En el marco del festival que este sábado 21 de diciembre se realiza en el Complejo Art Media, conversamos con Francisco Bochatón de Peligrosos Gorriones, los Katarro Vandáliko y con 2 Minutos.
Augusto Dorado @AugustoDorado
Viernes 20 de diciembre de 2024 20:08
El Indio y el Mosca en charla con diversos medios de prensa en el Complejo Art Media.
La nueva edición del ya clásico Festival TokadaK tiene un lector motiv muy particular: será la celebración ppr los 30 años de Valentín Alsina, el disco debut de 2 Minutos que se transformó en uno de los más importantes de la historia del rock argentino. Pero los de Alsina no estarán solos porque el festival contiene un line up impresionante: desde Juana La Loca, Peligrosos Gorriones y Loquero pasando por Carmina Burana, Mal Pasar y los Katarro Vandáliko. Un evento impresionante con mucho de lo mejor de la escena rockera en un mismo lugar, el espectacular Complejo Art Media de Av Corrientes 6271 de Chacarita (CABA) con entradas anticipadas sistema Passline.
En una ronda con la prensa especializada, La Izquierda Diario tuvo el placer de entrevistar al Mosca y al Indio de 2 Minutos, a Francisco Bochatón de Peligrosos Gorriones y a los Katarro Vandáliko Matt Buzz (vocalista) y Juan Sebastián Papponetti (guitarrista).
2 Minutos: pibes de barrio
La charla con Indio y Mosca primero giró en torno a las influencias musicales de sus inicios. El cantante nos contaba que llegaron al punk “por la famosa trinidad de Sex Pistols, The Clash y Ramones, pero a los costados de eso también descubrimos bandas como Last Resort, Cocksparrer, Cockney Rejects... O el hardcore inglés como Exploited, G.B.H. o Discharge, bandas yanquis como Misfits o Dag Nasty... Te podría nombrar 850 bandas que nos inspiraron”. Consultados sobre cómo es que siguen siendo “pibes de barrio” a pesar del reconocimiento y el éxito masivo, Mosca plantea que “Es algo natural, siempre estuve cómodo en mi barrio. Salvo cuando nací en un hospital de Capital, una vez que me subieron a un taxi me llevaron para Alsina donde he vivido cada uno de mis 57 años. nunca nos pintó la película de ‘estrella de rock’. Estoy muy bien en mi barrio.”
¿Qué es hoy el punk para ustedes?
M - El punk es la gente que resiste. Un jubilado me parece re punk, el trabajador al que no le suben el sueldo pero tiene que ir igual…
I - Siempre evoluciona, va cambiando un poco pero sigue la esencia, va cambiando como la vida misma, ¿no? Siempre evoluciona, muta. Vos fijate que cada vez que hay alguien, algún artista que “se pone loco”, que protesta, le dicen “Se hizo punk”...
M - El punk es un estilo al que le costó entrar al “establishment” de la música, pero es un estilo que tiró el ancla y quedó. Nunca se va a ir…
¿Qué cosas les gustan de lo nuevo en el punk?
I - Nuevo, no hay… Es decir, hay nuevo, pero todavía siguen las bandas un poco más viejas, con unos 10 años de trayectoria, son las que ahora influyen mucho como nosotros en su momento.
M - Una banda antifascista que me gusta mucho se llama Oi Polloi..
I - Por ahí escucho lo último de Cockney Rejects donde está tocando Olga (miembro fundador de Toy Dolls, NdeR), me sorprende ver a Olga tocando ahí… Después, en otros sonidos reconozco que el punk de alguna manera está. Hay gente que hace trap pero con actitud punk.
M - También me gusta mucho un dúo que se llama Sleaford Mods, no es que suenen punk, es más bien la actitud…
I - Ah, y no quiero olvidarme de las Pussy Riot...
Van a festejar los 30 años de Valentín Alsina, un disco que suena muy vigente…
M - Lamentablemente pasaron tantos años y pocas cosas cambiaron, “Novedades” es un tema vigente. Valentín Alsina es un disco atemporal.
I - Yo no puedo creer que a los jubilados les saquen los medicamentos, no puede ser…
El último trabajo que editaron es La Máquina de Hacer Cagadas donde participan un montón de figuras invitadas muy importantes ¿Cómo se sienten con este disco?
M - Invitamos a amigos, amigas, amigotes, y estuvo muy divertido. Es un disco de “auto covers de 2 Minutos invitando a artistas amigos. Salió en vinilo, en CD y tiene un par de videos dando vueltas, estamos muy contentos.
¿Qué planes hay para 2025?
M - Queremos sacar canciones nuevas de 2 minutos, tal vez sacar un disco o un EP. Veremos, somos una banda que tocamos mucho y no descansamos, la verdad no tenemos tiempo… La idea principal es tocar, pero vamos a tratar de sacar un disco nuevo.
Francisco Bochatón: “Malvinas fue un factor fuerte en el rock argentino”
“Lo que me gusta del Festival TokadaK es que muestra más de lo que pasa en la escena. Es muy popular, accesible y tiene a los mejores grupos”, dispara el fundador y vocalista de Peligrosos Gorriones. “Demuestra que se puede hacer un mix de todos nosotros”, nos dice pero a la vez eleva una queja atendible: “Me molesta ese pensamiento mediocre que cataloga las cosas entre ‘nuevas’ o ‘ antiguas’. Peligrosos Gorriones es un grupo actual, tenemos miles de temas nuevos. Pero en Argentina, excepto los Beatles o los Rolling Stones, pareciera que somos todos ‘viejos’ ¿no?”, concluye entre risas. “Charly García ¿Es de los 70? ¿De los 80? ¿De dónde es? ¿Y Bowie? Me resulta muy infértil otorgarle a las cosas una época. Esto es real, es atemporal, existe”, sentencia.
LID - ¿Qué te incentivó a dedicarte a la música?
FB - Empecé a estudiar guitarra con un profesor de la iglesia del barrio de La Plata donde nací… Tengo 52 años, viví la guerra de Malvinas siendo chico. Yo creo que Malvinas fue un factor fuerte en el rock argentino ¡Una guerra! La música fue muy influenciada por la guerra de Malvinas, yo quedé muy impactado. Es una fuerza muy extraña que haya ocurrido una guerra en un país latinoamericano cuando vos tenés 10 años… Yendo a otras influencias que tuve, mi hermano Juan Pablo -que falleció- me influenció mucho en la manera de componer. Yo compuse los primeros temas de Gorriones, que fueron “Trampa”, “Ardiente beso”, “Cachavacha”, “Escafandra”, y en ese momento mi hermano fue una gran inspiración porque yo me escondía para escucharlo ensayar. Él escuchaba The Wolfgang Press y yo me crié con la música electrónica.
Volviendo a lo que planteabas de esa necesidad de catalogar a la música en épocas, tal vez eso es un criterio del mainstream ¿no?
Pero el mainstream de alguna manera también somos nosotros, lo que vos escuchás en tu casa. Nunca puede ser mainstream lo que está pasando en las radios porque yo sé perfectamente que está pautado. Siempre existió eso de que se paga lo que se pasa en la radio… Lo que pasa que nosotros nacimos en una maquinaria que realmente responde a que “lo que está ocurriendo es lo que está bien”: es un peligro, chicos ¡Pensemos por nuestra cuenta, por favor! ¡Elegí la música que te gusta! A mí me importa llegarle a personas verdaderas ¿De qué me serviría llenar un River? A eso me llevaría otra cosa que no es lo que estoy haciendo yo… Soy conciente de que pago el precio de hacer lo que me gusta y descartar lo que no me gusta.
Lo bueno es que van dejando algo en el público más allá del nivel de masividad… En mi caso, por bandas como Peligrosos Gorriones llegué a otras como Pixies...
¡Y eso que casi no les afané nada! (risas) Bah, salvo en “Siempre acampa”, jajaj…
Desde los años 2000 que se habla más claramente de una escena de La Plata ¿Sentís que ustedes le abrieron camino a bandas como Él Mató?
El puntapié inicial en realidad es de Virus, porque Redondos no es de La Plata… Sí Skay es de La Plata, pero creo que los demás no, aunque se formaron en La Plata… Aunque no puedo negar que nosotros heredamos un montón de los Redondos: nos hicimos medio compañeros con algunos de ellos, éramos “los chicos que andábamos con las sobrinas de ellos” ¿viste? Éramos muy queridos por el Mono Fenton, por Skay… Y Virus fue gran influencia, me encanta Recrudece... Algún día me gustaría hacer una versión de “El 146”. Tengo en mente un disco de versiones de Peligrosos Gorriones ¡mirá la primicia que te estoy tirando! Y sí, a su vez creo que nosotros en algo influenciamos: una vez toqué con Santi Motorizado y me contó que se le dio por cantar y tocar el bajo porque nos vio a nosotros…
¿Cómo es este presente de Peligrosos Gorriones?
Ahora somos un trío con Braulio Aguirre en batería, de Los 7 delfines ¡Y me encanta! Todavía no vamos a grabar hasta el año que viene, primero estamos enfocados en el festival TokadaK. Es un grupo muy movedizo Gorriones, ni siquiera toca la misma versión de show en el que sigue…
Katarro Vandáliko: del under de Tandil a la primera división del punk argentino
“Tocamos con Stiff Little Fingers, con Buzzcocks la segunda vez que vinieron a Cemento, con The Boys, yo particularmente hice giras con Honest John Plain, con Duncan Reid, con TV Smith de The Adverts, todo un honor para nosotros”, expone con humildad Juan Sebastián Papponetti ante la consulta sobre la importante trayectoria de Katarro Vandáliko y el reconocimiento que lograron por parte de grandes figuras internacionales que fueron pioneros del género punk. Es que se trata de artistas que prácticamente crearon este género a la par de los más conocidos (Clash-Pistols-Ramones) y esas influencias están muy presentes en la banda oriunda de Tandil que está cerca de cumplir ya 34 años de carrera.
“Nuestro primer disco, Buenos Muchachos, lo había producido Mariano Martínez de Attaque y había andado muy bien… Por eso para el segundo nos permitieron elegir productor: pedimos a Tony Barber que en ese tiempo era el bajista y productor de Buzzcocks, pero tuvo otros compromisos incluyendo una mini gira de Buzzcocks junto a Pearl Jam, nada menos… Y bueno, cambiamos a Honest John Plain que fundó The Boys pero que en esos años había sacado un disco propio, Honest John Plain & friends, que a nosotros nos tenía enloquecidos, nos encantaba… Y así fue que nos produjo y quedó una gran amistad. De hecho, para el segundo disco de Honest John Plain & friends -que se grabó enteramente en un estudio de Flores- en el tema que toca junto a Pappo, está nuestro baterista y Matt hace coros y canta unos versos en castellano”, señala destacando en ese bellisimo tema que es “Funny old game” el papel del cantante de Katarro Matt Buzz. Del under de Tandil a codearse con Pappo y los próceres del punk, esa es la talla de Katarro Vandáliko.
“Cuando nosotros arrancamos en el 91, la única forma que teníamos de poder saber cómo estaba la escena y qué bandas había era viajando desde Tandil, así que básicamente nos veníamos todos los fines de semana a ver bandas y comprar discos”, explica Matt. “Después de un show nos quedábamos toda la mañana sin dormir esperando a tomar el 132 para poder ir al Parque Rivadavia a gastarnos todo lo que pudiéramos”, complementa Juan. “En esa época el Parque Rivadavia era el Spotify analógico y material”, sentencia Matt ante las risas que festejan la ocurrencia.
LID - ¿Cuando ustedes arrancaron ya existía alguna escena rockera en Tandil?
JP - Justamente, cuando volvíamos de esos viajes de fin de semana a la Capital caiamos a Tandil con CD y casetes, y esos cassettes tenían 50 “hijos” (risas)... Íbamos haciendo copias y logramos armar en Tandil una movida increíble. Te diría que inventamos un movimiento que no existía. Cuando nosotros arrancamos no había rock under, no había bandas que hicieran temas propios. Yo con 13 o 14 años iba a recitales donde tocaba gente grande y hacia temas de Pappo, algún blues… Era lo que había. Así fue que con él nos dijimos “Algo hay que hacer, algo hay que inventar”... Y así armamos la banda.
MB - También pasó que cuando salió el disco Invasión 88 nos prendió fuego la cabeza. No podíamos creer que en Argentina hubiera bandas que sonaran así. Después allá llegaron discos que se iban editando acá como Castigando a un caballo muerto de los Sex Pistols, una edición de EMI en castellano… Allá por el 88. No teníamos guita para el vinilo, todo era copia en cassettes TDK.
JP - Claro, después también estaba The Story of The Clash que eran dos cassettes, el Sueños Agradables de Ramones que tenía temas como “Don’t go” o “She’s a sensation” que sonaban en los boliches, en las discotecas de allá… Y ya al poquito tiempo estábamos escuchando Undertones, Sham 69...
Creo que la escena punk argentina es más “ramonera” pero ustedes agarraron para el lado del punk británico…
JP - Y lo pagamos caro en un sentido… Tal vez no alcanzamos un grado de gran masividad, pero por otro lado hicimos lo que quisimos, lo que nos gusta, y estamos por cumplir 34 años en abril ¡no vamos a cambiar ahora! Eso es algo que mucha gente nos reconoce, no somos una banda masiva pero acá estamos.
MB - Es que nuestro sonido va por otro lado. En discos como Té de estilo hay influencias de Morrissey, de Buzzcocks, de Echo and The Bunnymen... El hecho de que uno hace 34 años que hace punk rock no implica que no escuche otros artistas… Yo por ejemplo soy muy fanático de Ian McCulloch y de los hermanos Reid de The Jesús and the Mary Chain. Le comentaba a Sergio Rotman hace poco que para mí ellos “inventaron” el indie antes que los Gallagher; Romano me decía que para él primero fue Verlaine de Television...
JB - Es que en la música uno va descubriendo cosas cada vez más atrás… Un amigo me decía que vamos a terminar escuchando a un negro golpeando unas piedras yendo tan para atrás (risas)... Pero es así…
Y por otro lado, hoy lo masivo pasa por otro lugar…
JB - Es la realidad, los tiempos cambian, el estilo urbano se adueñó de la calle. Es el punk de hoy como forma de expresión, nos guste o no. Nosotros lo bancamos totalmente: si es lo que eligen los chicos, si es lo que surge espontáneamente, bienvenido sea. No puedo pretender que toda la vida se toque lo mismo…
MB - Yo acompaño a mi hijo a ver a esos artistas, es lo que le gusta. No nos podemos poner en juzgar a nadie porque sino nos convertimos en los viejos de mierda que antes nos la bajaban a nosotros cuando arrancamos con la música...
¿Qué planes tienen para 2025?
JP - Se viene un disco nuevo, ese es el plan principal. Las canciones surgieron de manera bastante espontánea y sentimos que hay un sonido que ya está en nosotros, incluso también en las letras siento que abordamos otras cosas. Yo estoy particularmente contento con eso.
¿Y cómo se preparan para este TokadaK?
JP - Muy agradecidos y contentos de estar en este festival que es un crisol de estilos. Y esta buenísimo que en estos festivales vienen familias con pibes chicos que capaz tienen la posibilidad de escucharnos a nosotros aunque sea “de rebote”. Eso nos encanta.
