Fue en un discurso en el Senado de México, refiriéndose al acaparamiento de vacunas por los países más ricos, como planteó esta semana la OMS. Pero eso es tan miserable como usar privilegios para vacunarse, mientras los adultos mayores hacen fila para acceder a una dosis.
Mirta Pacheco @mirtapacheco1
Miércoles 24 de febrero de 2021 11:57
En Argentina se desató un escándalo político cuando salió a la luz que funcionarios, empresarios, amigos y familiares del poder accedieron a la primera dosis de la vacuna contra el Covid-19, mientras todavía no está vacunada la totalidad de trabajadores de la salud y recién estos días empezó la vacunación para adultos mayores teniendo que hacer largas filas. Cuando se trata de denigrar a las mayorías populares, no hay grieta.
Te puede interesar: Lista de vacunados vip: empresarios, políticos y amigos del poder
Durante su viaje a México, Alberto Fernández se esmeró en explicar lo realmente inexplicable, calificando de "payasada" las críticas por el vacunatorio vip (tanto el del Ministerio de Salud como el del Hospital Posadas, eso solo a nivel nacional). La intención de Fernández, como la de su jefe de gabinete Santiago Cafiero, fue de minimizar la crisis. Pero ya era inocultable el hecho de que una minoría privilegiada siempre se pone adelante en la fila, en detrimento de las mayorías.
Lo que Alberto Fernández criticó de los países centrales o más ricos con el acaparamiento de vacunas sin importarle a esos gobiernos la vida de los habitantes de los países dependientes y atrasados (como Argentina, que también se ve perjudicada por ese accionar de los Estados más poderosos), encierra la misma lógica del "vacunatorio vip" de la Argentina. De ahí su cinismo.
Te puede interesar: La OMS denuncia que países ricos boicotean el reparto global de vacunas
Te puede interesar: La OMS denuncia que países ricos boicotean el reparto global de vacunas
“ (...) ¿ hasta cuándo podemos seguir viendo eso sin reaccionar, sin alzar la voz, porque si no es este el momento de alzar la voz para cambiar, no va a haber otro momento", cita el diario de México, La Jornada, palabras del presidente argentino. Un relato que no se condice con la realidad de su Gobierno que no solo viene realizando ajustes al bolsillo del pueblo trabajador, sino que ahora salió a la luz cómo los privilegiados no son ni los niños y niñas (como cita siempre el peronismo), ni los más vulnerables (como decía durante todo el año pasado el Gobierno, mientras crecía la inflación, se permitían despidos -estando prohibidos por decreto- y se reprimía -en plena pandemia- a quienes peleaban por una vivienda).
Fernández agregó en su discurso en el senado mexicano que "no planteo ponerle fin al sistema capitalista, sino regresarle la ética y la moral. No es posible continuar, con el triste designio que padece Latinoamérica, donde la riqueza se concentra en pocos y la miseria se distribuye en millones”. Si se tiene en cuenta que la ética y la moral imperante son los de la clase dominante, y pudimos observar (y padecer) durante todo el año pasado de pandemia y en estos meses del 2021 cómo en el mundo, y por supuesto la clase capitalista en Argentina es parte de eso -incluidos sus partidos tradicionales-, no hay más moral que la de obtener ganancias y mantener sus privilegios.
Por eso los vacunatorios vip, que también se puede ver en Chile, Perú por ejemplo, no es una cuestión meramente de moral, sino que lleva el ADN de cómo funciona el capitalismo.
Te puede interesar: Vacunados vip: en Argentina, Chile y Perú pertenecer tiene sus privilegios