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Red Internacional
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NUEVO AEROPUERTO DE LA CIUDAD DE MÉXICO. El futuro de la Cuenca de México a debate

En el foro expusieron expertos en materia ambiental, social y técnica con el fin de dar a conocer los costos en cada sector de la construcción del NAICM, además de darle voz a representantes de los pueblos originarios que están siendo afectados.

Axomalli Villanueva

Axomalli Villanueva @1quiahuitl

Miércoles 19 de septiembre de 2018

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La mañana del martes, se llevó a cabo el foro “El futuro de la cuenca de México a debate: Implicaciones técnicas, ambientales, sociales y culturales del NAIM", en el Museo de las Culturas del Mundo, con la presencia de expertos en temas sociales, ambientales y técnicos, con el motivo de exponer y denunciar las implicaciones de las obras y la construcción del Nuevo Aeropuerto de la Ciudad de México.

Entre otras cosas los expertos denunciaron irregularidades, falta de transparencia, violaciones a derechos humanos y riesgos ambientales hacen inviable al proyecto de la construcción NAICM. Además el foro tuvo la presencia de María Trinidad Ramírez del Frente de Pueblos en Defensa de la Tierra (FPDT), quien denunció al Estado mexicano por construir una obra que solo beneficia a los más ricos.

“Hemos vivido las imposiciones de las dependencias del Gobierno —Conagua, SCT, Semarnat, entre otras— de Enrique Peña Nieto y del grupo aeroportuario […]. Es mentira que ellos van a perder dinero. Pero no quieren dejar de ganar dinero” mencionó en su intervención.

En materia ambiental, la doctora Bertha Patricia Escalante Pliego del Instituto de Biología de la UNAM, el ex Lago de Texcoco no es un buen sitio para el NAIM debido a la desecación de los humedales en la zona en donde se desarrollan las obras.

Según la investigadora, hay casos emblemáticos como el del Lago Nabor Carrillo, un hábitat para diversos tipos de aves acuáticas migratorias que será transformado en una laguna de regulación de aguas negras (lo que imposibilita que sea apto para la vida silvestre).

Además señalan que para llevar material pétreo y agua al proyecto, así como el impacto en los últimos cuerpos de agua de la región lacustre mexiquense, cuyas afectaciones significarán “la total eliminación de 14 mil 500 hectáreas de lo que fue el gran sistema de los lagos de Zumpango, Xaltocan, Texcoco, Xochimilco y Chalco”, refiere una misiva del contingente de los Pueblos Unidos Contra el Nuevo Aeropuerto.

La doctora María Julieta Lamberti del Project on Organizing, Development, Education and Research (PODER), alertó sobre el manejo de este proyecto en el cual "existe un patrón de comportamiento poco transparente” porque su administración, a cargo del Grupo Aeroportuario de la Ciudad de México (GACM), y las formas en las que opera este están llenas de procesos que facilitan situaciones de conflicto de interés y de corrupción a lo largo de toda la cadena de suministro.

Según los datos de PODER, sólo 30 de 292 contratos revisados fueron otorgados por medio de un concurso público. El resto fue por adjudicación directa e invitación restringida. Entre las irregularidades ejemplares que PODER detectó en esta puerta giratoria está la contratación por parte del GACM de “amigos de la élite priista de hoy”, como Aurelio Marín Huazo, priista con más de 30 años de militancia contratado como “asesor especializado en gestión social”.

El FPDT denuncia que en la actualidad (así como en 2001, 2006 y 2014), los pobladores siguen siendo reprimidos por las autoridades, que despojan a la gente de sus tierras y hogares, e incurren en actos de violencia como la tortura sexual y la intimidación. Ante esto los pobladores exigen una consulta basada “en la decisión de los pueblos desde los pueblos y no de las instituciones corruptas que no nos representan”.

Junto a esto aclaran que la lucha, que pugna además por el respeto al derecho a la tierra, al agua y a la identidad, continuará denunciando al “extractivismo indiscriminado” en la región oriente de la Cuenca del Valle de México.

Bajo las consignas de: “¡Zapata vive! ¡La lucha sigue!”, “¡Atenco vive y vive! ¡La lucha sigue y sigue!”, los ejidatarios alzaron sus puños y aseguraron que la lucha no se acabará mientras siga habiendo una razón para seguir: su derecho a una vida digna.