Este viernes la Mesa de Enlace emitió un comunicado que dice "Si el presidente no escucha, que el Congreso se haga cargo", en referencia a la legitimidad de las retenciones. El 2021 cerró con una liquidación record del sector.
Viernes 21 de enero de 2022
La Mesa de Enlace, integrada por la Federación Agraria, Confederaciones Rurales Argentinas, Sociedad Rural y Coninagro, emitieron un comunicado este viernes donde afirman que las retenciones no tiene sustento legal e instan al Congreso a tratar su reclamo en las sesiones extraordinarias. "Si el presidente no escucha, que el Congreso se haga cargo" dicen, llamando "a todas las fuerzas políticas legislativas". En Juntos por el Cambio ya se hicieron eco del pedido del campo: el diputado nacional del PRO, Pablo Torello, adelantó que impulsa un proyecto para disminuir gradualmente los derechos de exportación a la producción agropecuaria hasta llegar a la quita total.
La Mesa de Enlace considera que el Poder Ejecutivo perdió las facultades sobre este impuesto, tras vencer el pasado 31 de diciembre el plazo fijado en la Ley de Solidaridad Social que delegaba en el Presidente de la Nación reglamentar las alícuotas de las mismas y por el rechazo del Presupuesto Nacional para el 2022. Días atrás, el presidente de la Sociedad Rural Argentina, Nicolás Pino, declaró en una asamblea en Armstrong que “Las retenciones desde el 1º de enero deben ser de 0%. No deberían existir. Hay un vacío legal”.
A pesar de la confrontación del campo con el gobierno, hace apenas tres meses el Frente de Todos anunció la presentación del Proyecto Agroindustrial (que espera ser tratado), con una serie de beneficios impositivos al sector, entre ellos: beneficios para inversiones en construcciones; devolución de IVA en inversiones en tres cuotas, entre otros.
En el comunicado de la Mesa de Enlace afirman que “este tipo de impuestos de imposición rígida ponen en jaque a muchos productores que aún no saben si van a salvar los costos".
A cara de piedra, finalizan diciendo que el país “necesita reglas claras y justas” cuando el sector del agro viene de tener una liquidación record en 2021, mientras las mayorías trabajadoras siguen perdiendo con la inflación y la pobreza trepa al 40%.
El 2021 cerró con un récord absoluto en la liquidación de divisas del campo: u$s32.808 millones, un 62% más que el año anterior y con la cifra más alta desde el comienzo de este siglo.
Las grandes ganadoras del agronegocio están concentradas en pocas empresas multinacionales y de origen extranjero. El caso de los granos es ejemplificador: apenas cinco empresas concentran más del 60% de la exportación. Son la norteamericana Cargill, la china Cofco, las norteamericanas ADM, Bunge y la europea Dreyfus. De esta forma, las tres multinacionales de EEUU concentraron el 40% de las exportaciones de granos sin procesar durante el 2021.
Sin embargo la entrada récord de divisas al país durante el 2021, generadas con la explotación del suelo y la mano de obra local, no se destinan a generar empleo, construir viviendas o subir las jubilaciones. Esos dólares terminan en las cuentas bancarias del FMI y los especuladores financieros. Así lo admitió el propio presidente Alberto Fernández cuando el año pasado aseguró que “necesitamos exportar para que las divisas entren al país máxime cuando cargamos con una deuda tan enorme”.
Entre el poder económico más concentrado como el agro que quiere más beneficios y ganancias, y la decisión del gobierno de pagar y legitimar la estafa de la deuda con el FMI, condenan al país a la dependencia y la decadencia con la fuga permanente de riquezas y recursos.
