El fin de semana el encarcelado ex presidente solicitó nuevamente el indulto humanitario. Ollanta Humala, cuyo mandato vence el próximo 28 de julio, dijo que no se lo dará.
Martes 26 de julio de 2016 13:42
“Yo no lo voy a indultar”. Esas fueron las palabras con las que el presidente peruano, Ollanta Humala, respondió el lunes a la segunda solicitud de indulto que realizó el ex mandatario Alberto Fujimori el pasado viernes 22 al Ministerio de Justicia y Derechos Humanos, cinco días antes de que finalice el mandato del actual presidente.
Humala declaró el lunes en una entrevista con el canal local de televisión latina que "No puedo indultarlo porque como Presidente de la República no puedo tomar una decisión si no tengo las recomendaciones de la comisión (de indultos del Gobierno) que justo el día de hoy (lunes) ha admitido el pedido de indulto a Fujimori", precisó. Además agregó que "El ministro de Justicia (Aldo Vázquez) me ha informado de que la comisión se va a tomar en promedio entre dos meses y dos meses y medio para poder entregar las recomendaciones al Presidente, por lo tanto en esas condiciones esto ya no me va a corresponder a mi tomar esa decisión”.
Humala dejará la presidencia el día 28 de julio, por lo que la decisión le correspondería al presidente electo, Pedro Pablo Kuczynski, que deberá gobernarcon un Congreso dominado por el partido conservador Fuerza Popular, liderado por su derrotada rival Keiko Fujimori, la hija mayor del ex presidente.
Kuczynski adelantó en reiteradas oportunidades que no lo indultará. Sin embargo, dejó abierta la posibilidad de que Fujimori cumpla su condena bajo arresto domiciliario si es que el próximo Congreso formula y aprueba una ley que lo permita.
La Comisión de Gracias Presidenciales, tras aceptar el proceso de indulto, solicitó a las autoridades carcelarias un informe médico sobre el estado de salud del ex mandatario de 78 años, preso en Lima desde el 2007, cuando se logró su extradición de Chile. Sus médicos afirman que sufre de depresión, hipertensión arterial y ha sido operado varias veces en la lengua por lesiones cancerígenas.
Crímenes de lesa humanidad
El dictador Fujimori fue condenado en 2009 a 25 años de prisión por corrupción y delitos de lesa humanidad durante su década en el poder, entre 1990 y el 2000, marcada por un autogolpe el 5 de abril de 1992. Durante esos años, Fujimori fue responsable de secuestros y asesinatos, como los de la Universidad La Cantuta en 1992 y Barrios Altos 1991, casos emblemáticos por los que fue condenado por homicidio calificado y asesinato con alevosía, lesiones graves y secuestro.