La ciudad de Arequipa nuevamente se encuentra frente a un proceso privatizador que involucra a todo el sur del país. La licencia de funcionamiento entregada por el presidente sustituto Martín Vizcarra a la compañía Southern, violenta directamente la voluntad de los pobladores del Valle de Tambo. Martín Vizcarra sin previa consulta pasó por encima de los intereses de esta localidad para hacer primar los intereses del capital extranjero.
Sábado 3 de agosto de 2019
Una vez más el Estado da muestra de su total rompimiento con el pueblo a quien, en teoría, debe su autoridad, por eso envía tropas militares y policiales para imponer la voluntad de la empresa privada sin importarle las consecuencias que pueda generar en la vida y salud de miles de pobladores.
El apoyo que ha generado la lucha del Valle de Tambo no es solo por simpatía con sus reclamos, es porque a lo largo de todo el país diferentes proyectos mineros quieren establecerse bajo la misma modalidad: ignorar la voluntad popular, transgredir las normas mínimas de protección ambiental y pactar directamente con el poder de turno para imponer su voluntad. Demás está decir que todos estos proyectos buscan saquear nuestros recursos naturales sin importarles un mínimo las consecuencias en la población, el medio ambiente y la economía nacional.
En medio de este escenario las diferentes organizaciones populares de Arequipa, en conjunto con diferentes gremios sindicales se han unido para mostrar su respaldo a la lucha del Valle. Por eso, cuando se dio el paro regional del 24 de julio se dieron diversas actividades, entre ellas; movilizaciones por toda la ciudad, vigilias, manifestaciones, lavado de bandera, etc. Las cuales mostraron la predisposición a la lucha por parte del pueblo arequipeño.
Las primeras reuniones se dieron en el local de la Federación Departamental de Trabajadores de Arequipa FDTA, que albergó a un centenar de dirigentes de las diferentes organizaciones de Arequipa, quienes acordaron como punto central de la lucha la Cancelación del Proyecto Tía María, no permitiendo otra respuesta por parte del Ejecutivo. La Coordinadora en defensa del Valle de Tambo se hizo presente en las calles de la ciudad desde el día siguiente de la promulgación de la licencia de funcionamiento, no cesando hasta el día de hoy, manteniendo una lucha incansable que ha contagiado a una cantidad mucho mayor de la población que se han sumado a dichas movilizaciones.
Ahora, todas las organizaciones y gremios sindicales agrupados en torno al Comando de Lucha por la Defensa del Valle de Tambo han acordado iniciar un paro indefinido desde el día lunes 5 de agosto, declarándose en Asamblea Permanente y con una convocatoria abierta a todas las organizaciones que deseen plegarse a la lucha. También acordaron organizar ollas comunes en diferentes puntos estratégicos de la ciudad para mantener la huelga; se tenía previsto un viaje a Lima con los principales dirigentes de la ciudad, el cual ha sido postergado para centrarse en la organización del paro en la ciudad y organizar una huelga de hambre mixta con participación de personas de Arequipa y del Valle de Tambo.
Diversos mercados de la ciudad también se unirán a la lucha y cerraran sus respectivos centros de abastos desde el día lunes, para lo cual ya están informando a la población a fin de que puedan tomar sus precauciones. El punto flaco de la protesta se encuentra en el sector transporte que aún no tiene un pronunciamiento a favor de la paralización, sin embargo, se espera que la contundencia presente en las diversas organizaciones de base, logren inducirlos a asumir una postura de apoyo al paro.
Los medios de comunicación se encuentran divididos. Mientras existe un grueso número que apoya la defensa del Valle, existe un sector de la prensa, obviamente los medios de mayor sintonía que muestran una postura de acomodo a las circunstancias dejando mucho que desear de la labor periodística que ejercen. Algunos medios han dedicado toda su programación a informar sobre los acontecimientos de la protesta y permitiendo - mediante el hilo telefónico - que se incentive a la población a sumarse a la movilización, accionar que está dando resultado.
Nuevamente en estos momentos de tensión y conflicto se hace necesaria la dirección del movimiento, una conducción real y de clase que oriente estas luchas a un proceso mayor de cambio y transformación de nuestra sociedad, las condiciones están dadas, y esperemos que la lucha iniciada no termine con una traición como la sucedida en el Arequipazo del 2002.
La lucha en las calles es muestra de la inconformidad de la población con el régimen político vigente y su modelo económico neoliberal. El anuncio del presidente sustituto de adelantar las elecciones busca acallar estos reclamos y distraer la lucha de los pueblos, lucha que no solo está sucediendo en Arequipa. En todo el Perú las manifestaciones se hacen presentes y es momento de poder articular todos esos reclamos en busca de un nuevo futuro para nuestro país, que no pase por un reformismo displicente y servil. El nuevo surgir de nuestro pueblo debe partir de las calles, de las reivindicaciones justas de los que sufren día a día los embates de un modelo económico nefasto que nos mantiene en el subempleo y en condiciones precarias de existencia.
La lucha del Valle de Tambo es la muestra palpable de un pueblo que no se resigna a ser simple espectador del saqueo de nuestros recursos, que se cansó de la indiferencia de nuestras autoridades al clamor popular de un cambio de rumbo a nuestra economía. La lucha del Valle de Tambo es la lucha de todas y todos los que buscamos la transformación real de nuestro país y que no aceptamos la realidad que nos imponen. No tenemos nada que perder y sí, un futuro nuevo por ganar.