Ellas se organizan y luchan revelando el vergonzoso papel de la COR, COB y demás sindicatos y federaciones, convertidos en agentes de la patronal y el gobierno. Los mismos abusos a los trabajadores que durante las huelgas del 2007, 2016-17 y ahora, 2024. La misma respuesta es necesaria: la organización y la movilización.
Lunes 12 de agosto
La pasada semana trabajadoras de aseo urbano de la empresa TREBOL fueron agredidas en la ex alcaldía quemada con grupos de choque por denunciar ante los medios de comunicación las condiciones laborales de abuso patronal y perdida de derechos laborales. La dirigencia de la COR salió a defender al dirigente que está parcializado con la empresa y negó la vulneración de los derechos laborales.
Las trabajadoras de Aseo Urbano de El Alto, de la empresa TREBOL, tienen la función esencial de mantener limpias las calles y avenidas de la ciudad de El Alto. Son 1200 trabajadores, en su gran mayoría mujeres. De las cuales 600 están figurando como trabajadoras de planta, la otra mitad se divide en algunas decenas de fantasmas y cientos de trabajadoras “OPS”. Las primeras son trabajadoras que cobran sin trabajar, es decir, son una fuerza al servicio del amedrentamiento y matonaje patronal, y las OPS son cientos de precarizadas, que están meses y hasta años sin aportes a la seguridad social, sin seguro y sin estabilidad laboral. Trabajan años y cuando son despedidos no les pagan ni un centavo.
Las vulneraciones son varias: acoso laboral de supervisores a trabajadoras de avanzada edad, acoso sexual, extensión de horas de trabajo sin goce de horas extras, extorción a trabajadoras embarazadas para trabajar, procesos penales contra las trabajadoras que reclaman derechos, accidentes laborales y la última, que prueba las denuncias de las trabajadoras, es el amedrentamiento que sufrieron en la ex alcaldía quemada de El Alto, cuando se disponían a manifestar ante los medios de comunicación todas estas violaciones laborales.
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Para colmo de males los dirigentes, como la Central Obrera Regional de El Alto, que deberían defender a las trabajadoras, defienden al dirigente, que a su vez defiende a la empresa TREBOL y niega todas las acusaciones. Cuando en ese momento, los medios de prensa fuimos testigos de la agresión de grupos de choque a las trabajadoras que denunciaron la situación en la que se encuentran, escenario donde más de un colega periodista fue agredido.
Este es un ejemplo testigo de cómo se encuentran las y los trabajadores en el país. Los empresarios explotan largas jornadas laborales, los famosos trabajos a “presión” en los avisos de trabajo. La mayoría de las empresas han logrado librarse de los sindicatos debido a que los dirigentes han sido comprados con prebendas o ventajas en los centros de trabajo. Toda esta libertad y actitud de los empresarios avalada por el gobierno y el ministerio de trabajo.
Que se haya llegado a esta situación es la responsabilidad directa de los dirigentes de la Central Obrera Boliviana (COB), Central Obrera Departamental (COD) y Central Obrera Regional (COR). Que por un lado reciben prebendas del gobierno y por el otro negocian con los empresarios una serie de ventajas en los centros de trabajo. Actúan como policías en las fábricas acosando o extorsionando a los trabajadores que se atrevan a reclamar algún derecho. Con este control policial los trabajadores no se animan a denunciar la explotación y los distintos niveles de abuso patronal.
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Con estos dirigentes burócratas parcializados existe un control político del gobierno del MAS sobre los trabajadores. Pisoteando la independencia política de los y las trabajadoras que están escritos en los estatutos de las centrales sindicales.
En estos 21 años de gobierno del MAS con Evo Morales y ahora con Arce Catacora se llenaron la boca con el famoso “proceso de cambio”, que en la realidad para las y los trabajadores no ha cambiado nada. Lo que está sucediendo en Aseo Urbano de El Alto con la empresa privada TREBOL, la más bárbara explotación a mujeres y trabajadoras, es lo cotidiano. Hace más de 20 años las trabajadoras luchaban por un sindicato que garantice derechos y hoy se encuentran peleando para que no desaparezca, porque en los hechos, nadie las defiende.
Hoy Arce Catacora se dispone a pactar con empresarios soluciones a la crisis económica. Las y los trabajadores que sufren la feroz explotación no están como invitados. Lo acompaña la línea de dirigentes corrompidos de la COB, COR, COD y también de los movimientos campesinos. ¿Ellos pensaran en los de abajo? No, no lo han hecho durante estos años, han entregado grandes ventajas a los empresarios y banqueros.
Las trabajadoras de Aseo Urbano están empezando a luchar por derechos laborales para cambiar su realidad, denunciando todos estos abusos. Ya que no piensan que la solución a sus problemas venga de dirigentes vendidos o de políticos que “prometen proceso de cambio” que nunca llega.
Hay que rodear de solidaridad la lucha de las trabajadoras de aseo urbano que están peleando para mejorar su situación y cambiar su realidad. La lucha es la única forma para que las y los trabajadores hacen escuchar su voz y pueden conseguir sus derechos. Hoy las compañeras se están revelando contra el patrón, contra los dirigentes corrompidos, esto tiene que ser la chispa para que la mayoría de los trabajadores ocupados, desocupados y precarizados luchen juntos.
Esta lucha tiene que servir para miles de trabajadores abramos los ojos y veamos que los únicos beneficiados del proceso de cambio son los empresarios, banqueros, políticos y los burócratas sindicales.