Insólito la contratación de la asesoría comunicacional por parte del gobierno que se da en pleno desarrollo de denuncias por falta de insumos básicos para personal y pacientes junto con despidos de funcionarios de la salud, como, por ejemplo, los 200 despidos del Hospital Clínico de la Universidad de Chile.
Jueves 2 de abril de 2020
Este 25 de marzo, la Subsecretaría de Salud Pública, presidida por Paula Daza, contrató los servicios de una agencia de publicidad para la creación de una campaña comunicacional sobre el coronavirus, la cual costó más de 400 millones de pesos.
El gobierno no escatima en gastos en campañas, pero se niega a la utilización de los recursos estatales para garantizar los instrumentos y equipos básicos para abordar la crisis del coronavirus en Chile.
El detalle de la orden de compra N° 757-357-SE20, señala textualmente que el Ministerio de Salud “autoriza trato directo (para) asesoría creativa de campaña comunicacional coronavirus covid-19 y medidas de prevención e identificación de síntomas”.
Ante el desamparo de los materiales básicos de protección para los funcionarios de la salud y los pacientes esta contratación genera indignación en millones, más aún cuando vemos que los días anteriores fueron desvinculados del hospital clínico de la Universidad de Chile, más de 200 profesionales de la salud.
Te puede interesar: Para no creerlo: Hospital Clínico de la Chile despide a 200 profesionales en medio de pandemia
Te puede interesar: Para no creerlo: Hospital Clínico de la Chile despide a 200 profesionales en medio de pandemia
Si es que lo pensamos bien esta cantidad de dinero podría servir para comprar más de 14.800 mascarillas para los y las profesionales de la salud de la máxima tecnología, se podría acceder a la compra de 10 ventiladores mecánicos y cerca de 200 camas clínicas.
En Chile, según la subsecretaria Paula Daza, hay 850 ventiladores, 75 de ellos están ocupados por pacientes contagiados con coronavirus y 750 en uso. O sea, está superada la capacidad para enfermos de coronavirus y más aún para pacientes con otras enfermedades. ¡Ya hay hospitales como el de Temuco que no tienen! Nos dejarán morir en la decadencia de la salud pública que han destruido mientras siguen asegurando las ganancias de clínicas, isapres y compañías de seguro.
El tratamiento del virus en manos de Piñera, Mañalich y la Subsecretaria de salud es un peligro para quienes somos los millones que nos atendemos y asistimos a los hospitales públicos.
Ellos son los responsables de la crisis de la salud en Chile que hoy se cae a pedazos, y que durante 30 años perpetuaron desde la Concertacion hasta la Derecha, donde los trabajadores y pobres somos quienes lo padecemos, no los ricos, ni la policía, ni los militares que con su sistema de salud privado en sus clínicas, pueden garantizar si gustan hasta 20 vidas mas.
Joseffe Cáceres
Trabajadora UMCE y vocera de Pan y Rosas Chile