El gobierno del PSOE y Unidas Podemos anuncia que no solo no cerrará los Centros de Internamiento de Extranjeros (CIEs) sino que construirá más. A corto plazo se planea destinar más de 21 millones de euros a la construcción de un nuevo CIE en Algeciras, así como construir nuevos centros en Madrid y Málaga. Más allá de gestos simbólicos Podemos y PCE son parte de esta política racista.
Viernes 6 de noviembre de 2020
El gobierno de coalición no sólo no se plantea discutir sobre la violación de los Derechos Humanos que suponen estos centros, sino que afirma que los CIE son “necesarios” ya que suponen el único medio para “garantizar y materializar” la no acogida de los inmigrantes y solicitantes de asilo. Así lo contempla el Proyecto de Ley de Presupuestos Generales del Estado 2021 tal y como ha aclarado el Secretario de Estado de Seguridad, Rafael Pérez-Ruiz, durante su intervención en la Cámara baja. Pérez-Ruiz ha afirmado que los CIE “no agradan a nadie” pero que a pesar de esto “no hay partida para la desaparición de los CIEs, es más, hay una partida para la construcción de un nuevo CIE en Algeciras”. Asimismo, se planea construir nuevos centros en Madrid y Málaga.
Los CIEs son instalaciones policiales calificadas de carácter “no penitenciario” diseñadas para concentrar en ellas a los inmigrantes sin papeles como paso previo a su expulsión del Estado español. Gran parte de los CIEs se encuentran ubicados, de hecho, en antiguas prisiones. Interior los emplea para retener durante meses y contra su voluntad a inmigrantes en “situación irregular” y a solicitantes de asilo, a la espera de que se dicte una orden de expulsión en su contra, y, si esto sucede, a la espera de que esta orden se ejecute. No tienen por qué haber cometido ningún delito, solo son personas sin papeles.
Los CIEs, en los hechos, funcionan como auténticas cárceles de extranjeros, y son famosos y temidos por su falta de transparencia y por las malas condiciones en que se trata a los internos. Durante los primeros días de la pandemia se demostró que estos centros no cumplen el derecho a la protección de la salud, una situación insostenible que llegó a provocar motines como el del CIE de Aluche. Numerosas personas inmigrantes y asociaciones destacan el racismo de Estado que emana de estos sitios, señalando no sólo la privación de libertad, sino el trato degradante y la situación inhumana con que las personas migrantes son tratadas. La situación de los internos suele ser tan crítica que organizaciones como la Plataforma CIEs No Madrid destacan como un grave problema entre los internos los intentos de suicido.
El propio PSOE contemplaba en su programa electoral del 28 abril de 2019 “una ordenación de las políticas migratorias conforme a los principios y exigencias del Estado democrático de Derecho, el respeto a la dignidad de todo ser humanos y la garantía de los derechos humanos como prioridad de toda política pública, también de inmigración”, en su página 194 prometía “modificar el actual modelo de Centro de Internamiento de Extranjeros (CIE)”. También Unidas Podemos recogía en su programa electoral que “ningún modelo de privación de la libertad de las personas según su situación administrativa es adecuado para la recepción y acogida de personas migrantes”, expresando que la existencia de los CIEs “es una excepción jurídica y democrática” que debe desaparecer. Sin embargo, ni unos ni otros han cumplido con su programa.
Con el decreto del estado de alarma en marzo pasado, el Gobierno decidió vaciar los CIEs por ser instalaciones policiales que no garantizaban la salud y seguridad de los internos. Si éstos se terminaron de vaciar el 6 de mayo, el autodenominado “gobierno más progresista de la historia” acabó por ordenar su reapertura el pasado 23 de septiembre. Además de esto, en los nuevos presupuestos PSOE y UP perseveran en la escalada represiva como única forma de política migratoria. La alternativa progresista demuestra, una vez más, que no es una alternativa para los inmigrantes sin papeles y los solicitantes de asilo.
Mientras Unidas Podemos se opone en redes sociales a la existencia de los CIEs, en los hechos da todo su apoyo a sus socios de gobierno. Hay que destacar que Podemos y el PCE no sólo son cómplices, sino partícipes de esta política criminal. Sin embargo, las personas internas en los CIEs y las distintas asociaciones y ONGs, como la Plataforma CIEs No Madrid, no renuncian a su lucha a cambio de palabras. Junto a ellos exigimos el cierre inmediato de todos los CIEs del Estado y la regularización inmediata y permanente de todas las personas migrantes que residen en territorio español. La lucha es el único camino, sólo a través de ella será derrotada la política criminal del Estado imperialista y racista.