Nuevamente el gobierno patea demandas de la diversidad sexual para alargar su proceso, esta vez es la bullada Ley de adopción homoparental.
Viernes 18 de mayo de 2018
Múltiples debates se han generado por la indicación sustitutiva a la reforma de la ley de adopción, debido al incumplimiento de parte del Gobierno del plazo fijado para este 15 de mayo, donde debía ser presentada.
Pero el punto fuerte de la discusión, más allá de la poca importancia de Chile Vamos por el proyecto, es el carácter profundamente conservador del que se ha impregnado la reforma de la Ley de Adopción, que deja por fuera la adopción homoparental, que en palabras del mismo ministro, no se encuentra dentro del esbozo en primer instancia.
La diversidad sexual se ve privada del derecho a ser madres o padres, debido al carácter homofóbico y demonizador implantado por la derecha, fiel opositora de los derechos democráticos de la diversidad sexual como se expresa con la ley de identidad de género, optando por mantener a los niños y niñas en instituciones dependientes del SENAME, fuertemente cuestionado por los aberrantes casos de negligencia que se han dado a conocer en el último tiempo.
Frente a esto algunos parlamentarios de las diversas bancadas han expresado su opinión, como la diputada Natalia Castillo (RD) quien lamentó que el Gobierno no fuera capaz de cumplir su propio compromiso. “Me parece una mala señal que se siga dilatando la discusión sobre la reforma al sistema de adopción”. Sin embargo, agregó que para ella “era esperable que la derecha aún no logre acuerdo en torno a puntos que los dividen internamente como lo es la adopción homoparental” y se mostró en desacuerdo en determinar qué familia o personas está más apta para adoptar.
Es importante plantearse la necesidad de la separación efectiva de la Iglesia del Estado. Esto, junto con una modificación real y efectiva a la Ley de Adopción que no discrimine a quienes optan a ser padres y/o madres, basado en su identidad sexual.
Sin embargo, más allá de lo anterior, es necesaria la articulación de en primer lugar un gran movimiento de la diversidad sexual, independiente del gobierno, que pueda generar unidad con otros sectores como las mujeres, que hoy viven un momento histórico de movilización, los estudiantes y los trabajadores, ya que es por medio de la lucha en las calles, de una gran fuerza social, por la que podemos conquistar todos nuestros derechos.
La doble moral de la iglesia y la derecha en una de sus expresiones más crudas en que prefiere que miles de niños deban permanecer en centros y hogares en condiciones muchas veces precarias, poniendo por sobre las condiciones de vida de esos niños, en lugar de permitirles el derecho a un hogar, imponiendo su homofobia conservadora.