El TSJC deja a Artur Mas a un paso del juicio. El tribunal sentencia que no acató la orden del TC de suspender el 9N, publicada el 4 de noviembre de 2014.
Martes 28 de junio de 2016
Joan Manel Abril, el magistrado del Tribunal Superior de Justicia de Catalunya que estaba investigando al expresident de Catalunya Artur Mas y a las exconselleres Joana Ortega e Irene Rigau en relación al 9N, ha dado por concluida la causa dejando al expresident a un paso de ir a juicio.
El juez del TSJC decidió investigar a los tres miembros del anterior Govern por los actos ocurridos entre el 4 de noviembre y la celebración de la consulta el 9N.
Abril ha considerado que ambos conocían la decisión de suspensión de la consulta desde el 4 de noviembre, fecha en que se emitió la orden por parte del Tribunal Constitucional. Así como también refleja en el auto que recibieron la comunicación del mismo TC y por parte de la Delegada del Gobierno en Catalunya.
Tanto Artur Mas como las dos excoselleres Rigau y Ortega, declararon ante Abril en octubre de 2015 que el desarrollo de la jornada del 9N fue llevado a cabo por voluntarios y no por la Generalitat. Y en otro sentido, los tres investigados señalaron también que la orden de suspensión del TC no había sido notificada de forma fehaciente.
Pese a las declaraciones, el magistrado del TSJC señala que la consulta tuvo implicación institucional por parte de los miembros de la Generalitat y que estos no acataron la orden de suspensión ya que continuaron con los preparativos de la jornada y con los contratos con empresas privadas para dar soporte informático, adecuar un centro de prensa para informar de los resultados y la fabricación de urnas y papeletas para la votación.
Una vez concluida la causa, Abril ha decidido trasladar el caso a las partes que soliciten la apertura del juicio. En su momento, la fiscalía imputaba a Mas, Rigau y Ortega de un delito de prevaricación, desobediencia, malversación de fondos públicos y usurpación de funciones judiciales. Por su parte, el sindicato Manos Límpias también presentó una querella, por lo que todo parece indicar que todas estas acusaciones seguirán adelante.
Por otra parte, el exconseller de Presidència Francesc Homs, también está siendo investigado, en este caso por el Tribunal Supremo -TS-. La Fiscalía sustenta la acusación en que Homs mandó una carta a la empresa de telecomunicaciones T-Systems, para que siguieran adelante con la puesta a punto de los ordenadores que se utilizarían en los colegios electorales tras la suspensión.
El juicio que está por venir, representará sin duda un nuevo paso en la lucha sin cuartel que vienen llevando el PP, el PSOE y C’s junto a las principales instituciones del Estado español, no contra la figura del que fuera president de Catalunya, sino contra las aspiraciones y reivindicaciones democráticas de cientos de miles de catalanes.
Sin ir más lejos, un buen ejemplo de todo ello es el escándalo de las grabaciones en las que el Ministro de Interior en funciones Jorge Fernández Díaz y el Jefe de la Oficina Antifraude de Catalunya conspiraban para acusar de prevaricación a dirigentes de CDC y ERC durante las semanas previas a la consulta del 9N.
