuestas y justicia.
Fuimos parte del corte del puente Pueyrredón y de las colectas solidarias para bancar la lucha de las cientos de familias en Guernica y en Los Ceibos por tierra para vivir. Explotamos de rabia cuando vimos el mega operativo de Berni y el gobierno para desalojarlas a palazos y balazos.
Retomamos la movilización en Cañuelas con el caso de Úrsula Bahillo que nos hizo gritar una vez más Ni Una Menos y el estado es responsable, mientras la sangre hervía porque su femicida era un policía de la bonaerense (una vez más), a quien cubrieron y protegieron, porque el estado dejó en claro que su prioridad no somos las mujeres destinando tan solo $11 por mujer por año para prevenir la violencia de género y re victimizándonos en las “comisarías de la mujer” y sus ministerios.
Somos la juventud que estuvo en las calles por el aborto legal, seguro y gratuito, que pelea a la par de lxs trabajadorxs, lxs estudiantes, las mujeres y disidencias por trabajo, por basta de precarización laboral, por vivienda y por basta de femicidios. Como aquella generación que aniquilaron en los 70´ por dar la lucha por un mundo más justo.
Estamos a días del 24 de marzo donde se cumple el 45° aniversario del golpe genocida, militar y escolástico, y seguimos viviendo el legado de crisis económicas, precarización y miseria llevadas adelante por los especuladores y hambreadores de ayer y de hoy.
Hablemos de historia
Argentina vivió entre 1969 y 1976 un proceso revolucionario que tuvo a la clase obrera y la juventud como principal protagonista. Iniciada como una rebelión de las bases contra los dirigentes burocráticos, se trató de la primera huelga general que el movimiento obrero organizó contra políticas impulsadas por un gobierno peronista, poniendo de manifiesto la crisis del proyecto político y social expresado por éste. Una rebelión caracterizada por sus métodos de lucha y organización que sólo se pudo callar con el golpe de Estado comandado por militares y políticos de la oligarquía.
En 1988 post golpe de estado Alfonsín, apoyado por grupos empresariales, lanza las leyes de impunidad y su plan de ajuste para estabilizar la inflación pero la pobreza no dejaba de subir.
En 1999 Menem con promesas de salariazo y revolución productiva, lleva adelante un gobierno de empresarios que arrasaron con todo, las privatizadas y los grandes grupos de poder toman el control económico haciendo costear con sus vidas a la clase obrera; indultos y saqueos ya eran ley.
En ese mismo año, De La Rúa y el Frepaso llamaron a Cavallo para consumar un nuevo saqueo, fugándose dólares al exterior y encarcelando ahorristas con el corralito y el famoso 1 a 1.
En 2002 llegó Duhalde a instaurar la mega devaluación.
En 2006 seguidores de Etchecolatz se llevaron a Julio López, por segunda vez, en la “vuelta de la democracia”, mientras Kirchner prometía que lo iba a encontrar. El kirchnerismo puso a Cesar Milani como jefe del ejército, quien formó parte del manejo de centros clandestinos de detención. Jamás desclasificó los archivos donde están escritos los nombres de todos los genocidas y desaparecidxs del golpe cívico militar.
Macri en 2015 volvió a llamar al FMI y contrajo una enorme deuda que sufrimos hasta el día de hoy. Además no solo se negó a tocar los archivos de la dictadura sino que los quiso beneficiar con el 2x1 a los responsables.
Todos estos ataques a la clase obrera, la alta especulación financiera y pagos en deudas insostenibles tienen un factor en común: desde 1970 a hoy se benefician los ricos y lxs trabajadorxs no.
Entonces... ¿Por qué nos movilizamos este 24 de Marzo del 2021?
Si de motivos hablamos… sobran. El que elige mirar para otro lado porque como dice el dicho “el horno no está para bollos”, es el gobierno de turno de Alberto Fernández y Cristina Fernández que junto a sus organizaciones, centros de estudiantes y sindicatos afines llaman a no movilizar. Sí, ese gobierno que “defiende” los derechos humanos, que pelea contra las injusticias, no quiere movilizarse este 24 de marzo. Se les cayó la careta y se notó el doble discurso.
Sin embargo, el ministro de economía Martin Guzmán, ese mismo día, mientras miles estemos en las calles estará reunido con la directora del FMI para re acordar el pago de la deuda ilegal e ilegítima contraída en el macrismo, esa que tanto denuncian pero que pagan a costa del sudor de nuestra frente. El peronismo, pagador serial, siempre termina el trabajo sucio.
Mientras gritamos contra la impunidad de ayer y denunciamos el futuro que le robaron a esa generación de desaparecidxs, estarán vendiendo el nuestro a los usureros internacionales. Repudiamos este encuentro porque esa fachada de responsables hoy, al igual que ayer, se sigue adueñando de nuestros recursos y nuestra vida.
Pobreza, precarización y desempleo
Hoy más de 20 millones de personas en Argentina son pobres pero aquellos que se enriquecieron durante esa década oscura hoy siguen siendo millonarios, incluso aumentan sus riquezas a la par de que el conjunto de la clase trabajadora sufre ajustes, recortes y tarifazos en un contexto de crisis económica donde el gobierno instaura un “sálvese quien pueda”.
Las jubilaciones de nuestrxs abuelxs, no llegan a la canasta básica y ellxs siguen esperando la vacuna contra el Covid-19 mientras los amigos del gobierno y los funcionarios desfilan por el pasillo VIP para recibirla.
Y al indagar cuántos trabajadorxs han perdido el empleo durante la pandemia aunque se haya decretado la “ley anti despidos”, nos encontramos con que el 20,9 %, lo que equivale a un quinto de la población, perdió su laburo. Esto es un ejemplo claro de que las leyes son papel mojado a menos que peleemos por su correcta implementación.
¿Y si somos sostén de una familia y hay que alimentarse, pagar alquileres, pagar cuentas? “Sálvese quien pueda”. Para colmo si te quedas en la calle y tomas un terreno para poder tener un mínimo lugar donde refugiarte, el gobierno te manda a la yuta, te hecha a balazos de goma y te acusa de usurpador y criminal.
No podemos tolerar que haya gente sin trabajo y gente trabajando más horas que durmiendo. Porque incluso, quienes trabajan cobran salarios bajísimos. Sino preguntémosle a esa juventud precarizada de las cadenas multinacionales de comida rápida o envíos como Rappi, Pedidos Ya, McDonald ’s, etc. que trabaja informalmente, sin protección de nada y con un sueldo que no alcanza ni para lo mínimo indispensable. Esa precarización es heredera legítima de la dictadura.
El aparato represivo y la complicidad del Estado
Desde los 30.000 compañerxs desaparecidxs del genocidio a esta parte, nos dicen que estamos en democracia, que memoricemos el Nunca Más y los recordemos. Pero hay que aclarar que aún en “democracia” siguen desapareciendo pibes y pibas:
Desde Jorge Julio López a Luciano Arruga, desde Santiago Maldonado a Rafael Nahuel, desde Luis Espinoza a Facundo Astudillo Castro, desde Lucas Verón y Brandon Romero a Alan Maidana. Y así, tantos más.
Desde Úrsula Bahillo hasta las miles de mujeres que piden auxilio a gritos para no morir y ser una cifra más en los femicidios pero solo reciben falsas promesas de las “instituciones” del estado.
Tantos ministerios y consejos y ninguna acción real, nunca poner la guita necesaria. Pero sí que la hay para pagarle al FMI y darle más recursos a las fuerzas represivas, que se llevan pibes de las barriadas por la pinta o por la cara con detenciones ilegales o gatillo fácil y hacen lo suyo en las redes de trata de mujeres. Esa que también sale a reprimir familias sin casa y laburantes peleando por mejores condiciones de trabajo, así como también, al pueblo de Chubut que le dijo no a la mega minería, otro de los “grandes negocios” que se volvió furor luego de la dictadura.
Nos quieren convencer de que el aparato represivo es hijo de la nueva democracia, que hay que “dar vuelta la página”. Y con toda la rabia que corre adentro nuestro les decimos a esos gobernantes y funcionarios que no olvidamos, no perdonamos y no nos reconciliamos. Que abran los archivos de la dictadura que ninguno quiso abrir. Ésta es la justicia divina, la que encubre a los genocidas del ayer pero también a los de hoy.
Sumate a marchar con El Semillero
Desde el Semillero de Cañuelas reivindicamos esa efervescente lucha por un mundo mejor, por cambiar las bases sociales de esta sociedad, de la generación de los 70 ́ al igual que los enormes ejemplos de pelea que lxs trabajadores, las mujeres y disidencias, y la juventud precarizada están dando hoy a lo largo y ancho de la Argentina. No nos resignamos a comer de las migajas que nos arrojan y recordamos que no hubo nunca una conquista que se lograra sin poner el cuerpo en las calles, enfrentándose al poder para dar vuelta la tortilla y las prioridades.
Este 24 de marzo nos vamos a movilizar por la memoria, la verdad y la justicia, pero también por continuar la lucha por cambiar esta sociedad y tirar abajo este sistema capitalista y explotador que no tiene nada más para ofrecernos que miseria.
Tenemos una cita de honor en las calles que fueron testigo de un gran levantamiento revolucionario y un genocidio a quienes pusieron en jaque al poder. Por ellxs, por nosotrxs y por el futuro no podemos no estar.
Te invitamos a sumarte para darle fuerza y unidad a todas las luchas en curso, en las calles, junto a nosotrxs y el PTS en el Frente de Izquierda.
