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Red Internacional
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LIBERTADES DEMOCRATICAS. El derecho a la adopción y la lucha de la comunidad sexodiversa

La lucha de la diversidad sexogenérica por sus derechos continúa. Recientemente, como resultado de una lucha de larga data, la Suprema Corte de Justicia de la Nación SCJN tuvo que resolver que las parejas del mismo sexo tienen derecho a adoptar.

Miércoles 19 de agosto de 2015

Foto:http://mexico.cnn.com/

El pleno de la SCJN declaró que cualquier tipo de sociedad de convivencia entre parejas del mismo sexo y heterosexuales son es consideradas como familia, y que por lo tanto tienen derecho a adoptar y compartir la patria potestad.

Este reconocimiento de las familias homoparentales representa una gran conquista para el conjunto de la diversidad sexogenérica, que y fue arrebatada mediante fuertes luchas políticas en el terreno de la movilización, lo legal y lo cultural durante los últimos años. Sería un error atribuir este triunfo a una mera concesión "democrática" de la SCJN y del gobierno de Enrique Peña Nieto, pues ya en ocasiones anteriores esta misma Corte ha avalado duros ataques contra los trabajadores y trabajadoras mexicanas, por vía de las reformas estructurales que legalizan el saqueo de los recursos naturales y la superexplotación de la mano de obra.

Justicia patriarcal al servicio del capital
A pesar de que en los últimos meses se ha avanzado en la conquista de importantes derechos para la diversidad sexogenérica frente al Estado, nuestro país sigue siendo un bastión de la homo-lesbo-bi-trans-fobia y los crímenes de odio.

Bajo este sistema capitalista y patriarcal, las leyes sólo sirven para proteger a los partidos del régimen y a los grandes empresarios, mientras que siguen impunes los miles de casos de feminicidios y crímenes de odio en todo el país. Tal es el caso de la joven transgénero que fue asesinada en Chihuahua y cuyo cuerpo mostraba claros signos de tortura, apesar de ello las autoridades determinaron que se trató de un ajuste de cuentas y dieron el carpetazo al crimen.

La impunidad en estos crímenes persiste debido a las políticas permisivas y las omisiones por parte del gobierno ante estos ataques, lo que ha convertido a México en el país de los feminicidios y el segundo país de América Latina con mayor índice en crímenes de odio.

Somos las mujeres y la diversidad sexogenérica quienes cargamos a diario sobre nuestras espaldas, con los trabajos más precarios y peor pagados. Por si fuera poco se nos obliga a ocultar nuestra orientación sexual e identidad de género en los centros de trabajo, al tiempo que sufrimos de acoso sexual y laboral por parte de gerentes y supervisores. Todo esto mientras los diputados y gobernantes se otorgan sueldos millonarios, aprueban leyes antipopulares y descargan la crisis económica sobre los trabajadores, campesinos y el pueblo pobre. Basta mencionar la reforma laboral disfrazada de educativa, que afecta a miles de trabajadoras y trabajadores de la educación y que pretende disolver la organización sindical de uno de los sectores más avanzados de la clase obrera mexicana.

¡Por la unidad de todas las luchas contra el gobierno asesino!
Es indispensable unificar todas las luchas de trabajadores, mujeres, la diversidad sexogenérica y todos los sectores explotados y oprimidos, que hagan frente a los ataques a las libertades democráticas y las reformas antiobreras que lo único que buscan es que paguemos la crisis que provocaron los gobiernos capitalistas.

Esta gran gesta tendría que retomar las luchas por los derechos de las mujeres y la diversidad sexogenérica, en perspectiva de transformar radicalmente la sociedad y construir nuevas relaciones libres de cualquier tipo de violencia u opresión. Para ello se hace indispensable unificar todas las luchas, al mismo tiempo que construimos una alternativa política e independiente de las mujeres, la comunidad sexogenérica, la juventud y los trabajadores que nos prepare para enfrentar los ataques de este régimen machista y patronal.