Es lo que la industria alimenticia nos ha hecho creer, que sin carne nos volvemos débiles, sin leche nuestros huesos se descalcificarán, sin huevo, queso, pescado, no podemos obtener los aminoácidos esenciales para vivir.
Martes 6 de marzo de 2018
La gente suele obsesionarse con la necesidad de proteínas en sus alimentos o la falta de nutrientes que podría sufrir una alimentación basada en plantas, pero diversos estudios han comprobado totalmente lo contrario, una alimentación basada en plantas ha resultado ser por lejos la más saludable en nuestra época.
La mayoría de nuestros alimentos son procesados y contaminados con químicos tóxicos que lo único que nos aportan son enfermedades, por lo que es importante replantearse qué estamos comiendo, con qué alimentos estamos formando nuestro cuerpo, y qué le estamos dando a nuestros hijos.
Dr. Marion Nestle, Ph.D, presidente del Departamento de Nutricion en la Universidad de New York afirma: “No tenemos que preocuparnos acerca de las proteínas nunca más, porque absolutamente no es un problema, incluso entre los niños. En todo caso, hablamos de los peligros de las dietas altas en proteínas. Obtener la proteína necesaria es simplemente cuestión de obtener suficientes calorías”.
Estudio respaldado muestra que en promedio aquellos que siguen una dieta completamente vegana, están recibiendo 70% más proteína que la requerida, obtenidas de una dieta balanceada que incluye vegetales, legumbres, granos, frutos secos y semillas.
La organización mundial de la salud recomienda un “requisito promedio” de 0,66g de proteína por kg en un peso ideal, y un “nivel seguro” de 0,86g por kg. Sería entonces 54g para un hombre de 81 kg.
Hace 10 años era raro que alguien no consumiera carne y antes de eso peor aún, en estos días se hace cada vez más común conocer gente que no la come, que es vegetariana o vegana; y es que también tenemos mucho más acceso a la información, a descubrir la verdad oculta detrás de nuestros alimentos y optar por estilos de vida más saludables y amigables con el planeta.
Dejar de comer carne y sus derivados no es una decisión que se toma de un día para otro, es una transición, una exploración de información (a la desinformación) que nunca antes habíamos cuestionado, una despertar de consciencia que nos lleva a un despertar empático, un remesón que nos hace abrir los ojos y volcarnos hacia quiénes nos han estado engañando desde hace muchísimo tiempo, un revoltijo de emociones y afirmación de ideales que hacen que dejar de consumir los productos del capitalismo sea mucho más fácil de lo que imaginamos.
Los invitamos a cuestionar, a debatir con nosotros mismos, a probar nuevas ideas y abrir nuevos caminos.
Beneficios receta:
Zapallo: bajo contenido de calorías y grasas, contiene proteínas y carbohidratos saludables, vitamina C, vitamina A, magnesio, beta caroteno, fibra, folato, cobre, riboflavina, fósforo, potasio y magnesio.
Todo lo anterior contribuye a la prevención del cáncer, salud del corazón, prevenir y tratar enfermedades del colon.
Acelga: Vitamina A, potasio, folatos que contribuyen a la formación de glóbulos rojos y blancos y anticuerpos de sistema inmunológico. hierro, yodo, magnesio, vitamina C.
Jengibre: Aporta vitaminas, minerales, aceites esenciales, antioxidantes y aminoácidos, Estimula el páncreas y aumenta la producción de enzimas que favorecen a la digestión, para los problemas en el aparato respiratorio, tales como la gripe, la fiebre o la congestión nasal.
Nota de la Editora
Compartimos esta columna, porque consideramos correcta la denuncia de abusos de empresarias contra animales, seres humanos y el medioambiente, pero agregamos a esta denuncia, la perspectiva de luchar por una sociedad de productores libres donde no exista explotación y opresión.
Para ello será necesario, no sólo la decisión individual de no consumir un producto, sino que además plantea la necesidad de expropiar los medios de producción y ponerlos en manos de la clase trabajadora, la única clase capaz de construir esa sociedad.