Opinión. El negacionismo de derecha, el peronismo que no es y la crisis. La salida, por izquierda

El empezar a escribir, siempre es difícil. La facilidad aparece, como no podría ser de otra forma, por necesidad. Es que continuar viendo que el 54% (y esta vez, no es de los votos [1] ) de los pibes menores de 15 años tienen carencias para vivir, es decir son pobres, no puede pasar desapercibido [2] . No da igual. Por eso es necesario pensar y problematizar qué es lo que sucede, y sobre todo, cuál es la salida.

Peronismo era el de antes

En la fácil receta liberal-gorila que encarnan los sectores periodísticos encumbrados en empresas periodísticas como La Nación, la respuesta a todos los males es “el peronismo” como el espacio político que “se ocupa de los pobres urbanos”. O, mejor dicho, se ocupaba… Claro, como varios conocidos decían a este redactor “yo soy peronista de Evita, de esa que decía que, frente a cada necesidad, hay un derecho. Pero este cada vez me saca mas”, por ejemplo. De igual forma, decían otros luchadores contra el gatillo fácil “A mi ya no me sorprende nada. Realmente pensé que con este gobierno iba a ser distinto, pero no. Lo único en lo que tengo esperanza es en la lucha en las calles”.

Es que como me decía un compañero con un entrañable poder de síntesis y altura, más política que de talla, el problema que tiene el peronismo, es lo que Pagni titula como “El nudo” pero para los liberales no peronistas. Ese nudo, que ata al peronismo a su centro de gravedad: el conurbano bonaerense. Y la realidad de ese conurbano bonaerense es catastrófica. Por eso los testimonios de los “peronistas de Evita” son lapidarios para el propio peronismo. O de los que dicen que son peronistas hoy. Como sea, en el “Frente de Todos” están efectivamente todos los sectores que fueron derrotados en 2015, desde los pseudo izquierdistas como “Patria Grande” de Lozano, Grabois & Co; hasta los enviados de EEUU como Massa, y los Fernandez; pasando por los Nacionalistas de Kicillof, Berni y Cristina. Y es esa “gran coalición” la responsable de, no solo pagar “dolar sobre dolar” la estafa que entre Macri y el FMI contrajeron para Argentina y que terminó con una devaluación del 600% de la moneda nacional [3] , más del 30% de la población está debajo de la línea de la pobreza y una pérdida del poder adquisitivo del salario de entre un 15 y 25%. El Frente de Todos prometió “llenar la heladera”. Lo que no había dicho era la heladera de quien(es) [4] . Y era obvio que, con una economía sometida al FMI esa promesa iba a ser una mentira gigante. Gigante como los sentidos festejos por el campeonato de la escaloneta (y que éstos, a los que muchos se subieron) ayudaron a hacer pasar mas facil los ajustes del enviado de la embajada yankee, el “super ministro” Sergio Massa

El negacionismo que ilumina

“¿Saben por qué reivindican el negacionismo los Milei y hablan de ´el curro de los derechos humanos´ como Macri? Porque los planes que dicen que van a aplicar en 100 días, lo que busca es aplastar a la clase trabajadora, como Martinez de Hoz en el 76. Y eso no lo vamos a permitir, contra eso vamos a luchar, y vos no me vas a callar, Villarruel” Sostuvo la diputada nacional y precandidata a Presidente por el Frente de Izquierda y los Trabajadores - Unidad Myriam Bregman en un contundente y encendido discurso, el pasado 28 de marzo [5] .

Como bien decía Bregman, los negacionistas aparecen como una respuesta a la crisis; y terminan ayudando al peronismo a ocultar el ajuste brutal que está haciendo. Lo cual, de conjunto presiona a que la sociedad este discutiendo aberraciones como las de Milei y los liberales que llegan hasta decir que “la venta de personas y órganos tiene que hacerse legal”; para no discutir, por ejemplo cómo la tecnología de conjunto, es puesta en función de resolver los problemas de las mayorías. Parece una generalidad pero no lo es, cuando por ejemplo vemos como una beba de 3 meses muere en la ciudad mas rica del pais y una de las 10 mas ricas de latinoamerica, a escasos metros de la Casa de Gobierno, por hambre. En el país que tiene la capacidad de alimentar a 400 millones de personas, y que no llega a tener de población 50 millones (el 10%) ¡Los recien nacidos se mueren de hambre! Los negacionistas, lo son también de esto. Por eso las tareas pendientes de las mayorías trabajadoras son urgentes. Como dijera a este cronista, una docente de Loma Hermosa, Tres de Febrero “no tenemos mucho tiempo”.

Una salida: por y con la izquierda.

Macri (¿Y Cristina?) fuera de juego por su propia incapacidad de recolectar votos, pero la convicción que la única salida a la crisis de los capitalistas y dueños del país es el ajuste, sigue vigente. Es que el peronismo vino a suplantar al pan-macrismo. Pero no a terminar con su plan. Para eso mantienen latentes de que “peor sería tener a los liberales en el poder”. Los herederos de Menem y Cavallo, como se mencionó anteriormente, no tienen problema en comerciar, personas y hasta órganos… Por eso, la única salida realista a la decadente democracia en la que vivimos, es atacando los intereses de los capitalistas y empresarios. Eso es una tarea esencial para enfrentar no solo a los neofascistas confesos, sino y sobre todo a los que visten ropaje de progresistas, pero son los que aplican el programa de recortes con el discurso de la redistribución y justicia social.
Construir una salida de otra clase, la de los trabajadores y sectores populares es la respuesta para no volver a tener que pasar la experiencia de miseria y decadencia social. Se puede terminar con las familias en situación de calle, se puede terminar con que falten 1 millón de viviendas, se puede terminar, incluso con que haya que vivir trabajando y morir allí dentro. No va a ser fácil, pero es por lo cual tenemos que pelear. Todo lo demás, tiene que merecer nuestro desprecio. Por eso, la salida es por izquierda. Y vos ¿De qué lado de la mecha te encontras?