Durante este lunes la velocidad de contagio y la cantidad de terminales infectados por WannaCry disminuyó considerablemente, los paises más afectados siguen siendo Rusia, Ucrania, India y Taiwan.
Martes 16 de mayo de 2017
Los terminales infectados por el virus informático conocido como WannaCry disminuyó considerablemente en relación a la semana pasada, de los 179 países, en los que se introdujo el virus los más afectados siguen siendo Rusia, Ucrania, India y Taiwan, al igual que la semana pasada, según informó la firma de seguridad Avast.
Si bien el virus afectó computadores con el sistema operativo Microsoft Windows desactualizado, la compañía fundada por Bill Gates responsabiliza a la Agencia Nacional de Seguridad (NSA) de los EE.UU, al menos esto fue lo que señaló el presidente de Microsoft, Brad Smith, ya que, este ataque se llevó a cabo con una herramienta de hackeo desarrollada por la NSA, la que fue filtrada en el mes de abril. En este sentido el presidente de Rusia Vladimir Putin también apuntó sus dardos a hacia la agencia, señalando que "los genios" de este tipo pueden dañar a sus creadores una vez que son liberados, en alusión a la herramienta que serviría para atacar ciberneticamente a los enemigos del imperialismo norteamericano.
En tanto la Casa Blanca, se excusó, asegurando que la vulnerabilidad no es responsabilidad de alguna agencia estatal y culpó a "países extranjeros" y grupos terroristas. Tom Bossert, asesor de seguridad de Donald Trump señaló que "es un ataque bajo control, pero que representa una amenaza extremadamente seria".
Mientras algunos de los afectados realizaron el pago de los 300 dolares en Bitcoins exigidos por los hackers, hasta el momento no hay información de que hayan recuperado sus datos. Pero según la información obtenida hoy por las agencias de seguridad web la tormenta WannaCry parece estar amainando.
Este ataque cibernético a escala mundial nos deja en claro que la informática, y los bienes y servicios desarrollados a partir de esta industria son vitales para las relaciones económicas y sociales en nuestra época, debido a que, puede ser utilizado para intercambiar conocimientos, comunicarnos, informarse, pero a la vez de esta forma se transfieren cantidades muy variables de dinero, permite el funcionamiento de las telecomunicaciones en el mundo, entre las millones de aplicaciones industriales y domésticas que puede tener, es por eso que la posibilidad de acceder al control de la web o al cobro de rescate por datos se vea como algo lucrativo para quienes tengan los conocimientos suficientes como para burlar la rudimentaria seguridad de las plataformas estatales y de las instituciones públicas.
Una nueva industria gravitante para las relaciones de producción, y una nueva forma de enriquecimiento para los poderosos, no es sorpresivo que las acciones de las empresas de seguridad web como Fire Eye (EE.UU) o Cyren (Israel) se hayan disparado.