Reportaje. El estilo de Franco Faccilongo, un gerente dispuesto a confrontar a los trabajadores

Faccilongo en Ferrocarriles del Estado: despidió a cientos de trabajadores

Recordemos que en enero de 2008, este ingeniero asumió la gerencia de Ferrocarriles del Estado, una empresa en crisis. El mismo Faccilongo, en un artículo publicado por La Segunda, el 3 de marzo de 2014, señalaba que “la compañía estaba en la prensa y no precisamente en los términos en que está hoy. Había una serie de proyectos inconclusos -otros buenos también-, pero lo peor era el estado depresivo, la desazón y la desesperanza que había en la compañía. Por eso lo primero que hice fue decirles a los trabajadores que había que recuperar el orgullo de trabajar en esta empresa.”
Durante sus seis años de gestión, Faccilongo reveló que cuando hablaba de recuperar el orgullo, mentía, porque redujo la dotación de trabajadores de 2.000 a 1.350. Se enfrentó al sindicato y a huelgas.

Al concluir su periodo a la cabeza de Ferrocarriles, el 2014 –pues Faccilongo mantuvo su cargo durante el gobierno de Sebastián Piñera- hizo un balance positivo de su actuación. En el reportaje citado, señala que mientras el 2008 se cerró con una pérdida para la empresa de $36.000 millones, el 2013 se cerró con una de $18.000 millones. Como vemos, Faccilongo es un gerente que no duda en hacer pagar a los trabajadores los costos de una crisis en una empresa.

Faccilongo en Correos Chile: sus planes

Correos Chile es una empresa que el Estado no está potenciando. Según informa un reporte de la Dirección de Presupuestos (Dipres) sobre el desempeño de las empresas estatales del país, que se concentra en el período 2007-2013, la última vez que Correos Chile entregó recursos al Estado: US$ 9 millones, fue el 2009. Pero a su vez, durante esos siete años, según el mismo informe, Correos no habría recibido ningún tipo de aporte del Fisco.

Las transformaciones asociadas al desarrollo de las comunicaciones digitales (celulares, internet) han tenido efectos en la empresa postal estatal. La paquetería, que antes era marginal como actividad en Correos, ha ganado terreno. Hace 15 años el servicio postal y la paquetería aportaban el 90% y el 10% de los ingresos, respectivamente, pero ahora la relación es entre un 67% y un 33%. Faccilongo ha anunciado en diversos medios de prensa, que su aspiración es que el 2017 la paquetería aporte con el 50% de los ingresos. La paquetería está asociada a un nuevo mercado de compras individuales hechas en el extranjero por medio de un sistema de encomiendas. Con esto, Correos Chile busca competir en mejores condiciones con las postales privadas.

Desde la lógica gerencial, la huelga del 2013 significó una merma, pues se perdieron $9.000 millones. En 2014, ya mejoraron los índices. Según informa La Segunda en una nota del 20 de marzo, “los ingresos de la compañía llegaron a $ 81.000 millones, unos US$ 133 millones. Si se consideran los datos de la Dipres, los ingresos fueron un 7% más altos que en 2013, cuando anotaron $ 75.039 millones o del orden de US$ 151 millones.”

En el proceso de transformación de la empresa que se implica en el mayor peso de la paquetería, inevitablemente se producirán transformaciones. ¿Se otorgarán los implementos de trabajo necesarios? ¿Se mejorarán las remuneraciones? ¿Se contratará más personal, como anunciaba Faccilongo en enero para el estamento de carteros en un reportaje de El Mercurio? ¿Cuál es el plan de Faccilongo en Correos? Estos cambios significarán un aumento del trabajo, pero Faccilongo ya demostró en su pasado reciente en Ferrocarriles, que es experto en realizar los cambios siempre a costa de los trabajadores, despidiendo y explotando. ¿No es un preanuncio de sus planes lo que hizo en febrero, cuando desvinculó a operadores de la empresa?

La gran desigualdad en Correos

Como cualquier otro gerente, Franco Faccilongo es ajeno a los intereses de los trabajadores. Un dato disponible en www.correostransparente.cl, puede servir para demostrar esto: el dato nos señala que entre enero y abril de este año, Faccilongo ha recibido remuneraciones de $53.056.761 (bruto) o $ 36.356.632 líquidos, sumando a esto una asignación para el uso del vehículo institucional de $2.948.590 y para un seguro de vida y salud de $166.826. Un operador o un cartero ingresa ganando alrededor de $200.000 al mes. Se trata de una desigualdad evidente.

En el 2016 se realizará una nueva negociación colectiva en la empresa. ¿Qué dirán los postales acerca de esta enorme desigualdad y del porvenir de Correos? La huelga de 2013 es una experiencia reciente y los trabajadores están sacando lecciones.