Comienzan a zonar las alarmas por Corea del Norte, y ya no son solo China y Corea del Sur, quienes podrían sufrir las consecuencias del clima armamentista entre Estados Unidos y el régimen de Kim Jong-Un.
E.E. Vergara Valparaíso, Chile
Martes 5 de septiembre de 2017
Parece que la paciencia es una habilidad muy poco desarrollada en el presidente de EE.UU Donald Trump. Si ya le venían sacando canas las pruebas militares desarrolladas por el ejército de Corea del Norte, la tolerancia ahora se le cae a pedazos, por lo que busca reordenar el tablero geopolítico, por medio de una campaña ofensiva en contra de Pyongyang.
Y es que la última bomba de hidrógeno probada este domingo pasado, ha alertado no sólo al gobierno norteamericano, sino al conjunto de las potencias y países aliados económicamente a Norcorea, quienes comienzan sopesar el nuevo contexto guerrerista que se abre, donde EE.UU amenaza con sanciones.
La amenaza del bloqueo económico
Sin duda una de las alternativas que baraja el presidente Trump, y que causa mayor preocupación a nivel internacional, es la del bloqueo económico, lo cual afectaría a diversos países del globo, entre los cuales se encuentra Chile, cuya recaudación por medio de las exportaciones, asciende a unos 27 millones de dólares.
Por su parte, el gobierno de Chile, expresó su rechazo al accionar de Pyongyang, por medio del ministro de RR.EE Heraldo Muñoz, quién por medio de su cuenta de twitter se refirió al tema. “El gobierno de Chile condena creciente amenaza nuclear de Corea del Norte. Comunidad internacional demanda evitar escalar y retomar negociaciones“.
Las amenazas en el caso de Chile, no son de sorprender, ya que el rechazo del gobierno de Chile a Norcorea, fue uno de los puntos centrales en la agenda del vicepresidente de los EE.UU, Mike Pence, en la búsqueda de acorralar al régimen totalitario de Kim Jong-Un.
Las guerras y sus consecuencias en el pueblo trabajador
Sin embargo el único afectado por el clima armamentista, y las guerras entre las diversas potencias, es el pueblo trabajador, quienes cruzados por los nacionalismos y las disputas de la burguesía, son condenados a sortear las peores consecuencias, tanto a nivel político, económico y social. Es por esto que la solidaridad de los trabajadores y los sectores populares, debe ser con los explotados y oprimidos del mundo entero, y no en sus gobiernos pro-imperialistas, ni en sus regímenes burocráticos, que parasitan a costa de su pueblo.
La batalla armamentista entre EE.UU y Corea del Norte, es la expresión del decadente estado en el que se encuentra el imperialismo norteamericano a nivel internacional, y las estériles maniobras del régimen norcoreano, por mantener un nivel significativo de poder dentro de la zona asiática.
