Elecciones CABA. El kirchnerismo con Aníbal Ibarra: sello de impunidad por Cromañón

En la vida hay que elegir. El kirchnerismo eligió al responsable político de una las mayores masacres contra la juventud que se cobró la vida de 194 pibes en 2004. Aníbal Ibarra, quien fuera destituido de su cargo de Jefe de gobierno porteño el 7 de marzo de 2006, vuelve este año a las ligas electorales de la ciudad de la mano del kirchnerismo que lo incorporó con su partido, “Frente Progresista y Popular”. Se presenta en la lista del Frente para la Victoria para competir en las PASO de la ciudad el próximo 26 de abril. Resta ver en qué puesto lo hará, aunque Ibarra ya viene haciendo campaña como pre candidato a Jefe de Gobierno.

La Masacre de Cromañon destapó el enorme entramado de corrupción del negocio de los boliches y recitales: habilitaciones truchas, coimas entre los dueños de los establecimientos, comisarías, inspectores y funcionarios, falta de controles, y una ciudad que por falta de inversión en los servicios públicos colapsa frente a situaciones de emergencia de esa magnitud.

El gobierno de Ibarra, había recibido 36 alertas de irregularidades de boliches como Cromañon y se dejaron pasar, porque contaban con una gran “caja negra” de coimas de los empresarios de la noche. No fue casualidad que su primer aparición pública después de la Masacre, fuera acompañado por integrantes de la Cámara de Empresarios de Locales Bailables.

La Cámpora: los cálculos electorales ante todo

La incorporación de Ibarra a las listas del kirchnerismo porteño tuvo consensos y disensos. Pero la polémica interna, ¿fue porque alguno se negó a compartir lista con el responsable de la Masacre de 194 pibes en Cromañon? No, no somos ilusos.
Juan Cabandié, integrante de La Cámpora, hace rato que quiere encabezar la lista en la ciudad como Jefe de Gobierno, y no veía con buenos ojos la incorporación de Ibarra a la interna del Frente para la Victoria, pero sólo por temor a que le saque ventaja en la contienda.

De todas formas, se terminó imponiendo el visto bueno de otro de los dirigentes de La Cámpora: Andrés “Cuervo” Larroque es quien, junto a Carlos Zannini, cierra los acuerdos electorales, siempre con el aval de la Casa Rosada. Terminan sumando a Ibarra porque están preocupados por mantener un piso de votos en la ciudad, y para eso lo necesitan adentro. Ibarra también contó con el apoyo de Daniel Scioli y Gabriel Mariotto para cerrar el acuerdo.

Para la juventud kirchnerista, cuando de ocupar un silloncito se trata, no importa ni siquiera la vida de los jóvenes que esa noche del 30 de diciembre de 2004 quedaron atrapados en el boliche de Once, y que siguen exigiendo justicia. “Los cálculos electorales ante todo” podría ser el lema de la juventud kirchnerista.

Dos plataformas: “194 muertos” la de Ibarra, “privatización de la cultura” la de Macri

El diciembre pasado, al cumplirse 10 años de la Masacre sobrevivientes y familiares realizaron un acto en Plaza de Mayo y fueron categóricos en denunciar que “el kirchnerismo protege a los principales responsables de la tragedia”, “les recordamos a los ciudadanos que estén pensando en votar a Ibarra que su plataforma son 194 muertos y su proyecto político es la corrupción y la muerte joven evitable”.

Esta plataforma vale para todo el kirchnerismo. ¿Por qué la juventud debería votarlos? Por el contrario, lo más realista es que los jóvenes que recuerdan Cromañon y exigen que se termine la impunidad repudien al conjunto del kirchnerismo por semejante provocación a la vida de los pibes y pibas.

A fines de febrero de este año, familiares y sobrevivientes convocaron una conferencia de prensa en repudio a la postulación de Aníbal Ibarra, donde dijeron que "Como lamentablemente no fue inhabilitado, esto le permitió volver a presentarse (…). Así, protegido por el Frente para la Victoria, fue dos veces legislador de la Ciudad; ahora pretende volver a ser justamente Jefe de Gobierno: nada más y nada menos que el cargo del cual fue destituido".

En esa misma conferencia de prensa, apuntaron también contra el actual Jefe de Gobierno porteño, Mauricio Macri. Denunciaron que: “La política del actual Gobierno de la Ciudad está dirigida a la privatización de la cultura y al cierre de lugares de esparcimiento que no estén alineados, para entregar el -negocio de la noche- a unos pocos empresarios afines. La lógica reinante sigue siendo la misma que en épocas de Ibarra y todo está atado con alambres. Así lo vimos en el caso del boliche Beara, en el Gimnasio Orión de Villa Urquiza y los centenares de accidentes producidos por la faltas de control".

Patricio del Corro, legislador electo en la ciudad por el Frente de Izquierda (Juventud del PTS) , apoyó la denuncia al kirchnerismo y el macrismo de sobrevivientes y familiares de Cromañón porque: “Ambos sectores son cómplices de las impunidad que se mantiene a 10 años de la masacre. Con el macrismo en la ciudad avanzó la privatización de la cultura para la juventud, con lugares más caros para salir o ir a escuchar una banda, aumentando los controles policiales pero no hacia los empresarios sino contra los jóvenes. El kirchnerismo que va con Ibarra no puede ser una alternativa, ya se demostró que su prioridad son los negocios a costa de la vida de la juventud”.

Una lucha que se multiplica

Cromañon marcó a toda una generación. La lucha que se inició desde un principio continúa a 10 años, porque fueron 194 pibes y pibas que se cobró el negocio de la noche y la corrupción de los funcionarios, a la que se suman 17 sobrevivientes que se quitaron la vida.

El próximo 24 de marzo, la juventud tiene que llenar las calles para mostrar una voz alternativa a los proyectos del macrismo y el kirchnerismo, y levantar bien alto las banderas contra la impunidad de ayer y de hoy, junto a los organismos de derechos humanos independientes, los trabajadores, los centros de estudiantes combativos y la izquierda. Ellos quisieron mostrar en las calles sus proyectos el 18F y el 1M. Este 24 de marzo es nuestra marcha.