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Red Internacional
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Violaciones a Derechos Humanos. El hipócrita mea culpa del Ejército por violaciones a DDHH en dictadura

Recientemente el Ejército de Chile publicó un informe "reflexivo" sobre su rol en los últimos 50 años repudiando las violaciones a los Derechos Humanos de las que fue parte así como los casos de fraude al fisco como actos que "agravian el ethos militar", una reflexión hipócrita sin ninguna medida concreta contra todos los militares que no han sido procesados por estos hechos ni contra los pactos de silencio que todavía perduran ademas de mantener el silencio sobre su rol en la represión de la rebelión popular de 2019.

Álvaro Pérez Jorquera

Álvaro Pérez Jorquera Profesor de Historia y Geografía, historiador y músico

Sábado 5 de marzo de 2022

El Ejército de Chile emitió este lunes un informe denominado "Reflexión sobre las actuaciones del Ejército en los últimos 50 años" donde hace un repudio a los hechos de violaciones a los Derechos Humanos en los que participó la institución, tales como La Caravana de la Muerte, los asesinatos de los generales Schneider y Prats, la ejecución de Tucapel Jiménez y las detenciones, torturas, ejecuciones y desapariciones de cientos de civiles, que según el texto dejaron "una profunda herida en la institución".

A esto se suma el rechazo a los casos de fraude al Fisco en el que están implicadas las altas jerarquías como el renunciado general Ricardo Martínez, lo cual habría sido "un fuerte golpe a la probidad y al ethos militar de la institución".

Un hipócrita mea culpa.

En el marco del debate y cuestionamiento del rol de las Fuerzas Armadas y de Seguridad, donde el propio Boric ha planteado la necesidad de una reforma, no deja de ser un acto hipócrita en tanto no pasa más allá de lamentar el impacto sobre la institución y, muy a la pasada, a la vida de los afectados y sus cercanos y por no estar secundada por ninguna medida siquiera de reparación, como puede ser el juicio y castigo de todos los implicados que aún no han sido procesados o el fin de los pactos de silencio que siguen entorpeciendo procesos judiciales así como la búsqueda de los cuerpos de miles de desaparecidos, una herida mucha más profunda para las familias que la imagen de una institución profundamente reaccionaria.

La hipocresía además se ve remarcada por el hecho de que al mismo tiempo que se lamenta por los viejos actos de represión de los que fue parte, se mantiene el silencio frente a los ocurridos en la actualidad, como fue el rol jugado en la represión durante la rebelión popular del 2019 y la actual militarización del territorio mapuche, donde borran con el codo todo lo escrito en el informe "reflexivo".

Una institución profundamente reaccionaria.

La historia del Ejército de Chile es una que al contrario del viejo mito de una Fuerzas Armadas no deliberantes y respetuosas de la democracia, esta llena de intervenciones, golpes militares y matanzas contra sectores populares, como lo fue la guerra civil que llevó a la imposición del conservador régimen portaliano de 1830, el llamado Ruido de Sables y la posterior dictadura de Carlos Ibáñez del Campo entre 1924 y 1931, por nombrar algunas que precedieron al golpe militar de 1973, así como la matanza obrera de la escuela Santa María de Iquique en 1907, la matanza de la comuna de Puerto Natales en 1919, la de San Gregorio en 1920, La Coruña en 1925 y la población José María Caro en 1962, que son algunos ejemplos que muestran una política sistemática de represión contra los trabajadores y los sectores populares más de un siglo antes de la dictadura militar.

Por lo mismo no sorprende la hipocresía del lamento del Ejército, así como tampoco que no sea capaz de ver que los mismos actos que realizó durante la dictadura y que hoy repudia, los mantiene en la actualidad, pues como hemos visto es algo que está en el ADN, en el origen mismo de la Institución, y es una política estructural por el rol que ha jugado en la historia de Chile, y que la única forma de erradicar es con la total disolución de las Fuerzas Armadas y sus sustitución por la organización armada de los trabajadores y los sectores populares.