Publicamos a continuación un extenso artículo de análisis escrito por Jeremy Scahill para el sitio The Intercept que puede ser de interés para nuestras y nuestros lectores.
Jueves 23 de noviembre de 2023 12:10
Mientras el número de muertos en Gaza supera los 13.000 palestinos, entre ellos más de 5.500 niños, la maquinaria de propaganda de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) ha tratado de utilizar el Hospital Al-Shifa como su principal exhibición para justificar lo injustificable. Está claro que la estrategia israelí se centra en la creencia de que si las FDI pueden convencer al mundo de que Hamás utilizó el hospital como base de operaciones militares, todos los bombardeos masivos (los ataques a campos de refugiados, escuelas y hospitales) retroactivamente desaparecerán y se considerarán simplemente como actos de guerra contra un enemigo terrorista.
Tanto Israel como la Casa Blanca, incluido personalmente el presidente Joe Biden, han apostado su credibilidad por la afirmación de que hay una enorme prueba humeante debajo del Hospital Al-Shifa. Estados Unidos dijo públicamente que no dependía exclusivamente de Israel para respaldar sus propias afirmaciones. Dejando de lado el hecho de que tanto Estados Unidos como Israel tienen un historial tan largo como el de la Franja de Gaza de mentir sobre los presuntos crímenes de sus adversarios, la pregunta clave no es si existen un túnel o habitaciones bajo Al-Shifa, sino si estaban siendo utilizado con un claro propósito militar o de combate por Hamás, como han alegado Estados Unidos e Israel.
Desde las incursiones del 7 de octubre dirigidas por Hamas en Israel que resultaron en la muerte de más de 845 civiles israelíes, junto con unos 350 soldados y policías, y en las que más de 240 personas fueron tomadas como rehenes, las FDI han centrado intensamente su atención en las operaciones clandestinas de Hamas y su infraestructura. La acusación de Israel de que el cuartel general principal de Hamas estaba ubicado dentro o debajo del extenso complejo del Hospital Al-Shifa no es nueva. Pero el celoso enfoque en él es una indicación de que Israel quiere convertirlo en el tema central de su caso para hacer frente a los críticos de su campaña indiscriminada de muerte y destrucción de civiles en Gaza. Israel ha tratado de hacer de Al-Shifa una prueba de Rorschach en su guerra narrativa, e Israel ha acusado a periodistas, las Naciones Unidas, médicos y enfermeras de ser parte de la conspiración para ocultar a la opinión pública mundial el uso del hospital por parte de Hamás como centro de mando militar.
Hasta la fecha, esta campaña de propaganda no ha ido bien.
Después de afirmar inicialmente que el Hospital Al-Shifa era efectivamente el Pentágono de Hamás (una narrativa reforzada públicamente por la administración Biden), las FDI publicaron su primera ronda de supuestas pruebas, que más o menos consistían en un puñado de rifles automáticos, algunos de ellos ubicados detrás de una máquina de resonancia magnética. y un chaleco de combate convenientemente colocado con el logotipo de Hamás. Con la excepción de los partidarios más acérrimos de Israel, este esfuerzo no pareció convencer a casi nadie de las amplias afirmaciones sobre la importancia de Al-Shifa para las actuales operaciones de Hamás. Después de todo, las FDI ya habían mostrado al público un elegante modelo de vídeo en 3D que pretendía ser una representación de una avanzada guarida subterránea de mando y control utilizada por Hamás. Así que el primer intento de Israel de vender el caso fracasó.
The IDF posted a few videos of their tour through the hospital. No tunnels, command centers, etc. to be found in any of these clips or pictures. Instead, focus is on "grab bags" of some guns and body armor scattered around, and a laptop next to CD-Rs.https://t.co/nSYuOmP1Nk
— Aric Toler (@AricToler) November 15, 2023
Varios otros esfuerzos para producir videos de lo que Israel afirmó que era evidencia de una importante base de Hamas en hospitales han sido recibidos con burla y escepticismo generalizados, incluso por parte de medios de comunicación occidentales que históricamente informan como un hecho las afirmaciones militares israelíes sobre sus operaciones contra los palestinos. Los videos de las FDI han sido objeto de burlas en las redes sociales y se han comparado con el muy publicitado (y completamente desastroso) especial televisado a nivel nacional en vivo de 1986 de Geraldo Rivera que prometía revelar los secretos escondidos en la bóveda subterránea de Al Capone.
El personal de Al-Shifa, así como un médico europeo que trabajó allí durante años, niegan con vehemencia que Hamás utilice el hospital para fines militares. Por si sirve de algo, Hamás también lo niega.
Israel claims that Gaza's Al-Shifa hospital serves as a command center for Hamas. Norwegian physician Mads Gilbert, who has worked at Al-Shifa for 16 years says there is "no evidence at all" that that is the case.
"If it was a military command center, I would not work there." pic.twitter.com/pnNeRD9RuH
— Democracy Now! (@democracynow) October 30, 2023
El domingo, Israel publicó dos nuevos videos que, según afirmó, documentan un túnel fortificado de 55 metros a 10 metros debajo de Al-Shifa. Las imágenes de la cámara, presumiblemente filmadas usando un vehículo pilotado remotamente, terminan con lo que Israel dijo que es una puerta a prueba de explosiones equipada con un orificio para disparar que permite a Hamás atacar a las fuerzas de las FDI en caso de que intenten violar el supuesto centro de comando y control de Hamás. “Los hallazgos demuestran más allá de toda duda que los edificios del complejo hospitalario se utilizan como infraestructura para la organización terrorista Hamás, para actividades terroristas. Esta es una prueba más del uso cínico que la organización terrorista Hamás hace de los residentes de la Franja de Gaza como escudo humano para sus actividades terroristas asesinas”, dijo el ejército israelí en uncomunicado.
No es ningún secreto que Gaza alberga extensos túneles subterráneos. Durante las últimas dos décadas, Israel ha llevado a cabo repetidamente operaciones destinadas a destruir partes de las redes de túneles subterráneos y a menudo se ha jactado de sus éxitos al hacerlo. Los túneles que se extienden desde el sur de Gaza hasta Egipto sirvieron como líneas de contrabando durante muchos años. Israel afirmó que su propósito principal era mover armas, mientras que otros observadores los describieron como un salvavidas para contrabandear alimentos y otros suministros a la población bloqueada de Gaza. Es probable que ambas afirmaciones sean ciertas. En los últimos años, tanto Israel como Egipto han tomado medidas para bloquear o inundar túneles que penetran en su territorio y, según se informa, Israel instaló muros de hormigón subterráneos y sensores subterráneos alrededor de su frontera con Gaza para impedir que Hamás u otros militantes los utilicen para entrar en Israel y llevar a cabo operaciones. En 2006, agentes de Hamás utilizaron dicho túnel para llevar al soldado de las FDI Gilad Shalit de regreso a Gaza después de capturarlo. Shalit fue liberado como parte de un intercambio de prisioneros en 2011.
Los túneles de Al-Shifa fueron construidos por Israel
También es bien sabido que, de hecho, hay túneles y habitaciones debajo de Al-Shifa. Lo sabemos porque Israel admite que los construyó a principios de los años 1980. Según informes de los medios israelíes, las instalaciones subterráneas fueron diseñadas por los arquitectos de Tel Aviv Gershon Zippor y Benjamin Idelson. "Israel renovó y amplió el complejo hospitalario con ayuda estadounidense, en un proyecto que también incluía la excavación de un piso de concreto subterráneo", según Zvi Elhyani, fundador del Archivo de Arquitectura de Israel, en un artículo publicado en Ynetnews de Israel.
La infraestructura subterránea fue parte de un esfuerzo de modernización y expansión en Al-Shifa encargado por el Departamento de Obras Públicas de Israel. “La administración civil israelí en los territorios construyó el edificio número 2 del complejo hospitalario, que tiene un gran sótano de cemento que albergaba la lavandería del hospital y diversos servicios administrativos”, según un informe del periódico israelí Haaretz . Según se informa, la sala y los túneles debajo de Al-Shifa se completaron en 1983. La revista Tablet describió el espacio como “una sala de operaciones subterránea segura y una red de túneles”. El hijo de Zippor, Barak, que comenzó a trabajar en la firma de arquitectura de su padre en la década de 1990, dijo que durante la construcción en Al-Shifa en la década de 1980, los contratistas de construcción israelíes contrataron a Hamas para que proporcionara guardias de seguridad para evitar ataques en el sitio de construcción.
“Sabes, hace décadas dirigíamos el lugar, así que los ayudamos; fue hace décadas, muchas décadas, probablemente hace cuatro décadas, que les ayudamos a construir estos búnkeres para permitir más espacio para el funcionamiento del hospital dentro. "El tamaño muy limitado de este complejo", dijo el ex primer ministro israelí Ehud Barak a una presentadora de CNN visiblemente atónita, Christiane Amanpour.
Israel ha afirmado que tras la consolidación del poder de Hamas en Gaza en 2006, el grupo se hizo cargo de las instalaciones construidas por Israel debajo de Al-Shifa y las modernizó y expandió hasta convertirlas en un centro de operaciones de mando y control con todas las de la ley. Durante este período, algunos periodistas internacionales han descrito haber sido convocados a reuniones con funcionarios de Hamás en los terrenos del hospital, e Israel se ha referido durante mucho tiempo a él como una sede vital de Hamás. Durante la guerra de 2014 en Gaza, William Booth del Washington Post afirmó que Al-Shifa “se ha convertido en un cuartel general de facto para los líderes de Hamás, a quienes se puede ver en los pasillos y oficinas”. Suponiendo que estas afirmaciones sean ciertas, es vergonzoso y lógico que Hamás decidiera reunirse con periodistas en un hospital civil, dada la bien conocida campaña de Israel para asesinarlos sistemáticamente. Por vergonzoso que parezca, esto es muy diferente a utilizar una instalación secreta enterrada debajo del hospital como centro de mando y control militar.
El hecho de que Israel construyera túneles y habitaciones bajo el mando de Al-Shifa no prueba nada. Muchos hospitales modernos, especialmente en zonas de guerra, tienen infraestructura subterránea, incluidos los hospitales israelíes. Tampoco lo hacen los informes anteriores sobre miembros de Hamás que fueron vistos dentro del hospital. Israel necesitará presentar pruebas mucho más convincentes, en particular para respaldar su afirmación de que el sitio tenía una inmensa importancia militar y operativa durante esta guerra específica.
El estándar para tales pruebas debería ser extremadamente alto, particularmente debido al alcance de la muerte y el sufrimiento de civiles causados por las operaciones de Israel. La administración Biden hizo acusaciones sobre el Hospital Al-Shifa para ofrecer cobertura preventiva a Israel para atacarlo, y recae en la administración la responsabilidad de proporcionar pruebas claras e irrefutables que respalden sus afirmaciones específicas.
Propaganda versus derecho internacional
Mientras Israel libra su guerra propagandística contra Al-Shifa, simultáneamente está sitiando otro centro médico más, el Hospital Indonesio, que ahora es el único centro médico que queda en el norte de Gaza. El fuego de artillería israelí mató al menos a 12 personas en el hospital, según funcionarios locales. El ministro de Asuntos Exteriores de Indonesia, Retno Marsudi, acusó a Israel de violar el derecho internacional. "Todos los países, especialmente aquellos que tienen relaciones estrechas con Israel, deben utilizar toda su influencia y capacidades para instar a Israel a detener sus atrocidades", dijo el lunes.
El derecho internacional humanitario es claro en que, en caso de duda sobre si el hospital está siendo utilizado como parte en un conflicto para “cometer un acto perjudicial para el enemigo”, entonces sigue siendo un sitio protegido. Incluso si hubiera pruebas claras de que se había abusado del estatus de protección del hospital, existe una serie de reglas que rigen cualquier acción militar contra el hospital, y los pacientes civiles seguirían siendo personas protegidas.
“Incluso si el edificio pierde su protección especial, todas las personas que están dentro conservan la suya”, dijo Adil Haque, académico del juez Jon O. Newman en la Facultad de Derecho de Rutgers, en una entrevista con el Washington Post . "Todo lo que la fuerza atacante pueda hacer para permitir que continúen las funciones humanitarias de ese hospital, está obligado a hacerlo, incluso si hay alguna oficina en algún lugar del edificio donde tal vez haya un combatiente escondido".
El personal de Al-Shifa ha acusado directamente a Israel de causar la muerte de civiles en el hospital, incluidos varios bebés en la unidad de cuidados intensivos neonatales cuyas incubadoras quedaron inutilizadas después de que la electricidad fue severamente restringida como resultado del asedio israelí. El 18 de noviembre, un equipo humanitario de la ONU dirigido por la Organización Mundial de la Salud visitó Al-Shifa. Según la OMS, el personal de la delegación describió el hospital como una “zona de muerte” y afirmó en un comunicado : “Eran evidentes signos de bombardeos y disparos. El equipo vio una fosa común a la entrada del hospital y les dijeron que allí había más de 80 personas enterradas”.
Israel también ha publicado lo que dice son imágenes de CCTV de Al-Shifa grabadas inmediatamente después de la incursión de Hamás en Israel el 7 de octubre. Afirma que el vídeo muestra a combatientes armados entrando al hospital con dos rehenes internacionales, un tailandés y un nepalí. Las imágenes muestran a uno de los presuntos rehenes herido en una camilla.
Suponiendo que estas imágenes sean genuinas y que militantes armados de Hamas trajeran a un rehén herido para recibir tratamiento, ¿qué cree Israel que debería haber hecho el personal del hospital en este caso? Los médicos tienen la obligación ética de tratar a todos los heridos y no es su trabajo servir como policías u agentes de inteligencia.
"Teniendo en cuenta lo que informó la ocupación israelí, esto confirma que los hospitales del Ministerio de Salud brindan sus servicios médicos a todos los que los merecen, independientemente de su género y raza", dijo el Ministerio de Salud de Gaza en un comunicado después de que se publicaran los videos . El ministerio añadió que no podía verificar los vídeos. El portavoz de Hamás, Izzat Al-Rishq, dijo que Hamás había reconocido previamente que había tomado rehenes heridos en Al-Shifa el 7 de octubre. “Hemos publicado imágenes de todo eso y el portavoz del ejército [israelí] está actuando como si hubiera descubierto algo increíble. ," él dijo . Rishq también afirmó que algunos de los rehenes que Hamás tomó en Al-Shifa habían resultado heridos en ataques israelíes. Israel también ha afirmado, sin pruebas, que algunos rehenes fueron asesinados por Hamas dentro de los terrenos del hospital, aunque los propios mapas de las FDI indican que sus cuerpos fueron recuperados de lugares fuera del campus de Al-Shifa.
La responsabilidad de probar las afirmaciones generalizadas sobre el supuesto uso del hospital Al-Shifa por parte de Hamas recae tanto en el gobierno israelí como en sus patrocinadores en la administración Biden. Esta evidencia debería ser lo suficientemente fuerte como para demostrar de manera irrefutable que todo el sufrimiento y la muerte infligidos a los pacientes, médicos y enfermeras de Al-Shifa eran justificables según la ley, así como los principios básicos de proporcionalidad y moralidad. Semejante conclusión es insondable si se la sitúa en el contexto del sufrimiento civil causado por el asedio israelí al hospital.
Si se demuestra decisivamente que Hamas abusó intencionalmente del estatus de protección del hospital y, de hecho, operó activamente un centro de comando escondido debajo de él, entonces debería enfrentar cargos de crímenes de guerra por haberlo hecho. Hamás, y no los civiles inocentes, debe rendir cuentas por estas acciones.
Al mismo tiempo, si se demuestra que Israel perpetró fraude en su incesante campaña para presentar el hospital más importante de Gaza como una base militar secreta de Hamás, entonces el mundo debería responsabilizar a los funcionarios israelíes por esta propaganda grave y letal. De la misma manera, la administración Biden, incluido el propio presidente, debería tener que responder por el papel de Estados Unidos.
Israel está tratando de justificar su matanza a escala industrial de civiles en Gaza con acusaciones de que Hamás se esconde entre los civiles y los utiliza como escudos. Sin embargo, el principal grupo de derechos humanos de Israel, B’Tselem, ha documentado cómo las FDI han participado en esta misma actividad durante décadas. “Desde el comienzo de la ocupación en 1967, las fuerzas de seguridad israelíes han utilizado repetidamente a los palestinos en Cisjordania y en la Franja de Gaza como escudos humanos, ordenándoles realizar tareas militares que ponía en riesgo sus vidas”, según un informe de 2017 .
En un panorama más amplio, la controversia en torno a Hamas y Al-Shifa ha servido principalmente como una distracción de los hechos generales e indiscutibles sobre la guerra de Israel contra Gaza: utilizando armas, financiamiento y apoyo político de Estados Unidos, Israel ha emprendido una campaña de castigo colectivo violento. contra los civiles de Gaza.
La versión original de este artículo se publicó en inglés en el sitio The Intercept.
